Caos e indignación en el Aeropuerto de Granada tras los retrasos y cancelaciones de varios vuelos
Los retrasos y cancelaciones en varios vuelos de la compañía de bajo coste Vueling provocaron el caos y la indignación de cientos de viajeros durante la tarde-noche del jueves en el Aeropuerto Federico Gacía Lorca Granada-Jaén, como se denomina oficialmente el aeródromo de Chauchina.
El vuelo a Barcelona que tenía previsto salir a las 19.10 horas se retrasaba hasta las 21.00 h. A esa hora tenía previsto salir otro, también de Vueling a Barcelona, que no despegó. Y horas antes se había anunciado la cancelación del vuelo, al mismo destino, previsto a las 22.45 h., el último de la jornada (el Aeropuerto 'cierra' a las 23.00 h.).
Según cuentan testigos presenciales, cientos de pasajeros de unos y otros vuelos se fueron agolpando en la terminal, junto a viajeros de otras conexiones, sin recibir información de los retrasos y las cancelaciones y con la inquietud, primero, y la indignación después al comprobar que pasaba el tiempo y no sabían qué iba a pasar con sus vuelos.
Muchas personas vivieron un final de vacaciones para olvidar. Allí coincidieron personas mayores y también menores de edad que regresaban tras estar con sus familias, y que iban a viajar solos, a la espera de ser recogidos por otros familiares en Barcelona. Hubo escenas de mucho nerviosismo, desonrientación y protestas por la falta de información y de atención, tanto de Aena como de la compañía aérea Vueling, que en Granada no dispone de personal de asistencia en tierra (handling) y lo subcontrata a Iberia, cuyo personal se vio desbordado.
Se produjeron grandes colas en los controles de seguridad, cuyos tres vigilantes no daban abasto y tuvieron también que atender y calmar la indignación de muchos pasajeros, ante la ausencia de información sobre los vuelos que se estaban retrasando, y sin la presencia de fuerzas y cuerpos de seguridad dentro de la terminal (únicamente un guardia civil en una caseta exterior) a partir de las 22.00 horas, pese a que estaba llena de usuarios indignados en medio de un caos y con un nivel 4 de alerta terrorista.
Finalmente, los pasajeros del vuelo de las 21.00 horas fueron trasladados a Málaga para volar desde allí, con la irritación de muchos de ellos.