En la actualidad solo es accesible el 13% del conjunto del museo, formado por la Casa de Castril y la Casa de La Torre

Cultura encarga la instalación del ascensor para hacer accesible el Museo Arqueológico de Granada

Cultura - M.A. - Jueves, 4 de Septiembre de 2025
Se utilizará el hueco de la escalera que une el pabellón norte del museo con la Casa de Castril.
Hueco de la escalera donde se va a intervenir.
Proyecto de ejecución
Hueco de la escalera donde se va a intervenir.

La Delegación Territorial de Turismo, Cultura y Deporte ha encargado la instalación del ascensor que hará más accesible el Museo Arqueológico de Granada. Con su puesta en funcionamiento se hará accesible la primera planta de la Casa de Casstril, uno de los dos inmuebles históricos que forman el conjunto, además de la Casa de la Torre. La intervención se hará "sin estridencias" 

"La actual sede del Museo Arqueológico y Etnológico no permite la plena utilización de los espacios por problemas de accesibilidad. Solamente es accesible el 13% del conjunto de edificios, el resto es un intrincado panorama de peldaños sueltos y escaleras que no cumplen la normativa actual para el uso de Concurrencia pública. Es necesario, por tanto, mejorar el acceso a todos los usuarios, tanto visitantes como personal del museo, a todos los espacios para dar cumplimiento a la normativa de accesibilidad. Hasta que no se realice una intervención de mayor calado que permita la accesibilidad universal, se plantea la instalación de este ascensor como una mejora sustancial a la disponibilidad del museo, ya que permitirá la utilización de todas las salas de la Casa de Castril como espacios expositivos, ampliando en gran medida la superficie actual destina a ello", explica el proyecto de ejecución que sale a licitación con un presupuesto base de 59.000 euros -IVA incluido-.  

La instalación del ascensor, que fue avalada por la Comisión Provincial de Patrimonio Histórico el pasado enero, se plantea en la escalera que une el pabellón norte y la propia Casa de Castril, "respetando la construcción existente, ya que se propone utilizar el hueco central de la propia escalera para desarrollar el cuerpo del ascensor que contará con desembarcos en todas las alturas de la misma

La instalación del ascensor, que fue avalada por la Comisión Provincial de Patrimonio Histórico el pasado enero, se plantea en la escalera que une el pabellón norte y la propia Casa de Castril, "respetando la construcción existente, ya que se propone utilizar el hueco central de la propia escalera para desarrollar el cuerpo del ascensor que contará con desembarcos en todas las alturas de la misma. Las dimensiones del hueco y la gran altura del espacio, rematado por una armadura de madera de lazo ochavada, permiten la instalación completa del ascensor sin necesidad de demoliciones". 

La propuesta se localiza únicamente en la escalera que articula la comunicación entre las plantas de la Casa de Castril y el cuerpo añadido a esta en el jardín trasero a principios del siglo XX, explica el proyecto, que resalta que se trata de "una intervención muy conservadora", ya que se pretende instalar un ascensor, aprovechando el hueco central de la escalera, "para dotar de accesibilidad las plantas altas del inmueble y aumentar así el espacio dedicado a la visita pública".

En 1917 el ayuntamiento compra la Casa de Castril a los herederos del arabista Leopoldo Eguilaz y Yanguas, tras unas negociaciones que duraron un año, para instalar los museos Arqueológico y de Bellas Artes. Para llevar a cabo esta empresa, se encarga al arquitecto Fernando Wilhelmi Manzano una profunda reforma estructural que adecúe los espacios a las nuevas necesidades. Las obras se sucedieron entre los años 1917 y 1941 y se realizaron respetando los elementos constructivos más destacados, como la escalera del zaguán, las galerías del patio o algunas armaduras de madera del techo de las salas. El inmueble se completó en esta serie de intervenciones con otro núcleo construido por su parte trasera que se compone de jardín, galería porticada y un pequeño edificio, denominado pabellón norte.

La escalera que une este pabellón norte con la Casa de Castril es la que albergará, dado el hueco central de grandes dimensiones, un ascensor exento La escalera se reformó en 1970, bajo proyecto de Francisco Prieto Moreno y en 1981, el arquitecto Joaquín Prieto-Moreno Ramírez realiza una nueva intervención, de menor calado, consistente en la “pavimentación de salas, escalera y patio jardín”, balaustrada de madera en la escalera, restauración de carpinterías de madera, picado de paramentos y enfoscado “por encontrarse en malas condiciones por efectos de las humedades”. Por tanto, el espacio a intervenir, se construyó a principios del siglo XX y ha sufrido transformaciones a lo largo del mismo hasta llegar hasta nuestros días con la configuración actual.

El trazado de la escalera data de 1970 y la balaustrada de madera de 1981, con proyectos de Francisco Prieto Moreno y Joaquín Prieto-Moreno Ramírez, respectivamente. 

Granada. Casa de Castril. Planta baja. 1917-febrero. Fuente: archivo de la Alhambra y el Generalife 

Planta baja. Proyecto de obras de consolidación y restauración en la Casa de Castril, Museo 
Arqueológico Provincial de Granada. Plano del proyecto de 1981. Fuente: archivo del IPCE. 

Como se recuerda en la documentación del expediente de licitación, el Museo Arqueológico y Etnológico de Granada está formado por la unión de la Casa de Castril y la Casa de Latorre. La Casa de Castril es "uno de los mejores ejemplos de arquitectura civil renacentista de Granada"

Como se recuerda en la documentación del expediente de licitación, el Museo Arqueológico y Etnológico de Granada está formado por la unión de la Casa de Castril y la Casa de Latorre. La Casa de Castril es "uno de los mejores ejemplos de arquitectura civil renacentista de Granada". La construcción del inmueble abarcaría desde los primeros años del siglo XVI hasta 1539. La fachada cuenta con un programa iconográfico reseñable que aúna símbolos mitológicos, cristianos, valores y consignas propias del clasicismo renacentista español. Se trata de un edificio organizado alrededor de un gran patio con columnas y jardín posterior. Es una casa señorial formada por un zaguán de entrada con escalera gótica y ventanales de clara tradición renacentista desde el que se accede al patio central porticado en el cual se disponen dos plantas. La escalera principal de subida a primera planta, de grandes dimensiones, está cubierta con artesonado mudéjar. El conjunto presenta también armaduras y alfarjes mudéjares en salas y galerías porticadas, detalla el proyecto.

Destacan por su "singularidad" la portada principal de estilo plateresco, así como su escalera y balcón del zaguán.

La segunda casa, denominada de Latorre por el famoso pintor, restaurador, profesor y anticuario granadino que vivió en ella entre finales del siglo XIX y principios del siglo XX, está separada de la anterior por un antiguo adarve hoy ocupado por la propia edificación. Construida en el siglo XVII, destaca su portada barroca y su patio de columnas toscanas.

La organización es similar a la de la Casa de Castril, con otro jardín posterior en este caso incorporado a la propiedad en los últimos años del siglo XIX, patio con columnas toscanas en tres de sus lados y galerías superiores con pies derechos y balaustrada de madera. Tiene la entrada por un pequeño compás cerrado con verja de hierro y que comparte con la casa adyacente. Este compás es la huella de una calle amortizada entre ambas casas. El cierre parcial del mismo se produciría a finales del siglo XIX, cuando la Casa Latorre lo incorporó a su superficie y se apropió de la parcela posterior como jardín. 

A principios del siglo XX, se cierra con una reja el compás delantero, anulando por completo el antiguo adarve, y se desplaza la puerta de acceso al segundo vano.

El estado general de conservación es "aceptable", aunque se observan "algunas patologías generadas, en su mayoría, por la humedad". 

El Museo cuenta con una superficie accesible inferior al 20% de la superficie útil total disponible. La explicación a este hecho radica en los condicionantes físicos del enclave, con una parcela que presenta un desnivel longitudinal de más de 7 metros y dos edificios con funcionamiento conjunto y nivel de protección patrimonial alto"

En la actualidad, la parte visitable por el público general se sitúa en la Casa de Castril, mientras que la Casa de Latorre alberga los usos de servicio, personal e investigación. "El Museo cuenta con una superficie accesible inferior al 20% de la superficie útil total disponible. La explicación a este hecho radica en los condicionantes físicos del enclave, con una parcela que presenta un desnivel longitudinal de más de 7 metros y dos edificios con funcionamiento conjunto y nivel de protección patrimonial alto", recuerda la Junta en el expediente, en el que señala también que "la última intervención, que se centró fundamentalmente en la renovación de algunas instalaciones y puesta en servicio de una nueva museografía, logró que la totalidad de los espacios visitables con contenido de exposición fueran accesibles, a falta del mirador (con vistas a la Alhambra) situado en la galería de planta primera del patio principal de la Casa de Castril".

Se refiere a la actuación desarrollada entre 2016 y 2018 por el arquitecto Francisco Reina, que consistió en la reforma del zaguán que pasó a ser área de acogida, y la planta baja de la conocida como Casa de Castril, con el fin de "dotar de accesibilidad estos espacios, reformar las instalaciones y renovar la exposición permanente presentando una selección de las piezas más singulares". Se instaló un ascensor accesible que comunica es espacio destinado a taquilla y recepción de visitantes y la sala 1 de la exposición. Quedó pendiente la accesibilidad universal. Lo que se propone ahora la instalación de un ascensor que resuelve el acceso a las plantas superiores de la Casa de Castril. .

Esa intervención se hizo tras una gran movilización ciudadana en protesta por que el museo permanecía cerrado a la espera de mejoras inaplazables. Entonces, la gran reforma del Museo Arqueológico de Granada, para que pueda utilizar todo su potencial, quedó pendiente. 

Si te ha interesado esta noticia, no dejes de leer el reportaje de Gabriel Pozo Felguera al cumplirse, en 2017, el centenario del museo: