IU cree que la reordenación de líneas de bus no resuelve los problemas pendientes de movilidad y reclama un billete único
El concejal de IU en el Ayuntamiento de Granada, Francisco Puentedura, ha vuelto a criticar la reordenación de líneas planteada por el gobierno local que, a su juicio, no resolverá los problemas pendientes de movilidad.
Tras subrayar que es "necesaria" una reordenación, ha considerado que la que entrará en funcionamiento este lunes 16 de julio no cubre los objetivos necesarios que, a su juicio, son una mejor comunicación con los barrios, además de resolver "la precariedad laboral" de los trabajadores de las empresas prestatarias.
Para el edil es "una irresponsabilidad" que se ponga en marcha "sin haber ofrecido información suficiente" a la ciudadanía.
Ha puesto el acento en que esa reordenación debería conseguir una coordinación entre líneas metropolitanas de bus, líneas urbanas y Metro, y no generar "competencia":
Líneas Metropolitanas y Metro con líneas urbanas. No competencia sino ocmplementarse
Tras criticar el "tijeretazo al transporte público" que según IU supone esta reordenación, ha considerado que sigue "la misma estrategia equivocada del PP cuando impuso la LAC". El desequilibrio en el transporte, ha explicado, viene por la pérdida de viajeros a consecuencia del incremento de los transbordos, no por los kilómetros. Por ello considera equivocado recortar kilómetros, como prevé la reordenación. Así "no se mejora".
Ha criticado que el transbordo gratis sea solo en los municipios del trazado del Metro y por ello ha considerado necesario un billete único, pues igualaría a todos los habitantes del Área Metropolitana, con unidad de tarjeta de transporte, gestión integrada, líneas coordinadas, y mismas bonificaciones.
Un billete único, ha dicho, con un único modelo de gestión. Se ha referido en este punto a las subcontratas como Alhambra y Hermanos Gómez, que a su juicio "precarizan" a los trabajadores y ha insistido en que se "respete las condiciones laborales", recordando las sentencias que establecen "cesión ilegal" de la plantilla.
Para Puentedura, esta reordenación conduce a "un modelo de inmovilidad insostenible".