Izquierda Unida elevará al Parlamento de Andalucía una iniciativa por la "situación insostenible de cubrir con hormigón y césped plástico cada vez más espacios naturales en la ciudad de Granada y su área metropolitana". "Césped artificial altamente contaminante para la salud de la población y contrario a las recomendaciones de la comunidad científica granadina, asociaciones ambientalistas, UE y ONU", expone en una nota de prensa la formación.

"Nos preocupa que, con tal grado de información científica contrastada, la Junta de Andalucía siga apostando por gastar dinero público en esta práctica irracional", alerta Mari Carmen Pérez, coordinadora provincial de Izquierda Unida Granada.

Granada y su área metropolitana cuentan en la actualidad con más de 8 hectáreas cubiertas por césped plástico artificial (unas 180 toneladas) que tapizan el trayecto en la superficie por donde discurre el Metro, así como su proliferación en rotondas y medianas de los barrios de la ciudad, sustituyendo en muchos casos a espacios verdes antes cubiertos por plantas vivas, explica IU.

Es un hecho que el césped plástico cuando se degrada "contamina todos los ecosistemas y llega en forma de microplásticos finalmente al cuerpo humano, dañándolo". "Más irresponsable aún añadir centenares de sustancias químicas altamente tóxicas para aumentar su durabilidad, como es práctica habitual", agrega la formación que lamenta que, "a pesar de todas las advertencias, en la mayoría de los tramos de la nueva línea del Metro, por Armilla, Churriana y Las Gábias, el plástico verde es el material que se usará como recubrimiento".

Una ciudad como Granada en donde más ha aumentado en Andalucía la temperatura media en los últimos años y de las tres más contaminadas atmosféricamente del país, "no puede hacer oídos sordos a estas advertencias contrastadas del mundo de la ciencia, de los movimientos ecologistas y las asociaciones preocupadas por un entorno saludable". Un suelo de plástico que contribuye al efecto isla de calor, sobrepasando los 80 grados y con un alto grado de insalubridad, advierte IU.

"Si esto ya es de todas y todos conocido ¿qué mueve a la Junta de Andalucía a seguir utilizando este material perjudicando a la población que se verá afectada en su estado de salud por esta contaminación?", pregunta IU, que insiste en "las manifestaciones escritas que avalan el riesgo de seguir apostando por la utilización de este material, y solicitan a la Consejería de Medio Ambiente la paralización de dicho uso y revertirlo lo antes posible".