El secretario de la Fundación Lorca cobró 5 millones tras 'amañar' su contrato para lograr más comisiones
La Fundación no descarta ampliar la denuncia con nuevas irregularidades
Falsedad, apropiación indebidad y administración desleal. Son los supuestos delitos que atribuye Laura García Lorca al que ha sido secretario de su Fundación hasta que fue cesado este martes. Le acusa de alterar el contrato de asistencia para la creación del Centro Lorca, que firmó en 2003, con el objetivo de elevar las comisiones que acordó percibir sobre las ayudas económicas que se lograran para sacar adelante el proyecto, falsificando firmas y añadiendo cláusulas para incrementar sus beneficios.
Así lo expone en la denuncia que presentó el pasado 28 de junio en el Juzgado de Guardia de Madrid, a la que ha tenido acceso El Independiente de Granada. En total, Juan Tomás Martín ha cobrado 5.103.782 euros de la Fundación, una cantidad similar a la que todavía tiene pendiente de justificar la entidad ante la Junta de Andalucía y ante el Gobierno central por el dinero público recibido para las obras del Centro Lorca.
La denuncia detalla la relación profesional que entabló Juan Tomás Martín con la entidad que preside la sobrina del poeta y cómo esta colaboración evolucionó hasta convertirse en el "factotum" de todas las cuestiones económicas de la Fundación y ser nombrado secretario. El que hacía y deshacía. Quien amplió su contrato para prestar la asistencia técnica en las obras. Quien contrató el servicio de contabilidad para abonar esos gastos.
En definitiva, como dice la denuncia, "una persona de absoluta confianza", apartada de la gestión tras hacerse público el agujero contable de la Fundación a raíz de los problemas para abrir el Centro Lorca.
Juan Tomás Martín es socio y administrador mercantil de Desarrollo del Territorio y Sociedad del Conocimiento SL, sociedad con la que prestaba desde 2003 asesoramiento técnico a la Fundación para conseguir apoyos económicos para el Centro Lorca y para ejecutar y desarrollar otros proyectos de la Fundación.
Laura García Lorca. m.rodríguez
El dato que "alarmó" a Laura García Lorca figuraba en los trabajos de la auditora Mazars, que estaba revisando los costes de la construcción del Centro Lorca. Bajo el epígrafe "Honorarios obtención financiación", la sociedad de Juan Tomás Martín cobró 3.532.398 euros.
Esa cifra, añade en la denuncia, "superaba con creces" el porcentaje de comisión de las ayudas, del 4 por ciento, y solicitó una "aclaración" a los auditores. Vino en forma del contrato, el que suscribió la empresa del secretario con la Fundación. Pero para su "sorpresa", ese 4 por ciento se había elevado al 15 y se habían modificado algunos aspectos para aumentar sus beneficios.
Así, en lugar de circunscribir esas comisiones "únicamente" a las ayudas económicas solicitadas por la Fundación a propuesta de la empresa de Juan Tomás Martín, añadió un último párrafo para cobrar esa misma comisión alterada, del 15 por ciento, en cualquier otra actividad no comprendida en su contrato. Al alterar el texto e introducir un nuevo párrafo tuvo que reducir el tamaño de la letra, lo que la denuncia hace constar, así como la falsificación de firmas.
La de Laura García Lorca y la de Manuel Fernández-Montesinos, que fue en su día el albacea de la familia y el impulsor del legado de su tío. Sobre la primera advierte que, "sin necesidad de pericial". se aprecia que la letra "g" no se encuentra cerrada y que aparece un punto en la segunda "l" que según ella "nunca" utiliza. Sobre la de Fernández-Montesinos -ya fallecido-, avisa que la "m" y la "f" están separadas, cuando en el resto de páginas aparecen unidas.
A esa cantidad de 3,5 millones se suma, según detalla la denuncia, los honorarios por un segundo contrato firmado ya cuando las obras del Centro Lorca arrancaron. El objeto de ese contrato también era de asesoramiento, en este caso sobre todo lo relacionado con la construcción. Por esa labor ha percibido desde 2004 un total de 1.571.384 euros, a razón de 9.000 euros mensuales más IVA. De esta forma, el montante total entre comisiones y honorarios, los 5,1 millones de euros.
El martes el Patronato de la Fundación Lorca ratificó la denuncia presentada por su presidenta, aunque las administraciones no se sumaron con voto positivo a esa decisión. El concejal de Cultura del Ayuntamiento, Juan García Montero, lo ha justificado en que los servicios jurídicos tienen que revisarla antes de tomar esa decisión. Y ha asegurado al respecto que no descartaba, una vez recibido el visto bueno de la asesoría jurídica, sumarse a esas acciones judiciales.
"Lamentamos las circunstancias en el seno de la Fundación que han derivado al final en la denuncia, por un uso no razonable del dinero", ha manifestado el concejal, que se ha remitido al comunicado que emitieron todas las instituciones representadas en el Consorcio del Centro Lorca, que también se reunieron de urgencia en Madrid, y en el que expresaron su compromiso en buscar soluciones para la apertura. Ha considerado "un ejemplo" que trabajen "sin fisuras" para sacar adelante el proyecto.
Sobre la posibilidad de que la Fundación García Lorca pueda decidir retirar los fondos que han de dotar de contenido al edificio de Granada, ha sido contundente: "No creo que la Fundación esté en disposición de hacer ese planteamiento".