La Policía Nacional de la Comisaría de Motril ha detenido a 34 personas, la mayoría de nacionalidad española, varios magrebíes y dos de países del este de Europa, integrantes de un grupo organizado dedicado supuestamente a la introducción y posterior distribución y venta de droga en territorio nacional, desarticulando, de este modo, la organización.

El grupo, liderado por un clan familiar residente en la zona sur de la provincia de Granada, contaba con un nutrido grupo de colaboradores en las localidades de Salobreña y otras aledañas como Almuñécar, Molvízar, Lobres e incluso Motril, a través de los cuales concertaba la adquisición de diferentes cantidades de droga, las almacenaba y posteriormente las entregaba a otros individuos de la trama que se encargaban de su transporte y almacenamiento para su posterior distribución a otros países, en particular al Reino Unido.

La operación, conducida por el grupo de estupefacientes de la Comisaría de Motril, comenzó a gestarse cuando las gestiones policiales revelaron las actividades ilícitas desarrolladas por varias personas de la zona que podrían estar interrelacionadas y pertenecer a una misma organización y, a partir de ahí, los investigadores pudieron ir determinando la estructura, organigrama y actividades ilícitas del grupo, así como conocer las funciones que cada uno de los miembros realizaban.

Una vez reunidos indicios suficientes, los investigadores procedieron a establecer diferentes dispositivos debido a la complejidad de la investigación de la trama y las dificultades añadidas en cuanto a la localización de los miembros de la organización.

El primer dispositivo se estableció a finales de junio, siendo detenidas dos personas, a las que se les intervinieron diversas cantidades de droga, dinero y efectos relacionados y, unos días después y en el mismo mes de junio, fueron detenidos en relación a los mismos hechos otras cuatro personas.

En julio se estableció otro dispositivo que concluyó con la detención de otras nueve personas a las que también se les intervinieron drogas de distinta clase, dinero, vehículos y efectos y, en sucesivas fases, todas ellas desarrolladas en el mes de agosto, se logró detener a los demás miembros de la organización, deteniendo hasta 19 personas en esta última fase de la operación, sumando un total de 34 detenidos.

En el total de las intervenciones, los agentes policiales se incautaron de más de 400 gramos de cocaína, cinco kilogramos de marihuana, más de 300 plantas de cannabis sativa y diversas cantidades de hachís, MDMA y otras drogas y, asimismo, intervinieron seis vehículos de alta gama, móviles, GPS y 10.700 euros en metálico.

Los detenidos fueron puestos a disposición de la autoridad judicial, que ordenó el ingreso en prisión de siete de ellos, entre los que se encontraban los dos cabecillas de la trama.