'Granada, una provincia abandonada y saqueada'
Granada es una provincia de oportunidades ilimitadas sin embargo se ve asfixiada por la desidia y la incompetencia política del PP. Somos una de las provincias con mayor desempleo juvenil de España, mientras las oportunidades se nos arrebatan. Contamos con un puerto que podría ser clave para el comercio, un polo tecnológico que, con el impulso adecuado, podría liderar la innovación del país y un aeropuerto que, lejos de consolidarse con vuelos internacionales, está relegado a la irrelevancia. Sin embargo, estas potencialidades nada le importan a Junta de Andalucía ni a la Diputación de Granada.
El abandono de nuestra provincia es absoluto, pero la Granada rural es la que más sufre esta dejadez. Los pequeños pueblos se desvanecen porque no hay una estrategia integral contra la despoblación, no hay inversiones que permitan a los jóvenes quedarse. La burocracia se erige como un muro infranqueable: los jóvenes agricultores y ganaderos que quieren emprender se encuentran con trabas interminables, papeleo asfixiante y meses -cuando no años- de espera para recibir cualquier ayuda. Y cuando llegan, resultan insuficientes y tardías.
A esto se suma que el la Junta está esquilmando a nuestra alma mater, la Universidad de Granada. La Junta de Andalucía le asigna un presupuesto injusto y merma así el motor intelectual informativo que supone.
El PP abre las puertas de par en par a universidades privadas y centros de formación sin calidad, con tarifas para quien pueda pagárselas y sin otro propósito que hacer negocio con la educación
Mientras tanto, el PP abre las puertas de par en par a universidades privadas y centros de formación sin calidad, con tarifas para quien pueda pagárselas y sin otro propósito que hacer negocio con la educación. Nos están destrozando el sistema público, la única vía que garantiza de igualdad de oportunidades para todas y todos.
Seguimos sin el tren litoral que conecte Motril con Nerja y Málaga (hay un estudio informativo de la Junta de Andalucía sobre la viabilidad de un tren que conecte Nerja y toda la costa del sol, y se ha excluido la posibilidad de que ese tren llegue hasta Motril) Seguimos sin un plan para hacer de nuestro aeropuerto una puerta real al mundo. Seguimos sin políticas que generen empleo de calidad. Y seguimos viendo cómo nuestros jóvenes se marchan, porque en su tierra no vislumbran su futuro.
A la falta de visión estratégica, el deterioro de los servicios públicos como es la Universidad, la educación o la sanidad, se le suma que la Junta de Andalucía mira a otro lado en uno de los temas principales que más nos preocupa a la juventud: la vivienda. Que no nos podamos emancipar, y que nuestros dirigentes políticos competentes en la materia, que es la Junta de Andalucía y su consejera Rocío Díaz, nos sumen en la desidia y la dejadez más absoluta. No han puesto en marcha ni una sola política de impacto que nos permita emanciparnos, al contrario, la gestión de los recursos que llegan del Estado, son desastrosos -por ejemplo, el Bono alquiler joven-.
Granada no necesita promesas vacías ni gestos simbólicos. Requiere una acción decidida, inversión y una estrategia integral para aprovechar su potencial. Pero mientras continúe la gestión de estos gobiernos, lo único que nos espera es más abandono y un notable deterioro. El peor castigo que estamos recibiendo la juventud en la provincia de Granada, es tener unos dirigentes, del PP que son nefastos y nos condenan al absoluto fracaso.
