Granada es la Alhambra, símbolo de su proyección internacional. Con esa carta de presentación y aferrada a la figura de Federico García Lorca, a eventos como el Festival Internacional de Música y Danza y a otros nombres propios de las letras o la música, la ciudad ha pugnado históricamente por erigirse en sinónimo de cultura. Tiene rentas suficientes para vivir de ello, y lo hace, explotando cada uno de los hitos que le ha regalado la Historia, como la Universidad, que con más de cinco siglos ha impulsado el conocimiento como pilar en torno al que se ha erigido otra pretendida seña de identidad: la investigación en salud. Pero, ¿cuál es la imagen de Granada? ¿Qué concepto la define como ciudad? Es la cultura, el turismo que ha crecido bajo esa riqueza, es quizás la salud, la música. O vive Granada instalada en una cómoda inercia que la debilita frente a otros destinos emergentes que sí han potenciado una imagen clara y definida. ¿Cuál es el proyecto de ciudad? ¿Tiene Granada una marca?

Francisco Puentedura explica que la Junta de Gobierno aprobó cinco facturas relativas a programas nacionales en la cadena COPE y en 13 TV emitidos en los últimos cuatro meses. El concejal critica que con "la excusa" de la promoción, los programas incluían "entrevistas al alcalde para vender su gestión", en los meses previos a las elecciones.

Ahora Vegas da cumplimiento al acuerdo de gobierno suscrito con el PSOE y cede a los socialistas la Alcaldía durante los dos primeros años del mandato. El gobierno local desmiente al PP respecto a la subida de sueldos. La partida se ha incrementado porque el Ayuntamiento contará con 17 concejales, en lugar de los 13 del anterior mandato, aclaran. El alcalde cobrará 4.000 euros menos que su antecesor.

El presidente de la entidad, Francisco Martín-Recuerda, pretende dar entrada a más sectores para consolidar su papel y que se convierta en "el guardián del plan estratégico".

Tras conocer que el Supremo procedería contra él por el caso de los ERE y pese a que el PSOE había dado por hecho que entregaría su acta, el diputado se atrinchera en su cargo, que le permite mantener su aforamiento. La presidenta le exigió que renuncie "por higiene democrática".

El Ayuntamiento de Granada celebra las dos primeras juntas de gobierno del mandato, la primera extraordinaria para fijar las competencias de los concejales y la segunda ya con asuntos ordinarios. Contratos pendientes y prórrogas, decretos por razón de urgencia y personal de confianza, algunas de las primeras medidas acordadas. IU critica que 50 competencias se deleguen en los concejales del gobierno local.

La investigación penal que abrió la Fiscalía para aclarar las supuestas irregularidades en la adjudicación del servicio de audioguías en la Alhambra están a punto de concluir. Las pesquisas encargadas a la Policía finalizaron con la declaración del último de los detenidos, un empresario relacionado con el servicio. Los seis detenidas, entre ellos la cúpula del Patronato, han quedado el libertad con cargos. Mientras se cierra la investigación, el Gobierno vuelve defender la actuación policial y se suceden mensajes de apoyo y crítica a Villafranca. Los primeros llegaron desde la Junta en Granada; la crítica vino del PP, que pedirá una comisión de investigación en el Parlamento. Y en medio de esta tormenta, el alcalde se desmarca de su partido y elude pedir la dimisión de la directora del Patronato.

El municipio había contabilizado este año 119.500 euros para pagar a la corporación, pero el nuevo equipo de gobierno ha acordado elevarlo a 196.425 euros, según denuncia el PP. Hasta nueve ediles tendrán sueldo. A partir del lunes será alcalde el socialista Leandro Martín, y el actual, Alejandro Martín (Ahora Vegas), lo será dentro de dos años.

La responsable de la Junta en Granada, Sandra García, expresa su apoyo "más sincero" a la directora de la Alhambra, un monumento que está "muy bien gestionado".

Torres Hurtado, en la línea del nuevo rol que anunció en su investidura, se centra en reclamar un nuevo modelo de gestión para la Alhambra y se ofrece a la presidenta de la Junta para abordar esa reflexión. Asegura sentir "pena" por la detención de Villafranca, porque este "nuevo escándalo", aún sin juicio ni sentencia y sin restar la presunción de inocencia, somete a todos los políticos al "juicio sumarísimo" de la ciudadanía, que piensa que "todos somos iguales y unos corruptos".