La Universidad de Granada (UGR) estudia, en contacto con la Fiscalía, una "acción conjunta" contra los dos ataques informáticos que ha sufrido en época de exámenes el sistema de acceso a su plataforma de recursos de apoyo a la docencia, en la que los piratas no consiguieron entrar.

Según ha explicado, en una comparecencia informativa este miércoles, la rectora, Pilar Aranda, los piratas informáticos no pudieron acceder, por tanto, a bases de datos datos personales, metodologías ni materiales. "Nos hemos defendido perfectamente", ha resaltado.

Aún así, los hechos se han denunciado, ha detallado Aranda, que ha calificado los ataques como "intensos", con intento de acceso a la plataforma desde "millones" de supuestos usuarios. El sistema de la UGR se ha demostrado "seguro" frente a ellos, ha apostillado.

La rectora ha expuestos estos hechos en una rueda de prensa con motivo del inicio de las clases en el segundo cuatrimestre del curso 2020-2021, tras un periodo de exámenes condicionado por la pandemia de coronavirus, en que, en los campus de Granada, el 80 por ciento de las evaluaciones se han realizado 'on line', mientras que en los de Melilla y Ceuta han sido al cien por cien presenciales.

Además, hay dos denuncias colectivas por intentos de copia en exámenes virtuales, que se están estudiando en la Inspección de la UGR, ha señalado Pilar Aranda, a preguntas de los periodistas.

El modelo virtual se prolongará hasta Semana Santa

Siempre desde la premisa de la "presencialidad segura", Aranda ha indicado que su equipo no se ha planteado en este momento si el modelo virtual se prolongará hasta el final del curso -por ahora se extiende hasta la Semana Santa-, si bien se van analizando a diario los datos epidemiológicos, en el marco de lo que estipulan las autoridades sanitarias.

Con el anuncio de la extensión del modelo virtual, que mantiene la actividad presencial en aquellas prácticas y materias que así lo requieren, se quiso "trasladar certeza a la comunidad universitaria" en un momento de la tercera ola con una situación "tres veces más complicada que el 13 de octubre", cuando la Junta decretó esta modalidad en la UGR.

La institución académica mantiene en este momento alrededor de un 60 por ciento de centros de Granada con actividad presencial, todas las salas de estudio abiertas, préstamos bibliotecarios con cita previa, y comedores abiertos para becarios y estudiantes del colegio mayor Isabel la Católica y la residencia universitaria Carlos V.