“50 miradas a una Dama” es la exposición definitiva que, con motivo del medio siglo del descubrimiento de la Dama de Baza, supone la estrella de las actividades organizadas para conmemorar la efeméride.

La exposición ya está abierta al público en el centro cultural Santo Domingo, donde permanecerá abierta en el horario habitual de este espacio hasta el próximo mes de diciembre

La exposición ya está abierta al público en el centro cultural Santo Domingo, donde permanecerá abierta en el horario habitual de este espacio hasta el próximo mes de diciembre.

“Estamos ante la muestra definitiva, basada en el conocimiento científico más avanzado, para entender a la Dama de Baza y al contexto histórico en el que fue creada. No hay, ni habrá por ahora, ningún otro escenario cultural para saber más sobre ella. Imposible perdérsela”, señala el Ayuntamiento de Baza.

Una vez concluida su exhibición en Baza, la exposición recorrerá varios municipios de la provincia y en Granada será en el Palacio de Condes de Gabia, sede de Cultura de la Diputación de Granada.

“50 miradas a una Dama” pretender ser, sobre todo, una exposición didáctica. Sus responsables quieren que, cuando salgamos de ella, sepamos más y mejor cuáles son los elementos que conforman la figura de la Dama, cómo se hicieron, quiénes estuvieron detrás de sus detalles, de su ropa, de sus joyas, de sus botines, cómo se hicieron las telas que la visten, por qué son de ese color y no de otro, en definitiva, muchas miradas, muchos puntos de vista, sobre una misma escultura. Pocos detalles nos quedarán por conocer de nuestra Dama de Baza.

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Llama la atención en el espacio que acoge a la exposición las lonas de esparto que rodean los paneles, con las que se pretende introducir al visitante en la época en la que nació la protagonista del evento. A lo largo de varios paneles se explican cuestiones relacionadas con el descubrimiento de la Dama, en julio de 1971, con el tratamiento que le dieron los medios de comunicación al hallazgo, se habla de la promoción turística y cultural que ha supuesto para este entorno geográfico, etc. La exposición cuenta también con cuatro grandes plasmas donde se pueden contemplar otros contenidos alusivos.

Más allá de estos elementos informativos, “50 miradas a una Dama” nos ofrece tres reclamos muy interesantes. Se trata de tres réplicas que complementan a la perfección el sentido y el objetivo de la exposición. La más llamativa es una reproducción a tamaño natural de la Dama de Baza, pero humanizada. Los estudios científicos han llegado a la conclusión de que la escultura que todos conocemos podría ser una réplica en piedra de algo real, incluso de alguna persona real que sirviera de modelo…

La más llamativa es una reproducción a tamaño natural de la Dama de Baza, pero humanizada. Los estudios científicos han llegado a la conclusión de que la escultura que todos conocemos podría ser una réplica en piedra de algo real, incluso de alguna persona real que sirviera de modelo

Pues bien, esta exposición nos ofrece esa modelo. Para ello se ha construido una forma humana en plástico sobre la que se han colocado todos los elementos que lleva encima la Dama. Se ha maquillado con los mismos colores y con las mismas sustancias, se ha vestido con las mismas telas que se han tintado con los mismos colores que utilizaron los íberos, se le han colocado las mismas joyas que lleva la Dama, creadas a propósito en el mismo material, se le han colocado incluso los anillos en sus dedos se han confeccionado los botines que debió llevar la modelo que sirvió para hacer la escultura, se ha hecho en madera el trono, e incluso se ha trabajado en piedra la base. Hasta el cojín donde posa sus pies se ha hecho a medida y con la misma tela que debió tener el de hace veinticuatro siglos. La apariencia de esta Dama de Baza no es la que todos tenemos en la memoria, es la original, la que sirvió de base para los escultores que la reprodujeron en piedra, porque, según los últimos estudios, fueron dos personas la que trabajaron en ella.

Junto a esta réplica, que es el punto central de la exposición, se podrán contemplar otras dos. Por un lado, se han reproducido las piezas que conforman el ajuar que la acompañaba en la tumba 155 del Cerro Santuario: vasijas, ánforas, urnas, tapaderas, que podremos ver por primera vez con sus dibujos y en sus colores originales, como fueron creadas. Y, por otro lado, podremos ver y tocar la reproducción de un telar íbero con el que, incluso, se podría tejer. Es tal su precisión, sus detalles y su veracidad histórica que, a diferencia de los que existen en otros lugares del mundo, en este se podría empezar a trabajar en cualquier momento, por ejemplo, en la confección de las telas que porta la Dama de Baza.

“50 miradas a una Dama” es un buen ejemplo de colaboración institucional. Esta exposición ha sido posible gracias al patrocinio y la colaboración del Ayuntamiento de Baza y de la Diputación de Granada. El consistorio se ha hecho cargo de la exposición en sí, con un presupuesto cercano a los 70.000 euros, y la institución provincial ha corrido con la preparación de las réplicas y del material audiovisual que explica su construcción y confección. El contrato para la realización de la reproducción de la Dama fue adjudicado a Jorge Ruiz Ampuero; en total, la Diputación ha invertido en la exposición cerca de 102.000 euros. A partir de esta colaboración institucional se sumaron al proyecto un notable conjunto de instituciones universitarias, museísticas y empresas privadas que se han unido a esta exposición.

Una vez que la exposición haya sido vista en Baza durante el periodo previsto es muy posible que comience a viajar por todo el país

En uno de los paneles que ofrece esta exposición se habla también de futuro. Aseguran sus organizadores que “el renovado conocimiento que se tiene hoy del Cerro Santuario ha puesto en evidencia que esta necrópolis dista mucho de estar agotada. Se han abierto renovadas líneas de investigación que dibujan un futuro ilusionante. Pero, para que ello sea realidad y útil al desarrollo económico de la comarca de Baza, es imprescindible acometer una cubierta de protección de toda la necrópolis de Cerro Santuario”. “Se trata, pues, de un yacimiento arqueológico fundamental para el conocimiento del poblamiento íbero de la Bastetania y un factor, sin duda, capaz de favorecer el desarrollo económico y social de la comarca, si las instituciones responsables apuestan por ello”.

Una vez que la exposición haya sido vista en Baza durante el periodo previsto es muy posible que comience a viajar por todo el país. Para ello habrá que elaborar un dosier y ofrecerla a los museos y espacios culturales que se extienden por España e incluso por el mundo. Cuando se conozcan las peticiones se compondrá una programación que deberá concluir con su regreso a Baza, donde establecerá su ubicación definitiva. Así mismo, posiblemente para diciembre, para abundar aún más en su proceso creativo y en sus referentes docentes, las universidades Autónoma de Madrid y de Granada publicarán un libro sobre esta exposición que servirá para su “legitimar” su contenido científico.