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Opinión por Ramón Reyes Reyes, coordinador del área de Juventud y responsable de movimientos sociales de IU Granada

El camino a las municipales de 2019: ¿Qué es la confluencia y cuáles son las listas de candidaturas de unidad que necesitamos?

Política - Ramón Reyes Reyes - Jueves, 21 de Diciembre de 2017
Ramón Reyes Reyes, coordinador del área de Juventud y responsable de movimientos sociales de IU Granada, reflexiona en este artículo sobre la confluencia de la izquierda y cómo construirla.
M.R.

“Las masas obreras sienten la necesidad de la unidad de acción: de unidad para resistir el ataque del capitalismo, o de unidad para tomar la ofensiva en su contra. Todo Partido que se oponga mecánicamente a esta necesidad del proletariado de unidad en la acción, será condenado infaliblemente por los obreros”.

En Moscú en marzo de 1922 para el Pleno del Comité Ejecutivo de la Internacional Comunista a propósito del Frente Único.

En todos los espacios de la izquierda, en cualquier momento suena la palabra confluencia y automáticamente indagamos sobre la necesidad de esta, o la no necesidad. Sobre quiénes serán las personas que lideraran el proyecto, en qué puesto de la listas irán, qué partidos, etc...

¿Cuál es la confluencia que necesitamos? 

Partimos de la base que la confluencia no es un botón que apretamos y de golpe tenemos una lista unitaria y de izquierdas en todos los ayuntamientos, con un programa común, donde colaborativamente todos y todas aportemos exactamente lo mismo. Sería algo idílico sí, pero ajeno a la realidad con la que nos encontramos, con las peculiaridades propias de cada provincia o municipio, incluso barrio  o espacio de trabajo en común. 

Sería ilógico, incluso injusto, plantear la confluencia como un pacto entre dos partidos que se reparten los puestos en la lista en reuniones ajenas a las capas de los distintos activistas y militantes  que han estado presentes en todos los conflictos locales y provinciales. Es algo que tiene que ir mucho más lejos, incluso más allá de unas elecciones o un momento puntual. 

Antes de confluir en unas elecciones es necesario confluir en el terreno de la lucha social, desde la paralización de un desahucio hasta la lucha por una subrogación de los trabajadores de una subcontrata en cualquier ayuntamiento, exigiendo la municipalización de los servicios públicos, en todas las manifestaciones del lado de los sectores mas oprimidos de la sociedad. Y naturalmente es algo que debe continuar después de éstas, independientemente del resultado si gobierno u oposición, donde cada partido, organización y colectivo pueda expresar su criterio haciendo hincapié en  aquello que nos une.

Peculiaridades locales

Cada municipio, tiene sus peculiaridades locales, hay lugares donde ya se ha hecho y la experiencia ha sido satisfactoria, otros donde no. Los partidos, las asociaciones y colectivos están compuestos por personas que se conocen y llevan años luchando juntas con toda clase de rencillas personales y políticas. También con buenos momentos de colaboración y amistades que se han forjado a lo largo del tiempo. Este proceso que está abierto nos brinda una oportunidad muy buena para seleccionar a lo mejor de nuestra clase social, a las mujeres y hombres más indicados para liderar los cambios que nuestros municipios necesitan. 

Es necesario un aporte extra de generosidad de no mirarnos tanto  el ombligo y sobre todo escuchar paciente y atentamente todas las propuestas que están por llegar, tener cercanía con nuestros ciudadanos, nuestra base electoral, quiere unidad, pide la unidad, no hacer ese esfuerzo supondría un castigo inmediato por parte de nuestros votantes. Partiendo de esto, hay que señalar también, no vale la unidad a cualquier precio. Unidad no significa renunciar a nuestro programa, ideas o método sino poner el esfuerzo en conseguir un programa común.

Seguramente nuestro programa sea aplicable en la totalidad de las candidaturas o programas muy similares al nuestro. Nosotros allá donde estemos, deberemos defender nuestro programa e ideas, pero también antes de esto debemos participar y colaborar en cualquier frente de lucha local, provincial, regional y estatal, es ahí donde empieza la verdadera confluencia.

¿Construir la confluencia? 

La confluencia está impresa en el ADN de Izquierda Unida, desde su fundación ha estado presente prácticamente en todos los conflictos confluyendo con los sectores en lucha a través de  su militancia. No ha habido un solo conflicto sindical, vecinal  o político donde no haya habido algún militante de IU. 

Dejamos claro que luchamos por derrotar a un sistema capitalista que condena a millones de personas en todo el mundo a la miseria, dejamos claro que luchamos contra una sociedad patriarcal que esclaviza y oprime a la mujer. Hemos explicado allá donde estamos que esta crisis no ha sido una crisis sino una estafa y debemos tener una postura valiente y mostrarla ante cualquier conflicto político por muy difícil que sea de explicar.

Es así, llevando nuestras propuestas donde confluimos con nuestros principales aliados, que no son otros que nuestros votantes y los sectores más oprimidos de la sociedad,  la manera que tenemos de plantear un modo de lucha contra todo lo citado anteriormente.

Para nosotros confluir no es nada nuevo, simplemente tenemos que seguir haciéndolo y avanzando en ese camino.

Llegado el momento de construir las listas...

Es este el momento al que muchos obtusos ponen el nombre de confluencia, demostrando así que la perspectiva política no está entre sus mayores virtudes. Como la confluencia no es un pacto de cama entre dos  partidos, es necesario señalar la lista a las municipales como lo que es: una herramienta de la que nos valemos los ciudadanos para cambiar las políticas locales ajenas a nosotros dictadas por los partidos del régimen y utilizar los ayuntamientos como herramientas de cambio en el camino para superar el sistema capitalista hacia una sociedad mejor.

El resultado de estas listas no es otro que plasmar una serie de nombres de personas que han destacado en todos estos procesos de confluencias, valernos no solo de miembros de IU y/o Podemos sino de todos aquellos vecinos y vecinas que hayan demostrado con su experiencia y predisposición en la lucha ser lo más capaces para dirigir las instituciones locales y hacer la política de izquierdas que nuestra clase necesita. Es por tanto el proceso de confluencia un método para superar la lógica tradicional de representación delegativa, obteniendo una representación más democrática y participativa al ser directamente los vecinos quienes eligen  a las personas que nos representaran, ejerciendo sobre éstas un mayor control al mismo tiempo que unos lazos más unidos entre las candidatas y candidatos y votantes.

El paso previo a la confección de listas debe ser un proceso limpio, democrática, compañero y transparente

El proceso de confección de listas es un proceso que debe empezar pronto, sin pausas pero sin prisas, evitando dar pasos en falso fruto de la desesperación por tener cuanto antes cerrada una lista. Debe ser natural, sobre todo poniendo el oído a todas las quejas y peticiones de nuestros vecinos. Es nuestro deber intentar que sea lo más amplio posible haciendo las reuniones productivas que hagan falta. Construyendo espacios de reunión y reivindicaciones del modo más compañero posible. Somos conscientes que es un camino largo y que indudablemente sufrirá sus altibajos y también desavenencias con los distintos factores de la ecuación. Ahí es muy necesario, sobre todo para los representantes y militantes de los partidos, templar los ánimos y guardar cualquier tipo de visceralidad, ya que cualquier desaire, falta de respeto o voz desilusionaría a muchos vecinos y activistas, expulsándolos de facto de las reuniones, ya que no volverían. En resumen, el paso previo a la confección de listas debe ser un proceso limpio, democrático, compañero y transparente.

Llegado el momento de confeccionar la lista ahí es donde debemos sacar lo mejor de nosotros mismos y poner la disposición a que las personas, sobre todo aquellas que estén en los puestos más elevados sean las personas más indicadas para llevar los procesos de cambio o que sean capaces de llevar la oposición más digna posible durante los siguientes cuatro años. Es muy importante no renunciar a nuestros principios igualitarios y democráticos exigiendo unas listas paritarias y plurales en todos los municipios donde estén representados todos los sectores de nuestra base electoral. 

Teniendo todas las candidatas y candidatos a ser parte de nuestra lista y diseñado el programa, es necesario elegirlos democráticamente entre nuestros votantes y simpatizantes, mediante un sistema de primarias democrático y totalmente transparente, en mi opinión personal huiría de la votación online  siendo más fiable y transparente una votación presencial garantizando que todos los vecinos y vecinas  puedan votar, teniendo las urnas en las distintas  sedes abiertas durante varios días, aceptando también cualquier tipo de votación por correo.

¿Y la elaboración Programática?

Tan importante o más que decidir las personas que componen nuestra candidatura es la elaboración conjunta de un programa en común. Debemos tener una sensibilidad especial también en este punto, ya que recoge nuestras intenciones y promesas, así como nuestros objetivos y nuestra guía sobre cómo dirigir nuestro municipio de la manera que deseamos y nuestra gente necesita. En las reuniones debemos escuchar todas las propuestas y  plantear las nuestras sin miedo. Es obligación nuestra hacer que este programa se lleve a cabo como nuestro modo totalmente distinto de hacer política.

Una vez elegidas las listas y el programa llega la campaña electoral 

Tenemos que tener claro una cosa, la campaña electoral empieza en el momento que exigimos una municipalización, en el momento que luchamos  por la defensa del empleo en muestro municipio, en el momento que exigimos que haya una atención digna a las mujeres en nuestros pueblos o una educación pública de calidad. Todos nuestros compañeros y compañeras deben participar como uno más en la campaña electoral, codo con codo, defendiendo nuestro programa en común. 

Ser los primeros en pegar carteles y asistir a los mítines, buzonear casa a casa, compartir las propuestas en las redes sociales… Ser también los primeros que el día de las elecciones sean apoderados/as e interventores/as. Haciendo eso no podemos garantizar un triunfo electoral, pero si el mejor resultado posible.

Y, ¿qué pasa después de las elecciones?

Después del 9 de junio de 2019 no se acaba el mundo sino que ahí es cuando más hay que incidir en continuar los procesos de confluencia con la ciudadanía, allá donde consigamos el gobierno es necesario no alejarnos de nuestro tejido social y hacer unas políticas de izquierdas confluyendo con nuestros votantes y allá donde estemos en la oposición, seguir confluyendo para defendernos de las políticas de ajuste y antisociales de los partidos del régimen.

Se nos abre un periodo de año y medio largo, donde con el compañerismo que seguramente tendremos dispondremos de las candidatas y candidatos más idóneos para conquistar nuestros ayuntamientos y hacer unos municipios con políticas al servicio de los trabajadores.



Ramón Reyes Reyes es coordinador del área de Juventud y responsable de movimientos sociales de IU Granada provincial, miembro del PCE.