Granada tiene una tasa de paro del 35%, carece de medidas de formación e inserción, tanto para particulares como para empresas, y no fomenta iniciativas para generar riqueza. Son las debilidades apuntadas por UPyD, que propone en su programa electoral crear planes integrales para fomentar el empleo y recuperar un organismo que canalice esos planes y las ayudas que puedan venir de otras administraciones. Ese organismo es el Instituto Municipal de Fomento y Empleo (IMFE), que eliminó el gobierno de José Torres Hurtado.

Nuria Martínez Chicón, número cuatro de la candidatura de UPyD en la capital, ha explicado que ese órgano municipal tendría, entre otras, la función de “establecer canales de comunicación entre el Ayuntamiento, la Universidad y otras instituciones, para generar recursos y dar oportunidades de empleo”.

La candidata ha hecho estas declaraciones en la puerta de la que fue sede del IMFE en el centro, que ahora sigue siendo una instalación dependiente del Ayuntamiento teóricamente dedicada al empleo pero que, según pudo constatarse, está prácticamente vacía. “Antes era un hervidero, venía gente con ganas de formarse, de crear empresas, y aquí se les daba un asesoramiento. Había colas y ahora no viene nadie; esto tiene que cambiar”, resalta.

Para Martínez Chicón, es fundamental contar con programas “integrales y efectivos” que den respuesta a las demandas ciudadanas. “Granada tiene un gran potencial en el ámbito del turismo, el comercio o la cultura y el Ayuntamiento tiene que estar ahí, liderando la lucha por crear empleo”, resume.

Granada es una joya, "pero hay que sacarle brillo"

La candidata a la Alcaldía, Mayte Olalla, ha ido más allá y ha incidido en que Granada no sólo debería aspirar a reducir drásticamente el índice de desempleo, sino incluso a “ser una ciudad a la que la gente viniera de fuera a buscar trabajo”. Granada, continúa la cabeza de lista de UPyD, “podría ser un referente por su valor cultural o por el prestigio de su universidad. Es una joya en sí misma, pero hay que sacarle brillo”.

Olalla no entiende por qué desapareció el IMFE. “Supuestamente fue para ahorrarse 300.000 euros al año, pero ahora nos hemos quedado sin millones de euros de subvenciones europeas que podrían canalizarse desde aquí. Como no se piden, no se conceden. El Ayuntamiento prescindió de un servicio fundamental y sin embargo se gasta esa misma cantidad, 300.000 euros, en siete asesores del grupo municipal del PP que ni siquiera aparecen por allí”, remata.