La asamblea de trabajadores de remontes tumbó en la noche de este miércoles las dos jornadas de huelga en la estación de esquí de Sierra Nevada anunciadas por CCOO, -que preside el comité de empresa-, para este viernes, 26 de marzo, y el próximo día 3 de abril, como medida de presión para que la dirección de Cetursa retirara el Expediente de Regulación Temporal de Empleo (Erte), previsto como medida del Gobierno para mitigar los efectos de las empresas en crisis debido a la pandemia.

A pesar de que los paros fueron aprobados inicialmente en una asamblea celebrada el pasado 9 de marzo, en la definitiva de anoche, según asistentes a la reunión, las tesis de la presidencia del comité de empresa fueron duramente discutidas, como así reflejó la votación final

En la asamblea, los trabajadores de remontes rechazaron ampliamente la convocatoria de paros, en la víspera de que la representación laboral y la dirección de la empresa pública que gestiona la estación se citarán en el Servicio Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales (Sercla). No obstante, pondrán sobre la mesa otras fechas para retomar las movilizaciones.

A pesar de que los paros fueron aprobados inicialmente en una asamblea celebrada el pasado 9 de marzo, en la definitiva de anoche, según asistentes a la reunión, las tesis de la presidencia del comité de empresa fueron duramente discutidas, como así reflejó la votación final.

Es la primera vez que los propios trabajadores de Cetursa desconvocan una huelga sin conseguir mejoras, una práctica habitual que se impuso durante los sucesivos gobiernos socialistas en la Junta de Andalucía.

El presidente del comité de empresa de Cetursa Remontes, Miguel Ángel Vargas (CCOO), señalé esta mañana en declaraciones a Europa Press que suspendieron la huelga como "acto de responsabilidad" al ser una fecha en la que se espera un cierto remonte de la actividad tras una temporada dura por la pandemia.

La convocatoria de las dos jornadas de huelga fue duramente criticada tanto desde Cetursa como por los empresarios que operan en la estación, al coincidir con la Semana Santa, que es cuando se esperaba un cierto remonte de la actividad tras una temporada extremadamente dura por la crisis originada pandemia, que obligó a reducir los aforos e impidió la llegada de potenciales usuarios por las restricciones de movilidad.

Actualmente, más del 95 por ciento de los trabajadores del convenio de remontes estaban desafectados del Erte, total o parcialmente

Desde Cetursa, como así lo había afirmado en sede parlamentaria Juan Bravo, consejero de Hacienda y Financiación Europea, departamento de la Administración andaluza accionista mayoritario, incidió en estos días en que se había dejado de facturar unos 40 millones de euros por los efectos de la Covid-19, que provocaron el cierre prematuro de la temporada anterior y la caída de afluencia en la actual entre el 65 y 70 por ciento por las restricciones.

El comité de huelga propuso el pasado lunes la desafectación del expediente de regulación temporal de empleo para toda la plantilla de los remontes hasta la finalización de la Semana Santa como medida para lograr un acercamiento. No obstante, Cetursa se mantuvo firme y lo descartó, informando de que el ERTE permanecerá activo hasta el 31 de mayo, alegando que, dadas las actuales circunstancias, se trata "del mejor instrumento" para proteger los derechos de los trabajadores y para la viabilidad de la empresa.

Además, la empresa aportó que, actualmente, más del 95 por ciento de los trabajadores del convenio de remontes estaban desafectados del Erte, total o parcialmente.

Desde la estación de esquí defendieron que la Semana Santa será "la última fecha en que decenas de empresas y miles de trabajadores pueden tener una razonable actividad económica, que no han podido tener durante casi toda la temporada", y lo resumían como que era “el mejor momento de la peor temporada”, al tiempo que sostenían que “nadie en Sierra Nevada entendía una convocatoria de huelga y menos en estas circunstancias".

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