Cerca de cuarenta entidades sociales reclaman al Ayuntamiento de Granada un esfuerzo "para que nadie quede atrás"
Casi cuarenta entidades sociales que desempeñan su labor en distintos ámbitos sociosanitarios han firmado una carta dirigida al alcalde de Granada, Luis Salvador, en la que piden al Ayuntamiento de Granada que "redoble sus esfuerzos" y pona en marcha un plan de emergencia "para que nadie quede atrás" en esta grave crisis provocada por la pandemia del coronavirus Covid-19.
"El Ayuntamiento, como administración pública más cercana, es quien tiene el deber y la principal responsabilidad de atender y cuidar de aquellos ciudadanos que no tengan sus necesidades básicas cubiertas", exponen en la misiva, en la que llaman la atención sobre aquellas familias, colectivos y personas que no pueden acogerse a las ayudas impulsadas por el Gobierno central y otras administraciones. Necesitan protección y estos colectivos reclaman al Consistorio que lidere la respuesta.
Las entidades echan en falta medidas adicionales, como teléfonos de información que sean gratuitos, y proponen iniciativas como valorar la posibilidad de mantener abiertos algunos centros de servicios sociales.
Esta es la carta enviada al Ayuntamiento:
"Para todos nosotros/as la situación que estamos viviendo producida por la pandemia de coronavirus es especial y grave, una crisis que nos golpea a todos/as. Es en estos momentos cuando la solidaridad se hace más necesaria. Estamos asistiendo a una oleada de generosidad y fraternidad por parte de muchas personas que se expresa de diferentes formas y niveles. Pero la solidaridad principal debe ser la que proporcione el estado a través de las diferentes administraciones y según sus niveles de competencia, a él le corresponde la máxima responsabilidad en velar por el bienestar de todas las personas que residen en su territorio.
Reconocemos el esfuerzo que se está haciendo desde el Gobierno central y otras administraciones para “no dejar a nadie atrás” con las medidas económicas, sociales y laborales que se están tomando y que tienen como objetivo disponer de mecanismos de protección social para amplias capas de la población. Vemos también con satisfacción que cada vez más se esté ampliando el círculo de protección para llegar a más gente, como ha ocurrido con el subsidio extraordinario para las trabajadoras de hogar y cuidados o la moratoria para el alquiler.
La crisis del coronavirus y sus consecuencias afectan al conjunto de la sociedad pero no de la misma manera a todas las personas. La desigualdad, la pobreza y la exclusión social hacen que los efectos sean diferentes.
No hay persona que no se sienta perjudicada en mayor o menor medida por el estado de alarma, y no queremos olvidarnos de nadie, pero es necesario prestar también atención a aquellos grupos que quedan fuera de las medidas de apoyo del gobierno, porque están indocumentadas o porque trabajan en la economía informal o sumergida, hablamos de las personas migrantes en situación irregular, de las trabajadoras de hogar y cuidados que han sido empleadas sin contrato, mujeres que ejercen la prostitución, personas sin hogar…
Muchas de estas personas eran atendidas por las ONGs y los servicios sociales comunitarios, y ahora no pueden serlo o se hace de manera insuficiente. Otras, no pueden seguir con el trabajo que les permitía vivir. No pueden ejercer sus derechos laborales ni ciudadanos y con el estado de alarma que vivimos, el riesgo de exclusión social y la vulneración de derechos se agravan.
Corresponde al ayuntamiento, como administración más cercana, brindarles apoyo. Es el último recurso al que pueden acudir.
Las organizaciones abajo firmantes pedimos al Ayuntamiento de Granada y a su máximo representante, el Excmo. Sr. Alcalde D. Luis Salvador, que en el ámbito de sus competencias:
- Ponga en marcha un plan de emergencia social para atender a aquellos colectivos, familias y personas a las que las ayudas promovidas por el Gobierno central no llegan. Implementar un conjunto de medidas, de manera urgente, para atender desde las necesidades más perentoria (alimentos, productos de higiene…) a otras, como hacer frente a los gastos de luz, agua, alquiler…que palien las situaciones de marginación social.
- Poner al servicio de las personas más vulnerables una parte importante de los recursos económicos que desde la administración central y autonómica han librado para los ayuntamientos.
- A las necesidades relacionadas con el cuidado, la dependencia, la manutención, los recursos para las familias vulnerables... que ya se venían prestando, se suman nuevas carencias y privaciones. Los servicios sociales comunitarios adquieren en estos momentos una importancia extraordinaria. Y tienen que ser reforzados con más personal y recursos para atender esta emergencia social que requiere de respuestas urgentes. Igualmente es importante flexibilizar las trabas burocráticas y la brecha tecnológica para que no se conviertan en un impedimento para acceder a las medidas de protección. Esto se puede hacer porque el gobierno central ha permitido relajar la regla del gasto y poder aplazar el pago de las deudas para que los ayuntamientos dediquen más dinero a los servicios sociales.
- Seguramente el desconcierto, la falta de información y el no saber a donde dirigirse esté más o menos extendido. En este sentido echamos en falta algunos mecanismos adicionales que suplan estas deficiencias. Mayor dispositivo de teléfonos de información y que sean gratuitos, difusión de un banco de recursos adaptados al momento de alarma… por parte del ayuntamiento podría ayudar. Además, habría que valorar si en algunos casos conviene que se mantengan abiertos algunos centros de servicios sociales.
- Que el ayuntamiento lidere iniciativas para poner en marcha plataformas que pongan en comunicación a las entidades institucionales -servicios sociales de base, centros de salud o entidades locales- ONG y las iniciativas ciudadanas que están surgiendo en estos momentos. Aunque en algún barrio ya se está haciendo (zona norte), es necesario extenderlo al conjunto de la ciudad de manera prioritaria. Conseguir una mejor coordinación, distribución y planificación ayudaría a prestar mejor apoyo a las personas necesitadas y fortalecería las redes de solidaridad.
Somos conscientes que la respuesta al cúmulo de demandas no es fácil. Pero es necesario que la orientación prioritaria sea una política que no se olvide de nadie y también, que vaya acompañada de una gestión eficaz pues la diferencia entre una buena o mala gestión puede agravar o aliviar los problemas".
Asociaciones y entidades firmantes.
- Acciónenred Andalcucía
- Granada Acoge
- Asociación Pro Derechos Humanos
- Provivienda
- Asociación Entrelibros
- Almanjáyar en Familia (AlFa)
- La Volaera
- Existe+mundo
- Ágape
- Colectivo de Prostitutas de Sevilla
- Fundación Manolo Moreno por una Vivienda Digna
- Avam Asociación Venezolanos Amigos del Mundo
- Ojos del Sur
- Comunidades Cristianas Populares de Granada
- Diapó con África
- Médicos del Mundo
- Stop Desahucios Granada 15M (Asamblea Centro)
- Oxfam Intermón Granada
- Stop Deshaucios
- Mesa en Defensa de la Sanidad Pública de Granada
- Granada Visible
- Foro Andaluz por la Atención Primaria (foaap)
- Ajuntamientos Granada
- Colegio Oficial de Trabajo Social de Granada
- Plataforma Metropolitana de Granada por las pensiones públicas
- Asociación Andaluza de Barrios Ignorados de Granada.
- Fundación Lestonnac Montaigne
- Asociación Juvenil Amigos de Almanjáyar y Cartuja
- Centro Socio Cultural Zaidín
- Stop Represión Granada
- Asociación Fondo de Solidaridad Paz y Esperanza
- Asociación Ajuntamiento Centro-Sagrario
- Granada Abierta
- Asociación TIRAPALANTE La Chana
- Asociación PASOS Participación
- Asociación A.T.A.M.E.