La Junta recula y retira ahora la Atención Primaria de la polémica Orden que ponía precio a su privatización
Catalina García, en una comisión parlamentaria. joaquín corchero/EP
La Junta de Andalucía ha reculado y ha accedido ahora, en plena campaña electoral, a retirar la Atención Primaria de la polémica Orden que, por primera vez, ponía precio a la privatización de este servicio. El proyecto de Orden se conoció el pasado verano, en agosto, como informó entonces El Independiente de Granada. Ya en febrero de este año y, pese a las duras críticas por abrir la puerta de la Atención Primaria a la sanidad privada, la Junta se enrocó y decidió seguir adelante con esa medida.
En los últimos meses se han desarrollado movilizaciones reclamando la retirada de la Orden, a lo que el Gobierno andaluz se ha negado. Entre esas movilizaciones, manifestaciones convocadas por las mareas blancas en toda Andalucía. En el caso de Granada, esa protesta, celebrada en marzo, fue la mayor movilización de los últimos años. Tampoco entonces accedió a modificar sus planes la Junta, trató de minimizar llegando a asegurar que habían reunido a "mucha menos gente" de la que salía a protestar con el Gobierno socialista. Las protestas han seguido, con huelgas secundadas por el Sindicato Médico de Atención Primaria y también el Sindicato Médico Andaluz. En las distintas mesas celebradas hasta ahora la Junta se había negado a rectificar sus planes.
Hasta ahora la Junta se había negado a rectificar, pese a las movilizaciones ciudadanas y a las cinco reuniones previas que había mantenido con los representantes de los profesionales sanitarios
Este miércoles, sin embargo, según informa Europa Press, el Servicio Andaluz de Salud (SAS) y los sindicatos CSIF, CCOO, UGT y Satse han alcanzado un principio de acuerdo en la sexta reunión de la mesa técnica que crearon. El principio de acuerdo cntempla, entre otras cuestiones, retirar la Atención Primaria de la Orden de Tarificación y la renovación hasta septiembre de los 12.000 eventuales cuyos contratos finalizan en junio. Además se abrirá un ámbito de negociación sobre su estabilización. Con este principio de acuerdo, quedan desconvocadas de este modo las movilizaciones previstas para este jueves ante centros de salud de toda Andalucía.
El Sindicato Médico Andaluz (SMA) no ha dado el visto bueno al acuerdo de la mesa técnica de este miércoles y ha dicho que "seguirá con las movilizaciones mientras sea necesario", y han incidido en la necesidad de que la Administración "aplique el acuerdo de limitación de agendas en todos los centros de Andalucía" y contemple "la equiparación salarial entre el médico de familias y el médico de atención primaria", entre otras reivindicaciones.
Además, en la mesa técnica, en la que también se ha llegado a un acuerdo sobre la modificación del modelo de carrera profesional, se ha acordado, según informa CCOO, que Andalucía dedicará, al menos, el 25% del presupuesto del sistema sanitario público de Andalucía a la Atención Primaria, así como al reducción de forma progresiva de los cupos máximos a 1.300 tarjetas sanitarias en médico de familia y de enfermería -con el objetivo de seguir reduciéndolas a 1.200 a cinco años- y de 900 tarjetas en pediatría.
Las agendas para médicos y médicas de familia se reducirán a 35 citas y para pediatría a 25
También se ha acordado la limitación de agendas para todos los profesionales. De inmediato, se reducirán las agendas para médico de familia a 35 citas y para pediatría a 25, incluyendo todo tipo de consultas, mientras que para el resto de categorías -enfermería, fisioterapia, trabajador social, técnico de rayos- se constituye una mesa técnica para determinar a qué número de citas se reduce su agenda.
Precisamente la reducción de las agendas fue uno de los motivos que llevó al Sindicato Médico Andaluz a retomar las movilizaciones y una huelga cada miércoles. Este sindicato alcanzó hace meses un acuerdo con Salud que recogía esa medida. El mes pasado, el SAS envió escrito a los médicos y médicas de centros de salud invitándoles a renunciar. Ese escrito, que recogemos bajo estas líneas, provocó el enfado de profesionales y muy especialmente del Sindicato Médico Andaluz, pues en el texto, la Administración sanitaria invitaba a los médicos a señalar que renunciaban porque no era necesario, argumentando que las agendas pueden incrementarse porque muchos usuarios y usuarias terminan por no acudir a las citas programadas y porque cada vez son más las consultas telefónicas.
Igualmente, el acuerdo contempla, entre otras cuestiones, la actualización de los puestos de difícil cobertura (PDC), tanto de los hospitales comarcales como de las zonas básicas de salud y los dispositivos de atención primaria, incluyendo zonas de trabajo social (ZTS) y de especial aislamiento, así como el aumento de plantilla en 411 administrativos, uno por zona básica o centro de salud, con el objetivo de reducir cargas burocráticas de las consultas.
Detalle de un centro de salud en la capital. tom leif eggert/archivo
Se incluirán en plantilla 411 plazas de enfermera especialista comunitaria; aumentará la plantilla de rehabilitación, así como la plantilla de enfermera escolar hasta 411 plazas; se mejorará las ofertas a los EIR que terminan su especialización; se incorporará el podólogo a la plantilla del SAS; se equipará las condiciones y retribuciones de los equipos móviles y movilizables (SUAP) con las del 061; o se aumentarán las plantillas de los que equipos de salud mental en atención primaria.
Asimismo, los sindicatos han informado que se ha alcanzado un acuerdo de mejoras de carrera profesional para todos los trabajadores del SAS que incluye el facilitar el acceso a niveles superiores para todas las categorías, ha indicado UGT en nota de prensa, mientras que CCOO ha precisado que habrá "una doble vía: una carrera simplemente por tiempo trabajado -con una reducción de las cantidades que se cobran actualmente en cada nivel de carrera- y, otra, por un procedimiento de evaluación, manteniendo las retribuciones actuales de cada nivel".
Este acuerdo, que debe ratificarse en Mesa Sectorial de Sanidad el próximo 22 de mayo, llega después de seis reuniones de la mesa técnica de atención primaria, la última de ellas el pasado 2 de mayo, un encuentro que acabó sin acuerdo tras casi diez horas de reunión, aunque los sindicatos CSIF, CCOO y UGT no retomaron entonces las movilizaciones para "dar un margen de confianza" a Salud. Finalmente, reanudaron sus protestas ante los centros de salud el pasado jueves tras el "silencio", señalaron entonces, de la Administración sanitaria respecto a las medidas que habían propuesto en las mesas de negociación para mejorar la atención primaria, unas protestas que finalmente han quedado desconvocadas esta semana.
Satisfacción entre los sindicatos firmantes y "un brindis al sol" para el SMA
Por parte de los sindicatos, el portavoz de la Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO Andalucía, Luis González, ha destacado que este pacto por la atención primaria "consigue mejoras importantes en el funcionamiento de nuestro servicio sanitario y para los trabajadores".
Al mismo tiempo, ha agregado, "hemos alcanzado también un buen pacto sobre carrera profesional que permitirá que miles de trabajadores accedan de una manera mucho más fácil, a veces solo por servicios prestados, y que los trabajadores más antiguos del SAS tengan una subida automática del 15% en sus salarios", ha precisado.
De otro lado, el secretario del Sector de Salud, Servicios Sociosanitarios y Dependencia de la Federación de Empleados y Empleadas de los Servicios Públicos (FeSP) de UGT Andalucía, Antonio Macías, ha mostrado su "satisfacción" por el preacuerdo, en el que "se cumplen los objetivos establecidos desde un principio", es decir, "la eliminación de la posibilidad de cualquier tipo de privatización de la atención primaria, un acuerdo global que mejorará este nivel asistencial y todas sus categorías, así como la accesibilidad de los pacientes a los centros".
No obstante, ha agregado que "estaremos vigilantes del cumplimiento de todos los aspectos negociados, ya que nuestro principal objetivo es que exista una sanidad pública de calidad, que solo es posible consiguiendo mejoras que repercutan en los profesionales y en la ciudadanía", han indicado desde UGT.
Desde CSIF-A, el presidente del Sector de Sanidad, Victorino Girela, también ha manifestado su satisfacción por haber alcanzado un principio de acuerdo que "incorpora muchas de las propuestas que hemos llevado a las mesas"; además, la retirada en la orden de tarificación de la parte que hace alusión a la privatización de la primaria "nos produce mucha satisfacción porque era una de nuestra líneas rojas".
"Y no solo la incorporación de plantilla, que para nosotros también ha sido un escollo importante, sino que además el modelo de carrera profesional se mejora, se flexibiliza y permite que todas las categorías profesionales puedan acceder a cualquiera de los niveles", ha agregado Girela.
Igualmente, el Sindicado de Enfermería, Satse, se ha mostrado satisfecho por la parte de la orden de tarificación, porque "era una de las líneas rojas marcadas por esta organización sindical de cara a suscribir un acuerdo global por la mejora de la atención primaria en Andalucía", al tiempo que ha destacado que el último texto planteado por la Administración "refleja en gran medida" sus reivindicaciones".
Ha valorado, además, "el talante negociador mostrado por la Administración sanitaria en las últimas semanas para incorporar propuestas de las organizaciones sindicales".
Según el Sindicato Médico, Salud ha vuelto a poner sobre la mesa "el mismo documento que ya habíamos rechazado en varias ocasiones"
De otra parte, el presidente del SMA, Rafael Carrasco, ha apuntado que en la mesa de este miércoles la Administración "ha vuelto a poner sobre la mesa el mismo documento que ya habíamos rechazado en varias ocasiones por no abordar de forma concreta el problema de la escasez de médicos y no aportar soluciones a este respecto". "Este documento carece de informe presupuestario, adolece de una absoluta falta de concreción en las propuestas, y creemos que es un brindis al sol que no mejorará para nada la situación de la atención primaria en Andalucía", ha concluido.