La auditoría calca el plan previo de eliminar la Escuela Andaluza de Salud Pública
Sede de la Escuela Andaluza de Salud Pública. easp
La auditoría de la Escuela Andaluza de Salud Pública (EASP), que se enmarca en la evaluación del sector público encargada por la Junta, plasma en una de sus principales conclusiones el plan previo del Gobierno andaluz de extinguir su actividad para integrar su labor, internacionalmente reconocida, en otra entidad pública.
El informe, consultado por El Independiente de Granada, no habla específicamente del Instituto de Salud de Andalucía, que es el nuevo organismo que ya tramita el Gobierno de PP y Ciudadanos, que ha dado el visto bueno al anteproyecto de Ley para su creación, sino que señala a otras entidades ya existentes para que asuman líneas de actividad de la escuela. En especial a la Fundación Progreso y Salud, precisamente la otra entidad que se integrará también en el futuro instituto.
Así, la auditoría, elaborada por EY -Ernst & Young-, argumenta la existencia de "duplicidades" entre las funciones y competencias de la Escuela en tres de sus líneas de actividad: formación, consultoría e investigación. Para la primera apunta -en el resumen ejecutivo- que podría ser asumida por la Fundación Progreso y Salud (FPS) o por el Instituto Andaluz de Administración Pública (IAAP); para las labores de consultoría, indca que podría ser acometida igualmente por la Fundación Progreso y Salud; y para el área de investigación, apunta que podría integrarse dentro de las actividades competenciales de la Fundación Progreso y Salud y la Fundación para la Investigación Biosanitaria de Andalucía Oriental (FIBAO).
"Consideramos que la actividad de la EASP no tiene carácter mercantil por lo que su naturaleza jurídica de la EASP como sociedad no es la más adecuada para los servicios que presta, teniendo en cuenta además que su financiación está compuesta en un 74%, tanto en 2018 como en 2019, de transferencias procedentes de la Junta de Andalucía", recoge el resumen ejecutivo de la auditoría para añadir que "en relación con las conclusiones expuestas recomendamos que se replantee la continuidad de la EASP como sociedad anónima y se proceda al cese de su actividad, extinción de la entidad y traspaso de recursos y actividades a las entidades que proponemos -FPS, FIBAO e IAAP-".
El informe provisional de la auditoría ya suscitó críticas en diciembre pasado. Desde entonces, la Junta ha avanzado en la tramitación del Instituto que sustituirá a la Escuela
Los planes para suprimir la Escuela, desvelados por El Independiente de Granada, se pusieron en marcha en diciembre de 2019, con una proposición de ley presentada por el PP en el Parlamento de Andalucía. En esa iniciativa parlamentaria se hablaba textualmente de "la extinción y disolución de la EASP y la creación de este nuevo Instituto Andaluz de Salud". Tras frenar la tramitación por la contestación social que provocó y la irrupción de la pandemia, en febrero de este año se retomó la tramitación. El anteproyecto pasó en mayo por el Consejo de Gobierno.
El informe provisional de la auditoría fue presentado el 18 de diciembre de 2020 y remitido el 5 de enero a la Escuela, concediéndole un plazo de 10 días hábiles para la presentación de alegaciones. Recibidas estas, con fecha 19 de enero de 2021, como el propio texto de la auditoría recoge, y tras su valoración, se emite el informe definitivo, que recibió el visto bueno en marzo. El texto fue entregado a la Intervención de la Junta y en junio la empresa auditora ya da por concluido su trabajo.
Ese informe provisional ya suscitó críticas. En diciembre pasado, CCOO alertó de que la Junta, que ha tratado de convencer de que sus planes no ponen en riesgo la continuidad del organismo ni su presencia en Granada, a pesar de que formalmente la sede del nuevo Instituto será Sevilla, pretendía "liquidarla". El sindicato puso entonces en duda la imparcialidad de la evaluación.
Los auditores de Ernst & Young han aceptado una alegación de la EASP "para explicar con mayor detalle el análisis realizado", pues son -agregan- "el resultado del análisis de aspectos clave de la entidad". Las alegaciones figuran en uno de los anexos de la auditoría, pero esa parte no se puede consultar en el documento hecho público por la Junta en el Portal de Transparencia. Figura en blanco el anexo VI. Lo que sí se pueden leer son los comentarios de los auditores a esas elegaciones.
Así, de la siguiente manera expone la auditoría la principal conclusión que afecta al futuro de la Escuela Andaluza de Salud Pública:
- Formación: La formación que realiza la EASP podría ser asumida por la Fundación Progreso y Salud (FPS) o por el Instituto Andaluz de Administración Pública (IAAP).
- Consultoría: El área de consultoría podría ser acometida por la Fundación Progreso y Salud.
- Investigación: La investigación podría integrarse dentro de las actividades competenciales de la Fundación Progreso y Salud y la Fundación para la Investigación Biosanitaria de Andalucía Oriental (FIBAO)".
No han aceptado sin embargo la referida a las duplicidades. Así lo argumentan: "Se aclara que no se cuestiona la labor de la EASP y su aportación al sector sanitario andaluz, sino que se propone que su actividad sea asumida por otras entidades, pudiendo éstas continuar con la labor de la Escuela en todos sus campos con el mismo nivel de calidad, experiencia y medios necesarios".
Y agregan: "Si bien la finalidad de generación y gestión del conocimiento en los campos de la salud pública y la gestión de servicios sanitarios y sociales mediante el desempeño de actividades de formación, consultoría, investigación y cooperación internacional en dichas materias no se encuentra con el mismo detalle entre los objetivos del IAAP, la FPS y la FIBAO, se considera que, dadas las finalidades de dichas entidades, si cabe considerar que las labores de formación podrían ser asumidas por FPS o por el IAAP, la consultoría podría ser acometida por la FPS y la investigación podría integrarse dentro de las actividades FPS o FIBAO, siempre que dichas entidades pudieran contar con los recursos especializados de la EASP. Respecto a la sinergia entre la docencia, la investigación y la consultoría cabe que o bien se considere que las actividades sean realizadas por una única entidad, como podría ser FPS, o que si son realizadas por entidades diferentes, se establezcan mecanismos de coordinación y comunicación entre ellas con el fin de aprovechar dichas sinergias".
Entre las explicaciones de los auditores también figuran las referidas a la naturaleza mercantil de la EASP. Al respecto precisan que no consideran que la actual situación sea "ilegal", y defienden que esa conclusión no haya salido en otros informes, como los de Intervención de la Junta o la Cámara de Cuentas por "el alcance distinto" de los análisis realizados por esas entidades.
Las conclusiones se recogen en apartados de eficacia, eficiencia y economía. No advierte en general el texto de ningún agujero en la gestión de la Escuela. De hecho, considera que presta sus servicios "de un modo adecuado" a los objetivos para los que fue creada. Habla de sistemas de gestión "robustos", de cumplimiento de objetivos. Hay propuestas de mejora y también puntos fuertes, que detalla el documento.
Los auditores apuestan por "buscar financiación externa" para reducir "la alta dependencia financiera de las aportaciones de la Junta"
En las conclusiones de economía, los auditores recomiendan "reducir la alta dependencia financiera de las aportaciones de la Junta de Andalucía y mejorar la capacidad para generar autofinanciación, obteniendo nuevas vías de ingresos o potenciando aquellas que generan los ingresos por actividad propia de la Escuela, a través de: fomentar Convenios de colaboración con otras entidades tanto públicas como privadas; potenciar y aumentar la generación de los Ingresos por prestación de servicios por ejemplo, enfocando su actividad a organizar y gestionar más acciones formativas; potenciar los contratos de patrocino, por el cual el patrocinado se compromete a colaborar en la publicidad del patrocinador, a cambio de una ayuda económica, de este modo, la Escuela puede obtener ingresos para financiar sus actividades".
En la búsqueda de financiación externa, agrega el texto, "se deberá considerar que la entidad se califica medio propio de la Junta de Andalucía, y de acuerdo con el artículo 32 de la Ley 9/2017 debe cumplir que más del más del 80 por ciento de su actividad ha de llevarse a cabo en el ejercicio de los cometidos que le han sido confiados por los poderes adjudicadores que lo controlan o por otras personas jurídicas controladas por los mismos poderes adjudicadores". -En esta parte del texto se ha tenido en cuenta alegaciones planteadas por la Junta-.
Información relacionada: