La Audiencia de Granada ha confirmado la condena a un jefe que propinó varios puñetazos y patadas a un empleado con el que discutió después de que se negara a firmarle el despido. Aunque ambos se cruzaron denuncias tras este episodio, el tribunal ha creído la versión del trabajador.

Su jefe quería que le firmara el despido, pero el empleado se negó y ahí comenzó una acalorada discusión que fue escuchada incluso por otros trabajadores

Los hechos se remontan al 2 de noviembre de 2023; eran cerca de las seis tarde y el trabajador se personó en las oficinas de la empresa a cobrar lo que se le debía. Su jefe quería que le firmara el despido, pero el empleado se negó y ahí comenzó una acalorada discusión que fue escuchada incluso por otros trabajadores.

El jefe acabó por propinar varios puñetados en la cara y patadas en las rodillas al empleado, causándole varias lesiones por las que requirió asistencia sanitaria, según se detalla en la sentencia a la que ha tenido acceso Europa Press. Ese mismo día, el empleador también denunció los hechos pero dando una versión distinta.

Según dijo, este extrabajador apareció en la empresa "un poco bebido" y empezó a decir que "le faltaban dineros por cobrar y días de vacaciones". Afirma que se dirigió a él "de malas maneras", gritando, "faltando el respeto y dando puñetazos sobre la mesa", por lo que le llamaron la atención y al final se fue.

La víctima relató que estuvo de baja médica y le echaron de la empresa, que fue a reclamar, teniendo el contrato y "todo". Aunque mediaron otros trabajadores a los que inicialmente denunció, explicó que "al coger los papeles que no le querían dar se abalanzaron hacia él" pero que tan solo fue su jefe quien le agredió

Durante el juicio, que se celebró en el Juzgado de Instrucción número 9 de Granada, la víctima relató que estuvo de baja médica y le echaron de la empresa, que fue a reclamar, teniendo el contrato y "todo". Aunque mediaron otros trabajadores a los que inicialmente denunció, explicó que "al coger los papeles que no le querían dar se abalanzaron hacia él" pero que tan solo fue su jefe quien le agredió.

Descartó asimismo que se presentara en la empresa embriagado o en actitud violenta, recalcando que "hay cámaras" en las instalaciones.

El jefe pretendió que declararan en su defensa durante el juicio los otros dos trabajadores que mediaron en la pelea, pero se dio la circunstancia de que ambos habían estado en la sala presenciando su declaración como acusado, de modo que la magistrada lo rechazó por entender que estaban "plenamente contaminados".

Así las cosas, la Audiencia Provincial ha respaldado la decisión de la jueza de Instrucción de dar credibilidad al trabajador basándose en las testificales y el resto de pruebas aportadas a la causa y ha confirmado su resolución, que condena a este jefe por un delito leve de lesiones al pago de una multa y a indemnizar en 280 euros al empleado por las lesiones causadas, quedando este último absuelto.