ARTÍCULO DE OPINIÓN DE JOSÉ MARÍA CORPAS, ABOGADO Y SECRETARIO DE TRANSPARENCIA Y POLÍTICA MUNICIPAL DEL PSOE DE GRANADA

'Si tratas de ocultar un fantasma, lo haces más grande' (proverbio groenlandés)

Política - José María Corpas - Miércoles, 19 de Septiembre de 2018
Artículo de Opinión de José María Corpas, abogado y secretario de Transparencia y Política Municipal del PSOE de Granada capital, en el que nos ofrece un análisis político, desde su perspectiva.
José María Corpas.
@ALEXCASASOLA
José María Corpas.

Si el personaje creado por Eduardo Mendoza en Sin Noticias de Gurb, aterrizara en Granada, y con el objeto de ponerse al día se dispusiera a analizar la correlación de fuerzas políticas después de su última visita, la primera impresión que podría sacar es que la situación ha cambiado enormemente. Podría comprobar que en el escenario han aparecido nuevas formaciones políticas, una resultado del 15-M y otra por la renovación del centro derecha. Llegaría a la conclusión de que ambas formaciones, aún estando en espacios políticos diferentes y teniendo discursos muy alejados, tenían en su relato un elemento común cuando afirmaban  que “todo lo viejo era malo y lo bueno era lo nuevo”.  Y es probable, que llegara a la conclusión que en ese nuevo escenario en donde existe una correlación de fuerzas en la que no hay nadie con mayoría de gobierno, la opción más “lógica” era el diálogo y la colaboración, más que el conflicto y disenso.

Observando la realidad, quedaría enormemente sorprendido y desilusionado, por la actitud de las llamadas nuevas formaciones. 

En unos momentos extremadamente complicados, el PSOE solo con ocho concejales se vio en la necesidad de presentar una moción de censura y conformar gobierno. El sentido de la responsabilidad  fue lo que impulsó al PSOE  a provocar el cambio. Pero desde la moción hasta el día de hoy, se pueden contar con los dedos de una mano los puntos de colaboración de aquellas formaciones políticas que coadyuvaron a que Paco Cuenca fuera elegido  alcalde de Granada

Muy sintéticamente, esa puede ser la explicación de los resultados del Barómetro de julio del CIS, en donde destaca un enorme crecimiento del PSOE a todos los niveles,  provocada –según todos los analistas- por la necesaria moción de censura de Pedro Sánchez. No es nada fácil la situación, pero la ciudadanía parece que entiende el enorme esfuerzo que significa dar un paso de este calibre. Y por otra parte,  parece que castiga las posiciones de enfrentamiento y escasa colaboración de aquellos agentes políticos que hoy no tienen más opción que o situarse al lado de soluciones de progreso, o seguir en posiciones de bloqueo.

En Granada estamos viviendo algo similar. En unos momentos extremadamente complicados, el PSOE solo con ocho concejales se vio en la necesidad de presentar una moción de censura y conformar gobierno. El sentido de la responsabilidad  fue lo que impulsó al PSOE  a provocar el cambio. Pero desde la moción hasta el día de hoy, se pueden contar con los dedos de una mano los puntos de colaboración de aquellas formaciones políticas que coadyuvaron a que Paco Cuenca fuera elegido  alcalde de Granada.

Y podría entenderse esa actitud de aquella formación que se ha metido en una dinámica de ver quién es mas derechas. Pero es incomprensible esa actitud de aquellos otros que teóricamente están apostando por opciones progresistas.

“He reiterado en diversas ocasiones que la política del gobierno del PSOE es manifiestamente mejorable (…) pero el error de fondo en los tiempos que corren, estriba en (la) incapacidad para reconocer y actuar en consecuencia, de que es el PSOE , ganando la mayoría de los votos componentes del bloque social de progreso, es el partido que hoy representa a esos millones de ciudadanos.”  No lo he escrito yo, aunque perfectamente podría haberlo hecho. Lo escribió Fernando Soto que fue Secretario General del PCA desde 1979 a 1981, y con quien coincidí en esa época en el Comité Central.  Soy consciente de que  quienes hoy son los herederos de una u otra forma de esa formación (si leen estas notas) rápidamente apostillarán que Fernando Soto, como yo y muchos militantes, abandonaron el PC para apostar por un proyecto que representa hoy a esa mayoría del denominado bloque social de progreso. Pero si lo he sacado a colación, es porque estoy plenamente convencido de que esa es precisamente una de las grandes cuestiones en el debate en la izquierda en nuestro país, y lógicamente aquí en Granada.

Dice Yuval Noan Harari que “Los Sapiens pueden cooperar de maneras extremadamente flexibles con un número incontable de extraños. Esta es la razón por la que los sapiens dominan el mundo, mientras que las hormigas se comen nuestras sobras y los chimpancés están encerrados en zoológicos y laboratorios de investigación”.

Las posiciones intransigentes no conducen a nada. Las personas que habitan esta ciudad, y este país, lo que quieren son soluciones a los problemas con los que se enfrentan a diario.  No entienden la falta de colaboración y que todo aquello que se proponga esté mal.  Por un lado está  la cooperación con posicionamientos flexibles, por el otro los laboratorios de investigación para analizar la pureza del pensamiento.

Solo el tiempo y la ciudadanía, ponen a cada cual en su sitio.