Mónica Blasco nos cuenta de entrada qué es la asociación Ángeles Azul y Verde, de la que es vicepresidenta y nos dice que “es una asociación que nació como de casualidad, un compañero que empezó a preocuparse por la salud mental de sus otros compañeros y se le fueron uniendo más gente, hasta que empezó en 2015 y ya en 2018, nos constituimos como una asociación legal y nos profesionalizamos, como asociación formada por, sobre todo, policías, guardias civiles, aunque tenemos a un psicólogo externo, como Jennifer Prata, que es un valor importante en nuestra asociación y atendemos a compañeros. A parte hacemos una labor divulgativa que creo que es muy necesaria en las fuerzas y cuerpos de seguridad en general y sobre todo pues eso asistimos a los compañeros que nos demandan ayuda pues haciendo una escucha activa, un acompañamiento, una recopilación de recursos para que sepan dónde pueden acudir porque muchas veces simplemente nos demandan información porque no saben dónde pueden acudir y luego también una labor divulgativa a través de redes sociales, además de las actividades formativas que hacemos y luego nuestros voluntarios que también hacen una labor divulgativa muy importante en cada uno de sus puestos o comisarias”.

“La verdad, no solo el suicidio, también el bienestar emocional en general, porque a veces nos centramos solo en las personas que acaban falleciendo y detrás de todo eso hay mucho dolor emocional, hay mucho sufrimiento”

Y dentro de su trabajo, el suicidio es una de sus grandes preocupaciones: “La verdad, no solo el suicidio, también el bienestar emocional en general, porque a veces nos centramos solo en las personas que acaban falleciendo y detrás de todo eso hay mucho dolor emocional, hay mucho sufrimiento”.

Y sigue diciendo: “Nosotros estamos muy enfocados en el alivio del dolor emocional que pueden tener los miembros de las fuerzas y cuerpos de seguridad y evidentemente eso repercute en la prevención de suicidio. Si no sabemos aliviar ese sufrimiento no vamos a poder prevenir el suicidio, si no sabemos cómo enfocar todo ese bienestar emocional, es difícil que también nos enfoquemos en el suicidio. Evidentemente el suicidio es algo que nos preocupa muchísimo, no solo los fallecimientos sino todos los intentos, todo lo que hay detrás de esos fallecimientos, lo que pasa cuando ha fallecido una persona ya que su entorno, familiar, laboral, de amistades sufren muchísimo y nosotros también atendemos no solo a los compañeros sino a los familiares y amigos de las personas que han fallecido por suicidio. Nos preocupa muchísimo el suicidio y el bienestar emocional de los policías”.

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Distintos momentos de la interesante charla de Mónica Blasco con Joan Carles March,

Y añade: “Si en la sociedad en general encontramos un estigma muy importante a hablar de la salud mental y del suicidi,o específicamente, nos podemos imaginar dentro de las fuerzas de seguridad que llevamos un arma"

Y añade: “Si en la sociedad en general encontramos un estigma muy importante a hablar de la salud mental y del suicidi,o específicamente, nos podemos imaginar dentro de las fuerzas de seguridad que llevamos un arma. Llevamos un arma y eso hace también que se nos juzgue de una forma mucho más estricta porque si pensamos que una persona que va a atender otras personas en riesgo o que tiene que portar un arma y que tiene pues unas intervenciones que son muy delicadas, tienen problemas de salud mental, se les juzga de una forma mucho más dura que al resto. Y ese estigma que nos creamos nosotros mismos, que se nos ha creado desde siempre, desde que entras por la academia, que tienes que ser duro, porque tienes una profesión muy especial, porque esta profesión no es para cualquiera, te hacen mucha referencia en general. No digo sólo la administración o la organización, sino todos los compañeros, los jefes en general. Hay un estigma que nos vamos metiendo unos a otros dentro de los grupos policiales y luego encima tenemos el estigma también de la sociedad, que la sociedad demanda evidentemente una policía con una salud mental buena, porque luego les va a atender a ellos en momentos en los que están pasando por situaciones muy delicadas”.

"Creo que nosotros tenemos un doble estigma, el que nos metemos nosotros y el que tiene la sociedad hacia nosotros también. Eso hace que se hable muchísimo menos de salud mental, que se hable muchísimo menos de suicidio, que cuando uno tiene un problema, el último sitio al que va es a sus propios compañeros o a la propia organización o a sus superiores"

Y sigue diciendo: “Entonces, yo creo que nosotros tenemos un doble estigma, el que nos metemos nosotros y el que tiene la sociedad hacia nosotros también. Eso hace que se hable muchísimo menos de salud mental, que se hable muchísimo menos de suicidio, que cuando uno tiene un problema, el último sitio al que va es a sus propios compañeros o a la propia organización o a sus superiores. Y, claro, muchas veces tampoco quieres ir a la familia o a los amigos, porque piensas que estás creando un sufrimiento que no se merece, que no tienen por qué soportar lo que a uno le pasa, porque la profesión la has elegido tú”.

Y hablamos de que a Mónica n0 le gusta hablar de cifras, comentamos el entorno laboral por las características especiales que tiene la profesión, de lo complicado que es encontrar superiores que sepan entender la problemática, del papel de la asociación y del trabajo hecho de forma voluntaria, de ayuda de compañeros que estén concienciados y que sepan sobre bienestar, de una asociación completamente independiente, de que muchas veces son guardia civiles los que piden que les atiendan guardia civiles y policías que piden que les atiendan policías porque puedan entender más su situación.

 “Nosotros no hacemos terapia a los policías o a los guardias civiles, nosotros los atendemos como compañeros, pero sí que nuestro protocolo marca que, primero, los atienden el psicólogo. Ese psicólogo habla con esa persona y va averiguando un poquito, pues si la situación es más grave, menos grave, o cómo hay que abordarla. Y más tarde ya, normalmente, se pasa a un grupo"

Y cuenta también como trabajan: “Nosotros no hacemos terapia a los policías o a los guardias civiles, nosotros los atendemos como compañeros, pero sí que nuestro protocolo marca que, primero, los atienden el psicólogo. Ese psicólogo habla con esa persona y va averiguando un poquito, pues si la situación es más grave, menos grave, o cómo hay que abordarla. Y más tarde ya, normalmente, se pasa a un grupo. Normalmente hacemos grupos de WhatsApp en los que está la persona que demanda ayuda, siempre un psicólogo y varias personas con necesidades, junto a otras que pueden ayudar. Y normalmente quien lleva la atención o quien lleva el centro de esa atención es una persona del ámbito profesional”.

Y añade: “Quien nos demanda ayuda, ya tiene un pasito hecho. Y normalmente, como nuestros voluntarios, casi todos están formados y muchos de ellos han pasado por situaciones también delicadas, se sienten muy comprendidos. La gente que nos pide atención o ayuda, se suelen sentir muy comprendidos por nuestros voluntarios. Y de alguna forma, en toda esta historia hay falta de red de apoyo, no solo social de su entorno, sino también familiar”.

Mónica sigue contándonos: “Nadie quiere sentirse débil, no quiere ser una carga para sus familiares o las personas queridas, porque cuando tú hablas de si yo le hablo a mi madre de algo que me preocupa y que me hace sufrir mucho, seguramente, le traslade una parte de ese sufrimiento a mi madre y si no quiero trasladárselo, y me lo callo, me lo guardo para mí o lo hablo con las personas que sé que sí que puedo porque no les voy a trasladar ese sufrimiento”.

Y a mi pregunta ¿de alguna forma influye también el hecho de llevar arma?: Mónica contesta: “Claro, es un método letal y cuando una persona tiene ideación suicida, tiene problemas emocionales, todos los estudios dicen que hay que alejarlos de los métodos letales, nosotros tenemos un método letal accesible 24 horas al día, entonces es evidentemente claro que afecta”

Y a mi pregunta ¿de alguna forma influye también el hecho de llevar arma?: Mónica contesta: “Claro, es un método letal y cuando una persona tiene ideación suicida, tiene problemas emocionales, todos los estudios dicen que hay que alejarlos de los métodos letales, nosotros tenemos un método letal accesible 24 horas al día, entonces es evidentemente claro que afecta”. Y añade: “Todos los estudios dicen que lo que hay que hacer cuando una persona tiene problemas de salud mental, es retirar esos métodos letales, entonces hay que retirar el arma, pero como a la vez hay un estigma, un tabú tan importante en los policías y guardia civiles de que cuando se les retira el arma, parece que es que seamos menos policías o menos guardia civiles,…. Eso es un trabajo que hay que hacer ahí importante entre compañeros y la administración”.

Y añade: “De alguna forma, el contacto permanente de la Policía y de la Guardia Civil con situaciones de violencia, de crímenes, de agresiones sexuales, de violaciones, de abusos sexuales, de malos tratos, de tráfico de drogas, eso influye en toda esa historia, es decir, el hecho de tocar tan de cerca la violencia de alguna forma te llega a dañar y eso realmente genera esas situaciones de malestar”.

“Necesitamos que haya más formación para que cuando un compañero tiene un problema y otros se enteran, sepan actuar de una forma adecuada, pero sobre todo que los superiores sepan también actuar de la forma adecuada"

Así seguimos hablando del estigma, de la jerarquía en la policía y la guardia civil, de la rigidez, de las casas cuartel, de la distancia que viven mucha gente de su familia,….

Termina con una petición: “Necesitamos que haya más formación para que cuando un compañero tiene un problema y otros se enteran, sepan actuar de una forma adecuada, pero sobre todo que los superiores sepan también actuar de la forma adecuada, que sepan gestionar grupos. Eso ayudaría a la solución”.

Para esuchar este magnífico podcast, pincha a continuación:

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