El pasado día 19 de julio de 2018, mi estimado Chema Rueda hacía una suerte de circunloquio sobre determinada situación política que titula “Los nuevos parecen dedicarse a los viejos problemas” (El independiente de Granada). Siguiendo la costumbre de fijarse solo en el ojo ajeno, olvida de entrada que su partido gobierna en Granada (aunque esto admite matices) y Andalucía gracias al apoyo de Ciudadanos (partido nuevo) y en España gracias al respaldo de Podemos (partido aún más nuevo). Estos datos no resultan baladíes, menos cuando se trata, en Granada al menos, de impedir que en la institución municipal gobierne un partido que tiene a todo su grupo municipal encausado por presunta corrupción urbanística.

Parece obvio que lo políticamente viejo, tal y como se expresa por mi amigo Chema Rueda, no duda utilizar la vieja táctica del ventilador como forma de mantener su status político (el de su partido) y justificar los propios pecados lanzándolos al otro –la culpa siempre es de otro. Pero ese debate no es el que creo yo interesa a Granada, pues podíamos perdernos en una interminable lista de reproches, del “y tú más”, lo que sin duda beneficiaría a ese “partido” condenado por haberse financiado a título lucrativo por los actos electorales que sufragaron las empresas del grupo Correa, lo que se conoce como el caso Gürtel y que ha provocado el cese del Sr. Rajoy como presidente del Gobierno, entre otras cosas, porque su declaración ante el Tribunal no fue creíble. Sí, ese “partido” que ha bramado como forma regenerativa que hay que volver “a los balcones y las banderas”, solo ha faltado lo de “las sotanas”.

Nosotros practicamos la política del encuentro; fuera de ahí no nos encontramos, pues queremos y trabajamos por una ciudad que genere vida y no mercantilismo, que es lo que se practica hoy. Es decir, queremos y hacemos una política que quiere situar a las personas en el centro de las decisiones, y lo queremos elaborar con solvencia. En ese camino, es posible que nos encontremos 

Es esta la cuestión clave, no podemos perdernos en cuitas, ni en nada que se le parezca, porque, como ayer ya te comentaba Lilian, “la paz del PSOE es temporal, que el poder une mucho, como bien demuestra el espectáculo del PP estos días. Somos un partido joven y nos queda mucho por hacer, también a la interna (no lo negamos y lo estamos arreglando, esto último es mío). Sin embargo las alforjas que llevamos traen mucho y bueno para Granada y ese viaje bien las merece”.

Es decir, que nosotros practicamos la política del encuentro; fuera de ahí no nos encontramos, pues queremos y trabajamos por una ciudad que genere vida y no mercantilismo, que es lo que se practica hoy. Es decir, queremos y hacemos una política que quiere situar a las personas en el centro de las decisiones, y lo queremos elaborar con solvencia. En ese camino, es posible que nos encontremos (fíjate tú, quien te iba a decir que el PSOE gobernaría el Estado Español con el apoyo de Podemos). Para nosotros es una cuestión de tiempo, y que además nos pongamos de acuerdo para ir sentando las bases legislativas para cambiar la vida de las personas a mejor. Es un camino que hay que cuidar, es lo que parece aconsejable.

Por eso, mejor no hacer de francotirador, ni meterse en la trinchera. No te preocupes por nuestros problemas que los vamos a resolver. Yo no te voy a espetar los de tu partido (¿para qué?, ¿cuál sería la utilidad?). Nosotros descartamos la confrontación inútil a la que, parece, nos empuja la opinión expresada en el artículo en cuestión (si no es así, mejor; y perdona por la apreciación). La confrontación inútil nos conduce a un terreno inhóspito, desagradable, ilegítimo. La ciudad espera de nosotros solvencia –en ella te incluyo. Y en eso nos vamos a centrar. Por lo demás, apunta a otro sitio y aprovecha el tiempo para construir, ese es el terreno en el que nos movemos y quizá nos encontremos.

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Salvador Soler García es abogado y secretario Político de Podemos Granada. Nacido en el seno de una familia muy humilde, cursó estudios secundarios en el Instituto Juan XXIII de Granada y he trabajado en varias empresas del sector siderometalúrgico, primero, como aprendiz, y después, como oficial cualificado. Ha participado activamente en el movimiento sindical de clase desde 1976. En el año 1993 accedía la Facultad de Derecho de la Universidad de Granada por el turno de mayores de 25 años y obtuvo la Licenciatura en Derecho en el año 1998. Es Abogado desde esa fecha, cumpliendo su sueño vocacional. Ha sido profesor honorario en la Facultad de Derecho de la Universidad de Sevilla y colabora como tutor externo de la Facultad de Derecho de la Universidad de Granada. Ha obtenido el Diploma de Estudios Avanzados (doctorado) por la Universidad de Educación a Distancia (UNED).

Pertenece al Equipo Director del Foro Permanente de Análisis de la Jurisprudencia de los Órganos Judiciales de Granada y es secretario del Grupo de Abogados de Derechos Humanos de Granada y forma parte de la Plataforma Stop Desahucios Granada 15 M donde actúa en la defensa de las personas afectadas por el abuso bancario. También es miembro de la Asociación Justicia por la Sanidad de Granada.

El día 21 de junio de 2013 fue elegido como miembro del Consejo Ciudadano Municipal de Podemos – Granada, del que es secretario Político.