Agentes de la Policía Nacional han detenido en Motril, dentro del marco de la 'Operación Chopper', a un hombre de 38 años como presunto autor de un delito de tráfico de drogas. El hora detenido montó un sistema de reparto de estupefacientes “a domicilio” y “bajo demanda” sirviéndose para ello de una motocicleta como medio de transporte. El detenido ha sido puesto a disposición judicial.

La investigación comenzó el verano pasado cuando los agentes empezaron a trabajar con la hipótesis de que un traficante distribuía droga con un modus operandi particular, que consistía en recibir encargos concretos del tipo de sustancia y cantidad deseada y en establecer un punto de entrega diferente para cada ocasión. 

El presunto autor utilizaba para sus desplazamientos y transporte de las sustancias demandadas un vehículo tipo motocicleta. De esta forma, al no tratarse de un punto de venta fijo, se pretendía "obstaculizar" el descubrimiento del desarrollo de esta ilícita actividad, según destaca la Policía Nacional en una nota de prensa. 

En numerosas ocasiones las dosis entregadas fueron intervenidas a compradores en las inmediaciones de los lugares donde habían sido adquiridas, pudiendo constatar que el presunto autor no dudaba en vender su "producto"  incluso a menores de edad con el claro objetivo de "ampliar su clientela".

Gran variedad y cantidad de sustancias estupefacientes

En el registro de la vivienda del detenido se intervinieron casi 870 dosis de marihuana perfectamente preparadas para su consumo y dispuestas en bolsas transparentes con autocierre, arrojando un peso total cercano a los 1.500 gramos, así como otros 223 gramos de cogollos de la misma sustancia cannábica. Igualmente se aprehendieron más de 50 gramos de cocaína y más de 120 gramos de hachís en forma de tabletas. Durante el mencionado registro también fueron halladas drogas sintéticas, como son los 25 gramos de speed que, de la misma forma que las sustancias anteriormente descritas, fueron incautadas por los agentes.

Otros elementos intervenidos

Dos balanzas de precisión, dos cuchillos de cocina de distinto tamaño supuestamente utilizados para cortar las tabletas de hachís y aún con restos de dicha sustancia en sus hojas, junto con una cifra cercana a los 1.800 euros en metálico en billetes de 50, 20, 10 y 5 euros completan el total de los efectos intervenidos durante el registro.

El detenido ha sido puesto a disposición de la autoridad judicial.