Colectivos memorialistas piden a la presidenta del Parlamento la retirada inmediata de los símbolos fascistas de "la casa del pueblo andaluz"
La Coordinadora Andaluza por la Memoria Histórica y Democrática ha enviado una carta a la presidenta del Parlamento de Andalucía, Marta Bosquet, en la que ruega "la retirada inmediata de la bandera de la Falange, simbología fascista, de la Casa de la Palabra y la Libertad, la Casa del Pueblo Andaluz". La misiva se ha entregado igualmente a todos los grupos políticos con representación parlamentaria, a excepción de Vox, para que se sumen a esta iniciativa, apelando a sus "convicciones democráticas" y por tratarse de "una cuestión que nos compromete a todos".
El portavoz de la Coordinadora, Antonio Manuel Mateos, ha reivindicado la necesidad y la urgencia de los representantes públicos de "distinguir con claridad la defensa de los valores y principios democráticos frente a los que atentan contra estos".
En la carta las entidades memorialistas recuerdan que "la bandera de la Falange que hoy ocupa las instalaciones del Parlamento andaluz ha quedado en la memoria colectiva de nuestra tierra como sinónimo de violencia, terror, infamia y división", por lo que instan a la presidenta de la Cámara a "que haga gala del cargo que ostenta y de su condición de representante del pueblo andaluz evitando, incluso desde la omisión, contribuir a la banalización de los que tanto sufrimiento provocaron en nuestro pueblo".
Igualmente, la Coordinadora, en boca de su portavoz, pone de manifiesto la figura de Blas Infante, "inspirador de los principios y valores que quedaron definitivamente reflejados en el Estatuto de Autonomía para Andalucía, desde la base de los principios irrenunciables de igualdad, democracia y convivencia pacífica y justa, que identitariamente nos confiere un carácter singular como pueblo".
"Por su defensa a ultranza de la libertad, la democracia, la igualdad y la justicia social, sufrió directamente la sinrazón de la barbarie fascista pagándolo con su propia vida. Su legado sobrevivió junto con la lucha de miles de andaluces y andaluzas, víctimas todas de la represión franquista hoy reconocidas como tales por la Ley 2/217 de Memoria Histórica y Democrática de Andalucía, lo que ha permitido sobrevivir a los cuarenta años de dictadura y que hayamos sabido construir nuestra identidad como pueblo sobre la base de esos principios de libertad, democracia, igualdad y justicia social", concluye la circular.