Río Verde: emociones refrescantes
El río Verde es uno de los tesoros naturales de la provincia de Granada. Enclavado en la Sierra de la Almijara, nos ofrece diversas posibilidades para disfrutar de su cauce, sus aguas cristalinas, barrancos, vegetación y parajes geológicos de gran belleza.
El lugar permite tanto la práctica del senderismo, con un refrescante chapuzón en sus amplias y bellísimas pozas, muy gratificante ahora en verano, y también, para las personas más aventureras, el descenso de su cauce y sus cañones mediante el barranquismo a través de personal especializado, ya que está considerada la mejor zona de Andalucía para iniciarse en esta práctica deportiva y disfrutar a todos los niveles.
Si se prefiere la ruta senderista, la opción más habitual es iniciar el recorrido en el kilómetro 31 de la carretera A-4050, la popularmente conocida como la Carretera de la Cabra. Ahí encontraremos zonas para poder dejar el vehículo y el inicio de un sendero señalizado con un panel indicativo.
La ruta desciende por un aprupto aunque bello sendero, con zonas provistas de barandas protectoras de apoyo, y excelentes vistas de la Sierra de la Almijara, con el pico Lopera (1.485 m), como el más cercano a la carretera.
Serpenteante sendero con barandas que ofrecen mayor seguridad. juntadeandalucia.es
El sendero lleva a uno de los parajes más espectaculares de la ruta, la Cascada de los Árboles Petrificados. Una salto de agua por el que hace casi un siglo los madereros transportaban troncos río abajo hacia el aserradero de Cázulas. Algunos troncos quedaban atrapados en la cascada y, con el tiempo, el agua, muy caliza, ha ido mineralizándolos y convirtiéndolos en auténticos fósiles, lo que da al paraje un aspecto sorprendente.
Bellísima Cascada de los Árboles Petrificados. Miguel Ángel Gallego
Junto a la cascada se encuentra la cueva de Funes, con preciosas formaciones de estalactitas y estalagmitas, que también es interesante visitar.
Si se desea hacer la ruta más corta y emprender el regreso, se puede hacer por el mismo camino de vuelta o a través de una pista forestal al frente que lleva en ascenso hasta la pantaneta de Funes, un pequeño pero bello embalse por encima de la cascada anterior y de otras que caen al barranco de las Chorreras. De la pantaneta de Funes el carril nos lleva de nuevo hacia la carretera, a un punto algo más arriba de donde dejamos los vehículos, aunque el camino se hace pesado en días de mucho calor. Esta versión del recorrido tiene unos 10 km ida y vuelta.
Pantaneta de Funes. M. a.Gallego
En caso de seguir el recorrido por el río, un sendero bordeando el cauce nos lleva, contemplando otras bellas cascadas de Funes, y tras un primer ascenso y un fuerte desenso después, hasta las grandes pozas del río Verde, en las que podemos darnos un buen y refrescante chapuzón, y donde nos encontraremos con practicantes de barranquismo, que iniciaron su recorrido más arriba.
Una de las principales pozas de Río Verde, con aguas verde esmeralda. M.A.Gallego
Son aguas cristalinas, de gran belleza y un caudan constante y soleado, que invitan a descansar junto a las pozas y recodos del río.
A partir de aquí hay dos opciones. Emprender el camino de vuelta por el mismo recorrido a la inversa, en ruta lineal (unos 16 km en total) o proseguir por el río, atravesándolo varias veces a través de bellos puentes colgantes o cruzando su cauce, entre piedras, con la debida precaución y cuidado.
Este sendero de los puentes nos lleva a un gran mirador y después a la junta de los ríos Verde y Nacimiento. Hasta ahí el recorrido desde el inicio es de unos 10-12 km. Desde ese punto, donde en los alrededores existe espacio para aparcar, hay un carril que nos lleva hasta la Carretera de la Cabra, en un punto unos kilómetros más abajo, sentido hacia la costa, respecto a donde dejamos los vehículos al inicio.
Para hacer la ruta hasta la junta de los ríos y no tener regresar por donde vinimos, sino dirigirnos por este carril de nuevo hasta la carretera, es conveniente preparar previamente la logística, de forma que, antes de iniciar el recorrido, traslademos vehículos hacia el carril de la junta de los ríos, para tenerlos listos cuando terminemos la ruta. Ese carril atraviesa una finca particular, la Cooperativa de Cázulas, que cobra 5 euros por vehículo y por persona, por lo que hay que tenerlo en cuenta.
Barranquismo
Si en lugar de senderismo con chapuzones lo que queremos es buscar aventura y adrenalina, podemos practicar el barranquismo a través de los numerosos cañones, toboganes de roca y espectaculares saltos de agua a lo largo del río Verde. Una experiencia única, pero, eso sí, siempre a través de empresas especializadas, ya que se trata de una actividad no exenta de riesgos y que requiere la asistencia y preparación técnica de monitores expertos, además de la autorización previa de la Junta de Andalucía para al acceso al río a realizar esta práctica deportiva.
Hay varias empresas especialidas en turismo natural y de aventura que ofrecen rutas organizadas para practicar el barranquismo en río Verde, y a diferentes niveles, tanto de iniciación, apto casi para todos los públicos, como avanzado, en la que ya se requiere una experiencia previa y una mejor condición física. En cualquier caso, hace falta traje de neopreno, casco, arnés y calzado que se pueda mojar y con suela que agarre y resbale lo menos posible.
Entre estas empresas están:
- Ocioaventura. Teléfono: 629 627523 Web: www.ocioaventura.com Email: ocioaventura@gmail.com
- Nevadensis. Teléfono: 958 763127 Web: www.nevadensis.com Email: guias@nevadensis.com
- Makalu. Teléfono: 958 26 01 76 - 605 85 35 42 Web: www.makaluaventura.com