Vamos Granada propone la creación de un observatorio laboral municipal que colabore con sindicatos y con la inspección laboral, coordinado con las áreas municipales de Contratación y de Empleo y Emprendimiento, y que tenga personal asignado a modo de oficina permanente. Entre sus funciones plantea que elabore informes periódicos, con especial atención a la perspectiva de género, brecha salarial y derechos de conciliación y sea punto de referencia para información y asesoramiento en materia de derechos laborales en general y en situaciones concretas. Además, que desarrolle un sello de calidad en el empleo para las empresas que operen en Granada, comenzando por el sector turístico y de hostelería, algo que se está haciendo ya en otras ciudades y regiones que apuestan por un turismo sostenible y de calidad como Valencia, Navarra o Barcelona. 

Así lo ha explicado en una nota de prensa la candidata a la Alcaldía de la capital por la formación, Marta Gutiérrez. Ha explicado que, aunque el Ayuntamiento no tiene competencia directa en materia laboral, se trata de un problema "acuciante" en la ciudad y es "responsabilidad" del gobierno municipal abordarlo.

En este sentido, Vamos Granada ha señalado que "la precariedad laboral afecta también a los empleados de las contratas y subcontratas de los servicios públicos". "La política de externalización seguida por el PP y continuada por el PSOE de Cuenca, ha tenido como único objetivo abaratar costes. El resultado ha sido que las empresas han empeorado las condiciones laborales y salariales, manteniendo o incluso aumentando su beneficio; conductores de Alhambra Bus, cuerpo técnico del teatro Isabel la Católica, conserjes de los colegios, personal de mantenimiento de parques y jardines, personal de la limpieza de INAGRA, el personal del servicio de ayuda a domicilio…prácticamente todas las concesiones y contratos están afectados". 

El ámbito "directo" del observatorio serían los servicios municipales, mediante concesión, contrato o subcontrato, pero también se podría colaborar con los sindicatos y la inspección en aquellos sectores de actividad en los que los trabajadores están "especialmente desprotegidos". En los sectores en que hay "mucha fragmentación o mucha inestabilidad, se hace especialmente difícil que haya estructuras y representación sindical fuerte. Esto afecta especialmente a sectores que además están fuertemente feminizados, como el trabajo doméstico o las camareras de piso".

"Los instrumentos legales existen, y la ley de contratos permite sancionar e incluso resolver el contrato por incumplimiento de la legislación laboral", apunta Gutiérrez para señalar que "no se está haciendo el debido control al respecto, y cuando los propios trabajadores hacen llegar sus reclamaciones, no se toman medidas". Como "ejemplo de esta falta de cumplimiento y control", ha destacado la reivindicación del sector del empleo doméstico, defendiendo la ratificación del convenio 189 de la OIT sobre trabajadoras y trabajadores domésticos, y las medidas para cumplir la legislación laboral en este sector".