La comunidad educativa granadina tiene a su disposición desde hoy mismo una nueva propuesta ideada por el gabinete de Convivencia e Igualdad y el Equipo Técnico de Orientación de la Delegación de Educación de Granada con la intención de prevenir e intervenir en el alumnado que presenta "conductas inadecuadas" en los centros educativos. Se trata del programa ‘Pídele peras al olmo’, una iniciativa en la que se recogen propuestas para atajar malos comportamientos del alumnado partiendo de una organización creativa de la escuela, así como de metodologías inclusivas que fomentan el desarrollo social y personal de los escolares.

Según ha informado la Junta, el programa se ha presentado en el marco del encuentro de la Red Provincial de ‘Escuela: Espacio de Paz’, una jornada de trabajo en la que el delegado territorial de Educación, Germán González, ha animado a toda la comunidad educativa a “fomentar la convivencia positiva en el aula, erradicando cualquier comportamiento contrario a las normas de convivencia en el marco de un espíritu inclusivo que permita el éxito educativo de todo el alumnado”.

“Pedir peras al olmo implica desechar ideas preconcebidas, compensar las desigualdades socioculturales del alumnado y potenciar herramientas de convivencia positiva en ecosistemas sociales tan complejos como son los centros educativos”, ha explicado González, para quien “es imprescindible generar propuestas de intervención viables, concretas y eficaces que desarrollen la normativa en vigor en materia de convivencia”.

En este sentido, según ha explicado el delegado territorial, el documento presentado “parte de la experiencia real en innumerables grupos de alumnos y alumnas de distintas edades y entornos personales muy diversos, dando respuesta a diferentes situaciones mediante prácticas de éxito que se basan en los principios básicos de equidad, corresponsabilidad y calidad que marcan la educación andaluza”.

Entre las propuestas de trabajo incluidas en ‘Pídele peras al olmo’ se incluyen medidas de organización creativa de la escuela y de gestión de la convivencia, entre las que se cuentan estrategias de aprendizaje dialógico, creación de espacios participativos, comisiones mixtas o mediación entre iguales.

Además, se proponen nuevas metodologías inclusivas que atienden a la diversidad del alumnado de una forma práctica y mejoran sustancialmente la convivencia escolar, entre las que se cuentan grupos interactivos, aprendizaje cooperativo, estudio de casos o aprendizaje basado en proyectos.

En el apartado de desarrollo social y personal del alumnado, el documento pone a disposición de la comunidad educativa estrategias novedosas como programas de inteligencia emocional, yoga, mindfulness, relajación muscular y diafragmática, musicoterapia, arteterapia o artemediación.