Laura García Lorca acusa al que ha sido secretario de su Fundación de falsificar el contrato que firmó en su día para prestarle asesoramiento en la creación y puesta en marcha del Centro Lorca de Granada. Juan Tomás Martín elevó sus comisiones sobre las ayudas al proyecto del 4 al 15% en un contrato 'b' amañado en el que falsificó las firmas de Laura García Lorca y Manuel Fernández-Montesinos, según la denuncia presentada por la Fundación, a la que ha tenido acceso El Independiente de Granada. En total, el secretario cesado este martes, cobró 5.103.782 euros, entre comisiones y el sueldo de 9.000 euros más IVA que se asignó por asesorar también en la construcción. Laura García Lorca asegura que se convirtió en el "factotum" de todas las cuestiones económicas de la entidad.

La reunión del Patronato de la Fundación Lorca se ha reunido esta tarde en Madrid para analizar la grave situación contable que atraviesa. Previamente, por la mañana, se reunión de urgencia el Consorcio del Centro Lorca.

Las administraciones que forman parte del Consorcio que gestiona el Centro Lorca muestran oficialmente su preocupación por la gestión de los fondos públicos llevada a cabo por la Fundación que preside la sobrina del poeta. Mientras esperan que las auditorías puedan aclarar la utilización de este dinero, renuevan su compromiso para tratar de facilitar la apertura del Centro "en la fecha más próxima posible".

El agujero económico detectado en la Fundación, que está afectando de lleno a la puesta en funcionamiento del ansiado Centro Lorca, ha llegado a los juzgados. La presidenta, Laura García Lorca, ha denunciado al secretario por apropiación indebida y falsedad documental. En este contexto y mientras se aclara el resultado de dos auditorías, el Patronato que rige la Fundación Lorca se reúne este martes en Madrid.

Laura García Lorca lleva a los juzgados a Juan Tomás Martín ante la grave situación que atraviesa la Fundación, con cantidades millonarias pedientes de justicar a la Junta y al Gobierno central por las ayudas recibidas para la Construcción del Centro Lorca. Este se defiende y asegura que es cuestión de "interpretación de gastos".

Despojada de responsabilidades de gobierno, su papel queda limitado al Instituto de Estudios Lorquianos, que se centrará en la investigación de la obra y su difusión y en la programación de actividades culturales y pedagógicas. Será la Fundación la que proponga a su coordinador, que tendrá voz pero no voto en las reuniones del Consejo Rector del Centro. Este nuevo papel contrasta con el que se le asignó en los inicios del proyecto, cuando no solo se le encomendó la gestión de la obra, sino la del propio Centro, a cuyo director le correspondía designar. En los nuevos estatutos, que fueron aprobados con el voto en contra de la Fundación, se establece que el director-gerente será elegido mediante un procedimiento que garantice la igualdad, el mérito y la capacidad.

La solución al bloqueo administrativo del Centro Lorca es más compleja de lo esperado por la difícil situación de las cuentas de la Fundación Lorca. Al millón de euros que ya le reclama el Ministerio, se suma otra cantidad millonaria por gastos que aún no ha justificado ante la Junta de Andalucía y que alcanzan los 4 millones de euros. En este caso, el expediente no es definitivo y aún puede presentar alegaciones antes de que el Gobierno andaluz le reclame la devolución de ese dinero. Aclarar la situación real de las cuentas de la entidad, a la que se le encomendó en su día la gestión de la obra del Centro Lorca, es clave para desbloquear su apertura. Hay dos auditorías en marcha.

El futuro del Centro Federico García Lorca está comprometido. Tras un difícil camino en el que se han tenido que salvar numerosos obstáculos, implicar a la familia del poeta, poner de acuerdo a instituciones de distinto color político y salvar la crisis que agudizó la falta de financiación por parte de las administraciones públicas que lo impulsan, la delicada situación financiera de la Fundación Lorca, que tiene sin justificar subvenciones que alcanzan el millón de euros, ha paralizado el proyecto, tan ansiado para unir definitivamente la figura del poeta a Granada. El Consorcio del Centro Lorca ha encargado una auditoría para aclarar la situación.