Sierra Nevada, Ahora y siempre.

Justicia para Agustín y Rafael López Álvarez

Blog - Foro de la Memoria - María Andrade - Sábado, 13 de Mayo de 2023
Naturales de Órgiva pero vecinos de Lanjarón, la crudeza de sus historias forma parte de la 'Querella Argentina' presentada con el objetivo de buscar justicia para las víctimas de los crímenes del franquismo. Carmen Contero, su sobrina, lucha por conseguirlo: "Mientras esté viva, seguiré".
Agustín (izquierda) y Rafael López Álvarez.
Cedida por Carmen Contero
Agustín (izquierda) y Rafael López Álvarez.

Josefa, la madre de Agustín y Rafael López Álvarez, enviudó cuando el mayor de sus seis hijos tenía 9 años y la más pequeña, 14 meses. La familia vivía en Órgiva, donde regentaba una posada en la que también se daban comidas. Al quedar sola con sus hijos se trasladó a Lanjarón. Allí tenía conocidos y pidió trabajo para sacar adelante a su familia. Lo hizo trabajando duro y, como en tantas otras casas, con la colaboración de sus hijos, entre ellos Agustín, que a muy corta edad ya se enfrentó a la dureza de las tareas del campo cuidando animales.

"Así creció", explica en una conversación con El Independiente de Granada Carmen Contero, su sobrina, que ha incluido el caso de sus tíos Agustín y Rafael en la llamada 'Querella argentina', en la que familiares de víctimas del franquismo buscan en aquel país justicia frente a los crímenes que acabaron con sus vidas. "Mi familia sufrió mucho. Mi abuela y mi madre tuvieron una vida muy triste", resume.

Su sobrina guarda la memoria familiar y, desde hace años, investiga y reúne documentación con la ayuda de memorialistas, que ha aportado a la llamada 'Querella argentina'

Su sobrina guarda la memoria familiar y, desde hace años, investiga y reúne documentación con la ayuda de memorialistas, como Maribel Brenes, que le aportó expedientes y documentos de Agustín incorporados a la 'Querella argentina', una acción que conoció a través de movilizaciones en Barcelona por la recuperación de la Memoria Democrática -que cuentan allí con el respaldo de la Xarxa catalana i balear d suport a la 'Querella argentina'- y a la que se sumó con la esperanza, resalta, de encontrar verdad, justicia y reparación. O José María Azuaga, uno de los historiadores que más ha profundizado en la guerrilla antifranquista, a la que perteneció Rafael, su otro tío víctima del franquismo.

Ella ha sido una de las denunciantes que ha logrado declarar, a petición de la jueza argentina María Servini, vía exhorto a los tribunales españoles, ante un juzgado. Lo hizo en 2016 en Rubí.

Carmen Contero junto a Francisco Gálvez, nieto del alcalde republicano de Lanjarón que fue asesinado junto a otros miembros de la familia. 

Agustín sabía leer y escribir y llegó a dar clases para que otros aprendieran en el campo. Disfrutaba con la lectura y se formó políticamente

Agustín, nacido el 29 de abril de 1915, sabía leer y escribir y llegó a dar clases para que otros aprendieran en el campo. Disfrutaba con la lectura y se formó políticamente, recuerda Carmen Contero, que explica que "siendo muy joven se afilió a las Juventudes Libertarias, desempeñando funciones de agente cívico y otras actividades dentro del sindicato", como charlas a los trabajadores e intervenciones en mítines como orador.

Además del trabajo al cuidado de ganado y como jornalero en el campo, también fue albañil. "Pronto -expone Carmen Contero- empieza a darse cuenta de los abusos que sufrían los trabajadores por parte de los caciques y las precarias condiciones de vida de la clase trabajadora". 

Agustín, junto a un compañero.

Tras el golpe contra la República en 1936, se marchó de Lanjarón para tratar de alcanzar zona aún republicana. Primero a Motril y, posteriormente a Albacete. Explica su sobrina que prestó servicio como soldado, sargento y finalmente, en marzo de 1938, lo nombraron teniente y fue destinado a Tobarra.

En ese tiempo se casó con Encarna Martínez por lo civil. Al finalizar la guerra estaba herido, ingresado en el Hospital de Fortuna. Y ahí empezó un duro camino que le llevó primero a un campo de concentración, después a las prisiones de Murcia y Granada y que acabó con una condena a muerte, dictada en diciembre de 1942, y su ejecución el 22 de mayo del año siguiente. 

Documentación procedente de Prisiones del expediente de Agustín López Álvarez. 

No hubo compasión del sacerdote, que hizo la acusación más dura

Cuando él ya estaba preso, nació, en octubre de 1939, su hijo José, al que nunca conoció. Meses después del nacimiento de su hijo, murió su suegro y su esposa Encarna se traslada a Lanjarón, donde es acogida por la familia de Agustín. Es en ese momento cuando se materializa su traslado a la cárcel Provincial de Granada, el 27 de noviembre de 1940, de acuerdo con la información reunida por su sobrina en todos estos años de lucha por la memoria familiar e incorporada a la querella. 

"Mi abuela iba andando a la prisión para ver a su hijo", relata a este diario Carmen Contero

"Mi abuela iba andando a la prisión para ver a su hijo", relata a este diario Carmen Contero, que alude al desesperado intento que emprendieron para tratar de aportar testigos que declararan a su favor, encontrar algún testimonio que le ayudara. Y lo buscaron en Lanjarón. Allí, como le trasladó a su madre, "lo conocía todo el mundo". "Fue un error", apunta, porque le pidió que se dirigiera al párroco, Antonio Barea. El resultado fue el contrario del esperado, pues formula una acusación muy dura, relacionándolo con unos hechos en los que no pudo participar, porque ya no se encontraba en el municipio. Esa declaración, que Agustín esperaba favorable, porque no había nada que apuntara a lo contrario, determinó su suerte. 

Agustín López Álvarez, condenado a muerte, fue fusilado el 22 de mayo de 1943 en las tapias del cementerio de Granada. Ese mismo día, recuerda Carmen Contero, también fueron ejecutados otras ocho personas, siete hombre de entre 21 y 36 años, y una mujer de 18, según se recoge -señala- en el libro 'Jaque a la República' de Maribel Brenes y Rafael Gil Bracero. 

El nombre de Agustín López Álvarez figura en el Memorial a las Víctimas del Franquismo levantado junto a las tapias del cementerio de Granada.

Su otro tío, Rafael, fue asesinado años más tarde, en 1948. Formaba parte de la guerrilla, a la que se unió en 1946. Había nacido el 20 de mayo de 1922 en Órgiva. Era el quinto de los seis hermanos. La vida de Rafael, como resume Carmen Contero, transcurrió "llena de privaciones" y, como su hermano mayor Agustín, trabajando "desde muy temprana edad". 

"Tras el servicio militar, periodo en el que fusilan a su hermano, Rafael regresa a Lanjarón y pronto entra en contacto con la guerrilla, haciendo de enlace"

Con 14 años al inicio de la guerra, ha de despedir a su hermano Agustín, que se sumó a la defensa de la República. Todavía viviría un trago peor. En 1938, Francisco, otro hermano, es "obligado a incorporarse al Ejército Nacional en la famosa quinta del biberón. Fallece meses después". Sus restos están en Cuelgamuros. Mientras Rafael hacía el servicio militar, fusilan a su hermano. Y al finalizarlo y ya de regreso a Lanjarón, donde trabaja de jornalero y albañil, "pronto entra en contacto con la guerrilla haciendo de enlace", apunta su sobrina. Según los datos que ha reunido, se integra en la guerrilla en junio de 1947. Hace "escapadas" para ver a su familia y a su novia y es en una de esas visitas cuando llegará su trágico final. 

La casa estaba rodeada de guardias civiles y, a pesar de que le aseguraron que no le pasaría "nada" si se entregaba, tras hacerlo recibió varios disparos por la espalda. 

Lo enterraron, recuerda Carmen Contero, en una fosa. Sus hermanas Araceli y Elvira fueron encarceladas durante diez meses; también la familia de su novia. 

En 1980, explica a este diario su sobrina, sus restos fueron recuperados para darle una digna sepultura. Presentaba dos orificios de bala en la nuca. Sus restos fueron enterrados en el cementerio de Lanjarón. En su lápida figura la siguiente inscripción: "Asesinado vilmente. Tu familia no te olvida".

Lápida en el nicho con los restos de Rafael López Álvarez en el cementerio de Lanjarón.

La historiadora y memorialista Maribel Brenes expone a este diario cómo el caso de Lanjarón, y la cruda realidad de esta familia, es un reflejo de lo que estaba sucediendo en ese momento en toda España. Una represión durísima contra quien había tenido militancia política o sindical y también la existencia de "un caciquismo que no perdona" y que se aprovecha de las circunstancias para acabar con quien había luchado por derechos. 

Al hilo de esa mención a la reivindicación de los derechos cita también cómo muchas mujeres, "concienciadas en sus derechos", que se habían sumado a sindicatos, acaban también asesinadas. Como otras muchas a las que se les aplica el bando de guerra para incautarse sus bienes, por el mero hecho de que "rompían estereotipos" y eran unas mujeres "que podían ser del siglo XXI", instruidas, independientes y con trabajo. 

Nuestro sincero agradecimiento a Carmen Contero por compartir con los lectores y lectoras de El Independiente de Granada la memoria familiar, con su testimonio, documentos que ha reunido en estos años de lucha y fotografías. 
BÚSQUEDA DE FAMILIAS

Carmen Contero recuerda que está buscando a las familias de dos personas de Lanjarón que fueron deportadas a los campos de concentración nazis.

Estos son los datos que traslada:

-José Lozano Fernández, nacido en Lanjarón el 19/03/1913. Fue deportado a, campo de concentración de Mauthausen. No se tiene información sobre si falleció o fue liberado.

-Marcelo Esturillo López. Nació en Lanjarón el 16/01/1908. Tenía tres hernanos, Dolores, Natalia y Juan Gregorio. Después de ser liberado del campo de concentración de Mauthausen el 5/5/1945, emigró a Buenos Aires. Falleció en 1972.

Contacto: ccontelopez@gmail.com

______________________________________________________________________________________

Este es un espacio para el recuerdo y el homenaje a las víctimas del franquismo.

Para que nunca se olvide. Para que nunca se repita.

En colaboración con y las asociaciones memorialistas de la provincia de Granada. 

Reportajes de la quinta temporada del Foro de la Memoria:

Aquí puedes leer los reportajes de la cuarta temporada del Foro de la Memoria:

Si no tuviste oportunidad o quieres volver a leerlos, puedes leer aquí los reportajes de la tercera temporada del Foro de la Memoria:

Si no tuviste oportunidad o quieres volver a leerlos, estos son los reportajes de la segunda temporada del Foro de la Memoria: 

Puedes consultar también los reportajes de la primera temporada del Foro de la Memoria en los siguientes enlaces:

_______________________________________________________

También te puede interesar este trabajo, que te recomendamos:

> 'De profesión, las labores de su sexo', por Jacqueline López Ligero'

Otros artículos:

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Imagen de María Andrade

Periodista de carrera, -titulada en Ciencias de la Información por la Universidad de Sevilla-, y trayectoria, ha trabajado en Andalucía en todas las áreas del Periodismo: agencias de noticias, prensa, radio, televisión y gabinete de prensa. Comenzó su trayectoria profesional como redactora en prácticas en la radio, en RNE, posteriormente en Antena 3 y la SER; en la Agencia Efe, fue redactora en Málaga y Granada; en televisión trabajó para Tele 5 y, en prensa, en el Diario de la Costa del Sol, La Opinión de Málaga y Granada Hoy, en este último como jefa de la sección de Local desde su creación. Después, dirigió el Gabinete de Prensa de la Consejería de Educación de Andalucía durante cinco años.

https://twitter.com/mandrabe @mandrabe