Herencia económica

La capital arrastra de ejercicios anteriores 140 millones de euros pendientes de cobro

Política - M.A. - Viernes, 15 de Marzo de 2019
Los llamados 'ingresos de dudoso cobro' constituyen una cantidad acumulada durante sucesivos mandatos por multas, sanciones o impuestos, entre otros conceptos, que se recoge en el informe del interventor sobre la liquidación del presupuesto del pasado ejercicio, en la que también hay datos positivos como el cumplimiento de la regla del gasto, la estabilidad presupuestaria o el ahorro neto.
La liquidación las cuentas arroja otros datos que sí son positivos, como la estabilidad presupuestaria o la capacidad de endeudamiento.
P.V.M.
La liquidación las cuentas arroja otros datos que sí son positivos, como la estabilidad presupuestaria o la capacidad de endeudamiento.

Al cierre de 2018, el Ayuntamiento de Granada acumulaba 140 millones de euros sin cobrar. Corresponden a lo que en términos presupuestarios se denominan 'ingresos de dudoso cobro'. No se generaron el pasado ejercicio; ni siquiera en este mandato. Es una cantidad que se ha ido incrementando a lo largo de muchos años por multas, sanciones o impuestos, entre otros conceptos, que no terminan de cobrarse. De hecho, el año pasado desde el área de Economía se especificó que incluso se habían encontrado cantidades pendientes de cobro desde los años noventa. Algunas de esas deudas son objeto de contencioso judicial. Y reflejan un problema arrastrado de recaudación.

Todo ello, como es conocido, con un presupuesto prorrogado desde 2015, ejercicio desde el que no se han sacado adelante nuevas cuentas en el Ayuntamiento de Granada.

La cantidad, que asciende en total a 140.479.537,84 euros, viene recogida en el informe de Intervención sobre la liquidación presupuestaria, consultado por El Independiente de Granada. Ha crecido respecto a los datos que se dieron a conocer el pasado año por el gobierno local. No obstante, el interventor aclara que se han actualizado los criterios que se venían aplicando en ejercicios anteriores, así que el incremento en parte se debe a ese cambio. De haberse mantenido los criterios anteriores, no serían 140 millones, sino 132,5.

Es un dato que conduce a otro también preocupante como es el remanente negativo de tesorería para gastos generales. Es un indicador que refleja la situación financiera del Ayuntamiento si tuviese que pagar sus deudas a corto plazo. O lo que otras fuentes explican como la cantidad resultante después de que el Consistorio ingresara todo lo que le deben y pagara, a su vez, todo lo que adeuda. Ese remanente negativo de tesorería asciende a -49,9 millones de euros. 

El interventor explica en su informe que, según establece la Ley de Haciendas Locales, cuando este indicador es negativo se exige que, o bien se reduzcan gastos del nuevo presupuesto por cuantía igual al déficit producido mediante acuerdo de pleno, o si esa reducción no fuera posible, que se concierte una operación de crédito por ese importe siempre que se den las condiciones establecidas por ley. De no aprobarse ninguna de estas dos medidas, el presupuesto del siguiente ejercicio debería aprobarse con un superávit inicial de cuantía no inferior al repetido déficit. Y precisa que en 2017 -a través de una disposición en la Ley de Presupuestos Generales del Estado- el Gobierno autorizó a las corporaciones locales a convertir deuda a corto plazo y en deuda a largo plazo.

'Es necesario que se modifique de nuevo el Plan de Ajuste'

Precisamente en aplicación de esa norma el pleno, en octubre de 2017, aprobó una modificación del Plan de Ajuste del Ayuntamiento de Granada con una proyección de los datos para las liquidaciones presupuestarias entre 2018 y 2022. Y el interventor señala que no se ha cumplido el remanente de tesorería para gastos generales correspondiente a 2018, que debía ser de -35 millones. Razón por la que advierte de que "es necesario se modifique de nuevo el Plan de Ajuste con la adopción de las medidass adicionales necesarias para reconducir esta situación". De no hacerse, añade, "deberá informarse con carácter negativo la aprobación de nuevo presupuesto". 

Los datos positivos: estabilidad presupuestaria y más capacidad de financiación

No todas las magnitudes de la liquidación presupuestaria reflejan datos negativos. Desde el gobierno local de hecho se incidió este jueves, al presentar la liquidación de las cuentas, en la estabilidad presupuestaria, al haber cerrado el presupuesto de 2018 con un resultado de 10,2 millones, y en la capacidad de financiación, de 23,4 millones. Ese último dato ha sido posible, según explicó el portavoz del gobierno local y responsable de Economía, Baldomero Oliver, gracias al "progresivo saneamiento" de la economía municipal.

Baldomero Oliver, este jueves en rueda de prensa. ayto.granada

"Se confirma nuevamente la senda de recuperación económica de la ciudad al cumplirse con la estabilidad presupuestaria", destacó Oliver, según informa Europa Press.

"Gracias al intenso esfuerzo de contención del gasto" y a "la mejora en la recaudación municipal en periodo voluntario" el presupuesto correspondiente a 2018 se ha cerrado con "unos resultados positivos, al cumplirse con la estabilidad presupuestaria, la regla de gasto y haber mejorado el ahorro neto del Ayuntamiento".

Para Oliver, los datos de la liquidación del presupuesto de 2018 son "esperanzadores" en la medida en que la ciudad, "pese a no haber podido contar con unas ordenanzas fiscales en 2018", ha registrado una mejora en la senda de la estabilidad presupuestaria en un 8,53 por ciento, parámetro que "le permite aumentar su capacidad de financiación al ser sus ingresos no financieros superiores a los gastos no financieros en 23.452.868 euros".

A su vez, el Ayuntamiento de Granada cierra el presupuesto de 2018 con un resultado de 10.273.744 euros, parámetro que indica que "los recursos obtenidos han sido suficientes para abordar las necesidades adquiridas por la ciudad".

Oliver también se refirió al ahorro neto como otro de los parámetros que alcanza un resultado positivo con 17.006.801 euros por lo que "hemos mejorado la capacidad que tiene la ciudad para endeudarse".

Los datos han sido posibles, según apuntó el edil, por el "intenso esfuerzo en materia de contención del gasto", que se ha situado en un 89,02 por ciento, sin afectar a los servicios públicos y pese a las obligaciones en el capítulo de personal a las que ha tenido que hacer frente el Ayuntamiento, y a la mejora en la recaudación por ingresos de derecho público con un 85,42 por ciento.

En este sentido, incidió en que se ha producido una mejora en un cinco por ciento, con unos ingresos por valor de 62.841.720 euros, frente a los 59.857.143 de 2017.

La liquidación del presupuesto de 2018 arroja, a su vez, un estado de ejecución de los ingresos del 88,92 por ciento, con un total de 277.288.130 euros de derechos netos reconocidos.