El alcalde de Granada, Luis Salvador, ha rechazado las críticas que han suscitado sus declaraciones sobre las personas sin hogar. En concreto, Salvador dijo que el Ayuntamiento no estaba preparando un dispositivo similar al del confinamiento para atender ahora, con el toque de queda, a las personas sin hogar. Y en su reflexión en torno a este colectivo llegó a hablar de "efecto llamada".

Este miércoles, de nuevo a preguntas de los periodistas, ha explicado sus declaraciones. De un lado ha insistido en que las personas sin hogar constituyen "una población que se va moviendo por ciudades y pueblos". "Es una absoluta realidad", ha dicho para agregar que, "aunque se buscara una solución, seguramente ese efecto llamada haría que fuese necesario" buscar más alternativas para acogerlas. 

"De ahí a entender que tengo aversión a los pobres, con esa palabra tan rara [en alusión a la aporofobia], es quererse meter en la esfera pública, tomar notoriedad, con algo absurdo", ha opinado para reivindicar su labor. Fue, ha enfatizado, "el primer alcalde de España" que organizó un dispositivo para atender a personas sin hogar durante el anterior estado de alarma. Ese operativo, en el Palacio de los Deportes, tuvo un coste "altísimo", de 800.000 euros, según ha indicado para insistir en rechazar las críticas.

"A mí no me gusta la pobreza. Los pobres, intento trabajar para que haya los menos posibles y que, a poder ser, dejen de serlo en algún momento. No me doy por aludido con esa palabra rara. La gente quiere aprovechar cualquier coyuntura para hacer política de desgaste, política de ataque en vez de proponer medidas concretas", ha añadido.

Mientras tanto, ha asegurado que el Ayuntamiento está trabajando con otros consistorios para ir avanzando en propuestas desde el área municipal de Servicios Sociales, si bien, a diferencia, de momento, del anterior periodo en que estuvo activado el estado de alarma contra el coronavirus, las instalaciones deportivas no van a poder estar a disposición de este colectivo pues están todas "operativas" con sus actividades y, por tanto, "no son utilizables".