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Los grupos de izquierda reclama una comisión de investigación en el Parlamento

La consejera de Salud se aferra al cargo mientras oposición y sindicatos piden su cese

Política - Redacción El Independiente de Granada - Viernes, 3 de Octubre de 2025
El presidente de la Junta, que se enfrenta a una de las crisis más graves desde que gobierna, evita hablar ahora de exigir responsabilidades: "ahora lo que me quita el sueño es chequear a esas 2.000 mujeres".
Rocío Hernández, este viernes en Granada.
Junta de Andalucía
Rocío Hernández, este viernes en Granada.

El Gobierno de Juan Manuel Moreno afronta una de las peores crisis, de nuevo relacionada con la sanidad pública y que compromete la imagen idílica que trata de colocar sobre su gestión: el escándalo por los fallos del programa de cribado de cáncer de mama que, según datos de la propia Junta, no informó debidamente a 2.000 mujeres sobre los resultados de las mamografías. La crisis ha alcanzado tal dimensión, por la gravedad de lo que hay detrás, que la Junta ha pasado de afear a las mujeres con cáncer que lo hubieran denunciado públicamente, un malestar que el propio Moreno no ocultó en sus primeras declaraciones, a poner el énfasis en que se ha detectado el problema y se va a actuar, llamando a esas 2.000 mujeres a una nueva prueba y cambiando el protocolo para que estén siemre debidamente informadas. Lo que no ha cambiado es la falta de asunción de responsabilidades. 

En Granada, donde participó en un acto en las instalaciones de la Escuela Andaluza de Salud Pública, la consejera de Salud y Consumo de la Junta, Rocío Hernández, descartó que vaya a dimitir. "Eso sería lo  fácil. Mi responsabilidad va más allá y es que el sistema mejore", respondió las preguntas de los periodistas al respecto para añadir que, en este caso en concreto, el de los cribados, su responsabilidad e que "se les informe, se les haga la prueba en el tiempo que se considere e ir mejorando el programa de cribado". "Lo otro [dimitir], aunque alguien lo pida y lo han pedido mucho, sería una falta de responsabilidad por mi parte y sería lo fácil".

Rocío Hernández enmarcó lo ocurrido en "un problema de comunicación". Lo que sostiene la Junta es que el error ha sido no informar a las mujeres cuyos diagnósticos no eran claros y debían ser sometidas a nuevas mamografías porque había sospechas de lesiones. 

La Junta insiste en que no ha habido fallos ni retrasos y que lo ocurrido es que no se informaba a las mujeres con lesiones "sospechosas" detectadas en las mamografías del programa de cribado de cáncer de mama

De hecho, buena parte de su intervención ha tenido carácter 'pedagógico'. "A ver, vamos a ver: el cribado tiene más de 20 años. Invita cada año a medio millón de mujeres y hemos ido incrementando el rango de edad, por tanto el número de mujeres. Los cribados son para el sí y para el no. Puede haber una lesión con signos de malignidad o de benignidad o ninguna. Hay una lesiones -ha proseguido- que, bueno, pueden ser sospechosas" y "qué es lo que ocurre" en esos casos, pues que "esas mamografías, que han sido revisadas por dos radiólogos, son derivadas a las unidades de referencia de los hospitales, donde son revisadas por un tercer radiólogo. Este profesional, en base a los protocolos y la evidencia científica, decide repetirla al mes, o a los tres meses, a los seis meses o al año". 

Según Rocío Hernández, lo que ha ocurrido es a esas mujeres sobre las que había sospechas no se les estaba informando. El proceso seguía, sin conocerlo ellas, hasta que eran citadas a una nueva mamografía. 

Esto implica, y eso no lo ha dicho la consejera, que otras mujeres desconocen en estos momentos la existencia de esas lesiones que pueden o no ser malignas. Una vez que ha saltado el escándalo, con la denuncia de mujeres con cáncer a las que no se había informado previamente de que había sospechas, la Junta ya informará de los "casos dudosos".

Moreno evita hablar ahora de ceses y dimisiones

El presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno, tampoco quiere oír hablar de dimisiones. Es momento, según Moreno, de que la Consejería de Salud se centre en "corregir el problema" detectado en el programa de cribado de cáncer de mama y, después, tomará la decisión en cuanto a las responsabilidades políticas. 

"Pero creo que ahora, más que buscar responsabilidades, lo que tenemos que es solventar el problema", señaló en declaraciones a los medios en O Grove (Pontevedra), donde participó en el foro La Toja. Respondía Moreno a una pregunta sobre si tiene previsto cesar a la consejera de Salud y Consumo, Rocío Hernández, que horas antes había descartado dimitir. 

El presidente, este viernes, en el Foro la Toja. junta de andalucía

La próxima semana, según el presidente de la Junta, se dará a conocer "cambio en el protocolo".

El presidente de la Junta anuncia una auditoría sobre los programas de cribado de cáncer

"Que una por una de esas mujeres puedan ser atendidas de manera inminente, y algo que nos parece fundamental, vamos a cambiar el protocolo", explicó el presidente recordando, como antes en Granada había hecho la consejera, cómo funciona el protocolo e insistir en que, cuando los resultados de las mamografías generaban dudas, lo se hacía era no comunicarlo a la mujer "para no generar incertidumbre". En esos casos, de acuerdo a la versión de la Junta, se les volvía a citar a pruebas possteriores. Como había señalado la consejera, el presidente de la Junta también ha hecho hincapié en que el 98 por ciento de las pruebas "no dan positivo" en cáncer. Y, cuando "hay algún posible indicio de futuro, lo que se hace es no introducir un elemento de ansiedad al paciente, se decide no decirle nada y ya se le hacen pruebas posteriores".

En todo caso, esto es lo que va a cambiar la Junta, para que la paciente "tenga toda la información, y sabiendo que la probabilidad de que tenga cáncer es mínima, pero que al menos sí tenga conocimiento de esa información previa, y le haremos, lógicamente, el seguimiento a través del Servicio Andaluz de Salud".

También anunció una auditoría para conocer si este problema se ha dado con otros cibados.

Volviendo a las responsabilidades políticas, reiteró que su preocupación era "chequear a las 2.000 mujeres que Salud calcula están afectadas. "Es mi obsesión y ahora mismo lo que me quita el sueño" y quiere que "de manera rápida y ágil" se les haga nuevas pruebas. 

Las responsabilidades políticas se determinarán tras corregir los errores y no necesariamente en el cargo de la consejera: "hay un director general, un jefe de servicio, una consejera, un viceconsejero..."

Una vez que se detecten los posibles errores y se corrijan, ha añadido, se verá "quién está detrás de esa responsabilidad: hay un director general, hay un jefe de servicio, hay una consejera, un viceconsejero, y, a partir de ahí, lógicamente, tomaremos una decisión en cuanto a las responsabilidades políticas".

No parece desprenderse de esas palabras que vaya a cesar a la consejera. 

La oposición pide una comisión de investigación en el Parlamento

Los grupos Socialista, Por Andalucía y Mixto-Adelante Andalucía reclaman una comisión de investigación en el Parlamento andaluz sobre el escándalo de los cribados de cáncer de mama. 

Así, la vicesecretaria general del PSOE-A y portavoz del Grupo Parlamentario Socialista, María Márquez, reivindicó la creación de una comisión de investigación ante los “gravísimos” fallos en el sistema de cribado de cáncer de mama detectados y por los que “se tienen que depurar responsabilidades”. “No basta con pedir disculpas, como ha hecho Moreno Bonilla”, insistió Márquez, que reiteró su exigencia de dimisión para la consejera de Salud, “que ni puede, ni debe”, seguir un minuto más en el cargo”.

“Los tres grupos de la izquierda estamos de acuerdo en la necesidad de que se constituya una comisión de investigación en el Parlamento que permita arrojar luz y depurar responsabilidades ante la que es sin duda la mayor crisis sanitaria en España”, subrayó la vicesecretaria general de los socialistas andaluces.

Por su parte, el portavoz de Adelante Andalucía, José Ignacio García, defendió que la iniciativa persigue que "se sepa qué está pasando con las listas de espera para la detección y tratamiento de los cánceres en Andalucía", no sólo en lo que respecta al cáncer de mama, también en otros programas. "Queremos que se investigue todo", apuntó

Para García, cualquier diputado, "con un mínimo de dignidad", tendría que votar a favor de la iniciativa. 

El hecho de que la Junta hable de 2.000 mujeres genera una "sensación de inseguridad" y se preguntó "cuántas mujeres en Andalucía se estarán diciendo si el suyo ha fallado". Por todo ello consideró que la consejera no podía seguir "ni un minuto más" en su cargo.

La portavoz del grupo Por Andalucía, Inma Nieto, confirmó que su grupo se sumará a la solicitud de creación de comisión de investigación en el Parlamento. Por Andalucía, agregó, va a respaldar "cuantas iniciativas parlamentarias hagan falta" para el presidente de la Junta "dé la cara y explique qué ha pasado, por qué ha pasado y a cuántas mujeres les afecta". 

"Que no piense que se va a ir de rositas mientras que hay miles de mujeres en Andalucía que, por su negligencia, no saben si tienen cáncer o no lo tienen", advirtió.

La Federación Española de Cáncer de Mama pide una respuesta "rápida y eficaz", con medidas que garanticen "la tranquilidad" de las mujeres

Sobre el escándalo se han pronunciado asociaciones, no solo la que ha liderado la denuncia, Amama, también la Federación Española de Cáncer de Mama que ha advertido de que "retrasar los resultados de estas pruebas compromete la salud de las mujeres y genera una situación de incertidumbre emocional y clínica que ninguna paciente debería vivir"

"Estamos ante pruebas esenciales para la detección precoz del cáncer de mama. Hoy por hoy, la mamografía es el método idóneo para el cribado de esta enfermedad, una herramienta clave que permite diagnosticar tumores en fases iniciales, cuando el tratamiento es más eficaz y el pronóstico más favorable", expuso la federación, que consideró que "no cabe una respuesta institucional que no sea empática, rápida y eficaz, con medidas inmediatas que garanticen la seguridad, la tranquilidad y el derecho a una atención sanitaria de calidad de todas las mujeres".

Facua exige aclarar si hay fallos en otros cribados de cáncer

Por su parte, Facua Andalucía reclama a la Junta que aclare si los fallos y falta de información se ha detectado únicamente en el programa de detección del cáncer de mama o si estos errores se han podido producir también en otros programas de prevención o pruebas diagnósticas relacionadas con otros tipos de cáncer.

La federación califica lo ocurrido como "el mayor escándalo de la sanidad pública andaluza de toda la democracia". Por ello, exige al presidente Juan Manuel Moreno Bonilla que sea "consecuente" y cese de su puesto a Rocío Hernández, consejera de Salud y Consumo, tras confirmarse que ha habido de una gestión "negligente e irresponsable" que ha puesto en entredicho la salud de muchas usuarias del Servicio Andaluz de Salud (SAS).

Después de restar importancia al escándalo durante toda la semana, la Junta ha reconocido este jueves que son 2.000 las mujeres con un diagnóstico previo "no concluyente" de cáncer de mama pendientes de que las llamen para confirmar o descartar la enfermedad.

"No es de recibo que se mantenga en el cargo la responsable de un área que, lejos de reconocer los errores y abordar el problema con transparencia y garantías, llegó a decir que se trataba de un escenario 'puntual' en el que había afectados 'dos o tres casos'. Es más, pidió dejar la 'manipulación' del sistema público de salud tras escuchar el testimonio de una de las mujeres afectadas a las que el diagnóstico de cáncer le llegó dos años después". 

CSIF pide establecer un plazo máximo por ley para comunicar los resultados

También los sindicatos se han pronunciado sobre esta situación. Así, CSIF muestra su "perplejidad" y pide que se depuren responsabilidades antes los “intolerables fallos” en el sistema de detección precoz del cáncer de mama y lamenta que la falta de recursos "menoscabe la credibilidad del sistema sanitario público y de sus profesionales".

El presidente del sector de Sanidad de dicha organización, Victorino Girela, afirma que "es injustificable que, a día de hoy, con los sistemas informáticos y de comunicación que existen, las mujeres andaluzas tengan que enfrentarse a situaciones en las que lo que está en juego es su vida".

El sindicato sostiene que, "con total seguridad, la mala planificación, la mala gestión y la falta de recursos humanos y materiales están detrás de este escándalo mayúsculo". En este sentido, CSIF exige una solución inmediata ante esta problemática, que, "además de perjudicar a las andaluzas, también pone en tela de juicio el crédito de un sistema sanitario público cada vez más debilitado". "Las y los profesionales desempeñan su labor en unas condiciones deplorables derivadas de la falta de inversión y de la nula voluntad política para reforzar el sistema sanitario y ofrecer una atención de calidad", denuncia Girela.

Emplaza a la Consejería de Salud y Consumo a que se comprometa a establecer un plazo máximo por ley para comunicar los resultados de las pruebas de cribado, sea cual sea su resultado, tal y como ya existe en otras comunidades.

"Desgraciadamente, la ciudadanía tiene que acudir a menudo a la sanidad privada a resolver este tipo de cuestiones, cuyo pronóstico se ve condicionado por el diagnóstico precoz", lamenta Girela, quien añade que "la actitud del Gobierno andaluz no se corresponde con la defensa de la sanidad pública que a menudo enarbola".

Por su parte, UGT Andalucía señala que este grave caso lo que constata es la "incapacidad" de gestión por parte del SAS. "Casos como estos se estén produciendo todos los días en todas las especialidades. Las listas de espera producen graves problemas de diagnóstico y tratamiento y, desgraciadamente, demuestran que los recortes matan", reflexiona el sindicato. 

"Esconder la cabeza debajo de la millonada que dice que se gastan es no querer ver la realidad o dar por buena la lamentable gestión que se hace", advierte UGT

"Todos los andaluces padecemos un retraso más que considerable en una cita con nuestro médico de atención primaria, que se alarga si se tienen que realizar una extracción o cualquier prueba complementaria. Luego puedes necesitar una derivación al médico especialista de hospital, que irá para largo; además te mandará pruebas más específicas y complejas, para luego volver a citarte, entrar en una lista de espera quirúrgica, ingresar… ¿Cuánto tiempo puede pasar desde que notas algún síntoma hasta que te diagnostican, intervienen y tratan? Pues eso, ese es el problema de nuestro sistema, la dejadez, la nefasta gestión y la apuesta por la privada que antepone criterios económicos a los puramente asistenciales", expone. 

UGT cree que el presidente de la Junta de Andalucía debe cesar a la consejera, "que está hundiendo lo más preciado que tenemos", y "formalizar un pacto por la sanidad pública que mejore las inversiones, asegure más personal y consiga una asistencia acorde con las necesidades de hoy". "Esconder la cabeza debajo de la millonada que dice que se gastan es no querer ver la realidad o dar por buena la lamentable gestión que se hace", resalta el sindicato.