Susana Díaz defiende un PSOE-A no dirigido desde Madrid; Juan Espadas no confrontar y Luis Ángel Hierro, un partido de las bases
La candidata a las primarias del PSOE-A para la Presidencia de la Junta, Susana Díaz, ha reivindicado este martes, durante su debate, en el marco de la campaña, con los otros dos candidatos, Juan Espadas y Luis Ángel Hierro, un PSOE-A no dirigido desde Madrid, sino desde esta comunidad, y que sea autónomo en la toma de decisiones, mientras que Espadas ha defendido un partido unido, que deje a un lado la "confrontación" y que sea capaz de orientar "estrategias y políticas" del PSOE federal.
Susana Díaz, Juan Espadas y Luis Ángel Hierro han participado, desde las 20,00 horas en la sede regional del partido, en la calle San Vicente de Sevilla, en un debate a tres enmarcado en la campaña informativa puesta en marcha durante este proceso, que tiene en el próximo domingo, 13 de junio, su jornada de votación, y que ha estado moderado por la periodista Eva Saiz.
Desde su primer turno de intervención, Díaz ha expresado que ella quiere un PSOE-A que no se dirija desde Madrid, sino desde Andalucía, porque los andaluces nos hemos ganado tener voz propia, y "con ilusión, valentía y energía queremos volver a gobernar en Andalucía".
En su opinión, es muy importante que los socialistas andaluces reafirmen la defensa de la autonomía y del autogobierno y decidir aquí el camino, presente y futuro que queremos transitar. Ha dicho que los cinco presidentes de la Junta socialistas que ha habido fueron artífices de la transformación de esta tierra y de haber puesto los intereses de Andalucía por delante de los del partido, y un principio irrenunciable es que "queremos ser dueños del presente y futuro y no queremos un partido que se dirija desde fuera, sino desde aquí".
Tras aludir a la pérdida de votos que el PSOE-A ha sufrido en los últimos años, Espadas, en cambio, y dirigiéndose directamente a Susana Díaz, le ha dicho que hay que dejar claro a la militancia que ningún secretario general del PSOE-A o presidente de la Junta "permitirá nunca que esta tierra sea una sucursal de nadie, y cualquier duda al respecto es faltarle al respeto a la historia de esta tierra y a nosotros mismos, que no lo permitiríamos".
En su opinión, hay que jugar un "papel mucho más activo y mucho menos de interés personal en la confrontación con el PSOE federal". "El PSOE-A tiene fuerza suficiente para orientar estrategias y políticas del PSOE federal porque lo hizo a lo largo de la historia del partido", según Espadas, para quien es necesario ese PSOE-A que sabía decir 'no' cuando algo no era acorde con los intereses de Andalucía, y que se implique e involucre mucho más. "No tiene sentido estar en una posición numantina o de rechazo a cuestiones que no está claro por qué pueden perjudicar a Andalucía", ha dicho.
Por su parte, el tercer candidato en liza, Luis Ángel Hierro, ha reivindicado desde su intervención inicial su proyecto como el de "bases" socialistas que "surge desde abajo" y busca "hacer efectivo el 39 Congreso federal" del PSOE. "Desde el principio empezamos a trabajar en un proyecto programático", y "dijimos que esto era una cuestión de proyecto, no de caras".
Modelo de partido
Por su parte, Susana Díaz ha reivindicado que "llevamos más de dos años trabajando desde la oposición, día a día, reconociendo errores, escuchando a la sociedad, tejiendo lazos con los distintos colectivos de nuestra tierra, formando una gran alianza de progreso para desalojar a la derecha del Gobierno andaluz", y ha subrayado que, el próximo domingo, también "vamos a elegir qué modelo queremos como partido".
Juan Espadas, en cambio, ha señalado que el cambio que necesita el PSOE andaluz pasa por escuchar más a la sociedad, a la militancia, a los socialistas que se patean las calles de barrios y ciudades y también a los sindicatos, y ha lamentado que con Susana Díaz "no se ha escuchado ni a los nuestros".
Ha advertido de que de cara a las primarias desde el PSOE-A se tiene que "revertir la tendencia que parece consolidar a la derecha" en Andalucía en las encuestas, y que él da un "paso al frente" porque cree que "necesitamos un cambio frente a la resignación y para ganar las próximas elecciones autonómicas".
Durante el debate, los candidatos han abordado en distintos bloques cuestiones como la sanidad, la economía, los servicios públicos o el papel de Andalucía en España y Europa, además de que han respondido a preguntas de los militantes, un bloque este último que tanto Espadas como Hierro han defendido que se ha incluido gracias a sus peticiones para el diseño del debate. Además, los tres aspirantes han coincidido en la necesidad, a su juicio, de sacar al general golpista Gonzalo Queipo de Llano del lugar de la basílica de la Macarena de Sevilla donde está enterrado.
Espadas ha sostenido que no haber escuchado a la sociedad es uno de los motivos por los que el PSOE perdió el Gobierno de Andalucía, y ha asegurado que, con él, el PSOE andaluz "pasará del yo al nosotros" escuchando a todos los compañeros, a los agentes sociales, en especial a la UGT y recogiendo propuestas de todo el partido como las de Izquierda Socialista. "Yo las políticas de izquierdas no las explico, las aplico", ha aseverado.
Susana Díaz ha remarcado por su parte que "la historia del pueblo andaluz ha sido la historia de una continua lucha", y que el 4-D salieron los andaluces a las calles para "defender una Andalucía libre", tras lo que ha subrayado que "los socialistas andaluces queremos ser dueños de nuestro presente y de nuestro futuro" y "no queremos que el PSOE de Andalucía se dirija desde fuera, sino que los hombres y mujeres andaluces en libertad decidan su modelo de partido".
Díaz ha aludido a Blas Infante para afirmar que "los herederos de los franquistas que le arrebataron su vida campan a sus anchas" en nuestra sociedad, y que "la foto de Colón empezó en San Telmo".
En este sentido, la socialista ha defendido que "Andalucía lleva la libertad y la lealtad en su ADN" y que "las personas más leales son las personas libres, que no sumisas", porque "tenemos que ser dueños" de nuestro presente y de nuestro destino". "Una vez que esta decisión se tome aquí, siempre arrimaremos el hombro al Gobierno de España, porque si a España le va bien a Andalucía le irá bien", ha remarcado Susana Díaz.
Reproches de Espadas a Susana Díaz
Al inicio del debate, Espadas ha reprochado a Susana Díaz que los ediles socialistas se han sentido "bastante desatendidos dentro del propio partido" durante la pandemia, a lo que la secretaria general del PSOE-A ha replicado indicando que no era "momento de reproches", sino de "debatir en positivo para que los militantes se sientan orgullosos" de esta cita entre candidatos.
Hierro, por su parte, ha lamentado que "hemos abandonado el patio español", y ha apostillado que "en eso tendrás que decir algo, Susana", y "no nos hemos centrado en lo que nos teníamos que haber centrado".
También ha expresado que, "quien sea quien gane", que "aprenda lo que es un proceso democrático de este tipo, que consiste en que el que gana integra y lidera, y el que pierde es integrado y apoya", y ha dicho que "Susana Díaz está en su pleno derecho de querer continuar y Espadas de querer optar". "Yo no he comido con nadie de Ferraz, no he estado en ningún almuerzo, no puedo tener el apoyo de Ferraz", ha apostillado también Luis Ángel Hierro.
Finalmente, Espadas ha definido a Susana Díaz como "una política de raza" cuyo "capital político es innegable", pero "plantea un proyecto de continuidad" en una situación política en Andalucía que "requiere un cambio de profundidad en el partido y en lo que proponemos a los ciudadanos". Ambos han coincidido en reivindicar un PSOE-A "unido", y Susana Díaz ha insistido en defender que estas primarias son "la antesala" para que los socialistas andaluces "vuelvan al Gobierno" de la Junta.