La plantilla de la Escuela Andaluza de Salud Pública se movilizó este martes para exigir al Gobierno andaluz que no se extinga el organismo, como figura en el proyecto de Ley de creación del Instituto de Salud de Andalucía (ISA), que lo absorbe, así como el mantenimiento de los puestos de trabajo y salarios.

Respaldada por UGT y CCOO, la plantilla insistió en que el proyecto de Ley publicado por el Gobierno andaluz sigue hablando de la “extinción y disolución de la EASP”, lo que consideran “claramente una amenaza para la actividad futura de la EASP, para la plantilla, para los derechos adquiridos y para las condiciones de trabajo de los y las profesionales

A las puertas de la Escuela, trabajadoras y trabajadores se concentraron, en la segunda movilización, tras asistir con pancarta propia el pasado sábado en la gran manifestación en Granada contra e desmantelamiento de la sanidad pública andaluza.

Respaldada por UGT y CCOO, la plantilla insistió en que el proyecto de Ley publicado por el Gobierno andaluz sigue hablando de la “extinción y disolución de la EASP”, lo que consideran “claramente una amenaza para la actividad futura de la EASP, para la plantilla, para los derechos adquiridos y para las condiciones de trabajo de los y las profesionales.

La representación laboral de CCOO pide que conste por escrito, el “mantenimiento de la sede del ISA en Granada”; “la garantía de que no habrá movilidad geográfica ni funcional, el mantenimiento de los puestos de trabajo y salarios”, para lo cual tiene que aprobarse una Relación de Puestos de Trabajo, así como el “compromiso de puesta en marcha de la carrera profesional antes de 2025”.

Por su parte, la representación laboral de UGT afirmó que la Escuela “no está funcionando como debería, dada la actitud por parte de la dirección, que vulnera e incumple sistemáticamente la legislación vigente, el Convenio Colectivo, y que falta al respeto y a la consideración debida a este comité y a los trabajadores y trabajadoras” del organismo.

Denuncian desde UGT que las “prioridades establecidas por la dirección menosprecian los años de dedicación de toda la plantilla en los procesos de docencia, de investigación, de consultoría y de cooperación internacional en Salud Pública y Gestión Sanitaria y sostienen que “el proyecto de Ley reduce la capacidad profesional de los y las trabajadoras de la EASP”.

Por su parte, CCOO, independientemente de este proceso, ha manifestado su preocupación por la actual situación de la EASP, entre otros motivos, porque “no se cuenta con una dirección que garantice el funcionamiento cotidiano de organización”, “no se cumplen los derechos sindicales de información, participación, negociación, ni los requisitos básicos marcados por la legislación de riesgos laborales, igualdad y conciliación”, y “se incumple de manera continuada el convenio y los acuerdos con la representación de la plantilla. A modo de ejemplo, no hay carrera profesional y se ha judicializado el derecho a la conciliación y a la promoción interna”.