PREMIOS GÉNERO Y JUSTICIA AL DESCUBIERTO, QUE OTORGA LA ORGANIZACIÓN INTERNACIONAL WOMEN’S LINK WORLDWIDE

La sentencia a La Manada toma el relevo a la del TSJA como peor decisión judicial contra la igualdad

Ciudadanía - Redacción El Independiente de Granada - Jueves, 6 de Diciembre de 2018
La sentencia, que acaba de ser confirmada por el Tribunal Superior de Justicia de Navarra, envía un mensaje muy peligroso a la sociedad, pues está indicando a las mujeres que han sufrido una agresión sexual que, si no pueden demostrar que se defendieron activamente, su testimonio podrá ser puesto en duda durante los procedimientos judiciales.
Concentración celebrada este miércoles en Granada tras confirmarse la sentencia a La Manada por abuso.
María Daza
Concentración celebrada este miércoles en Granada tras confirmarse la sentencia a La Manada por abuso.

Por ello, el jurado que entrega los premios Género y Justicia al Descubierto, cuyo objetivo es denunciar las decisiones que hacen retroceder en equidad de género, ha otorgado el premio Garrote de Plata a la sentencia de La Manada. Precisamente este miércoles fue confirmada por el Tribunal Superior de Justicia de Navarra: los miembros de La Manada están condenados a nueve años de cárcel por abuso sexual. 

Así explica Women´s Link el caso de La Manada:

El 7 de julio de 2016, en la celebración de las fiestas de San Fermín en Pamplona, cinco hombres de entre 25 y 30 años agredieron sexualmente a una mujer de 18 años. Los agresores conocieron a la joven de madrugada y comenzaron a caminar junto a ella por las calles de la ciudad. En un momento dado, los cinco jóvenes introdujeron a la mujer en la entrada de un edificio, donde la rodearon para que no pudiera escapar. Durante casi 20 minutos la agredieron sexualmente y grabaron los hechos en vídeo. Después, le robaron el teléfono móvil y la abandonaron en el lugar de los hechos. Horas después, la joven denunció ante la Policía haber sido violada.

En la sentencia, la Audiencia asume la credibilidad del testimonio de la víctima y reconoce que la mujer fue sometida por los agresores, que la superaban en número y corpulencia física, y que no dio su consentimiento para mantener relaciones sexuales. Sin embargo, afirma también que en el vídeo no se aprecian indicios de violencia o intimidación, ya que ella no se resistió de forma activa. Por ello, considera que no se cumplen los requisitos necesarios para que el ataque pueda ser considerado agresión sexual tal y como recoge el Código Penal español, sino únicamente abuso sexual, que se castiga con una pena menor.

En el voto particular de la sentencia, uno de los magistrados argumentó que los agresores debían ser condenados únicamente por el robo del teléfono móvil. El magistrado desacredita totalmente el testimonio de la víctima afirmando que las declaraciones de la víctima eran muy diferentes en cada ocasión y por lo tanto no eran creíbles. Además, interpreta los sonidos del vídeo como sonidos de gemidos de placer sexual, lo que lo lleva a concluir que no hubo ningún tipo de sufrimiento o dolor por parte de la víctima. 

Esta sentencia envía un mensaje muy peligroso a la sociedad y, en concreto, a las mujeres, ya que está indicando a las mujeres que han sufrido una agresión sexual que, si no pueden demostrar que se defendieron activamente, su testimonio podrá ser puesto en duda durante los procedimientos judiciales. Además, muestra los prejuicios y estereotipos que aún persisten en la justicia sobre cómo se deben comportar las mujeres víctimas de violación para resultar creíbles.

Es pues, la segunda peor sentencia del mundo, por detrás de una de un tribunal penal de Sudán que dicta la pena de muerte para una mujer víctima de violación. Esa sentencia ha recibido el Garrote de Oro. La tercera peor sentencia corresponde a El Salvador, donde una joven víctima de violación que quedó embarazada sin saberlo, sufrió un aborto espontáneo por el que es condenada a 30 años de cárcel por homicidio agravado.

En total el jurado ha estudiado quince casos, entre los que también se encontraba el de Juana Rivas, la madre de Maracena condenada a prisión por no haber entregado a sus dos hijos al padre, al que ha denunciado por violencia de género. 

Además de denunciar las peores decisiones, estos premios destacan aquellas que, por el contrario, sí que ayudan a promover la igualdad de género. También hay una decisión española: el caso de Ángela González, en el que el Supremo definió la obligación del Estado español de cumplir las recomendaciones de los organismos internacionales de derechos humanos ratificados por el país, en un caso de un hombre que maltrató durante varios años a su esposa y a su hija de 7 años y posteriormente asesinó a esta última en una visita no vigilada.

La sentencia de la pasada edición:

Más información sobre los Premios Género y Justicia al Descubierto en el siguiente enlacehttps://www.womenslinkworldwide.org/premios