La Junta afirma que está implementando nuevas medidas de seguridad en los centros sanitarios
La Junta de Andalucía ha condenado este martes "cualquier tipo de agresión, tanto física como verbal, dentro o fuera de un centro sanitario", después de que haya trascendido un episodio violento por parte de un paciente a dos vigilantes de seguridad privada, y ha explicado que se están implementando nuevas medidas de seguridad en los centros sanitarios públicos.
Así lo han señalado a Europa Press fuentes del Gobierno andaluz después de que CSIF haya informado de que el pasado 29 de marzo en el Hospital Clínico San Cecilio fue necesario contener a un paciente que se encontraba "agitado" y que empezó a amenazar de muerte a los sanitarios de la planta de Salud Mental.
La actuación dejó a dos vigilantes con contusiones en muñecas y brazos a causa de los puñetazos y patadas recibidas, además de traumatismo facial y occipital en uno de los casos, y con traumatismo y fractura nasal en el otro, por lo que tuvieron que ser atendidos en las urgencias del hospital, según ha detallado el sindicato.
Desde la Junta insisten en condenar "cualquier tipo de agresión" y afirman que "bajo ningún concepto o circunstancia pueden justificarse". Destaca igualmente el Gobierno andaluz que Andalucía está implementado nuevas medidas de seguridad en los centros sanitarios públicos.
Entre ellas, la instalación de más de 4.400 cámaras de seguridad; dispositivos de avisos en consultas (más de 35.000) y alarmas individuales (más de 75.000); una de las últimas medidas puesta en marcha y que está dando "buenos resultados".
Junto a ello, la Junta trabaja en un decreto para la creación de un Observatorio de Agresiones a los Profesionales del Sistema Sanitario Público de Andalucía. La Consejería de Salud está redactando un régimen sancionador que se incluirá en la próxima Ley de Salud en consonancia con la condición de autoridad pública del personal sanitario.