UPA Granada rechaza también la macroplanta fotovoltaica de Santa Fe y pide que las renovables no ocupen tierras agrícolas fértiles
La Unión de Pequeños Agricultores (UPA) de Granada ha mostrado su "rotundo rechazo" a los tres proyectos de megaplantas solares (en realidad es uno solo) que la empresa Ence quiere construir en Santa Fe y que afectará a zonas agrarias de tierra fértil y cultivada en la Vega de Granada. El más “dañino”, dice UPA, "perjudicaría amplias zonas de olivar de Atarfe".
El secretario general de la organización, Nicolás Chica, tiene muy claro que, de salir adelante, supondrían una importante pérdida de terreno cultivable, puesto que la extensión equivale a 200 campos de fútbol. “No podemos aceptar que ningún proyecto de energía solar pueda salir adelante ocupando tierras agrícolas fértiles, porque eso conlleva una pérdida fundamental, no sólo de renta para los agricultores, sino especialmente de producción de alimentos. Y eso también traería consigo la obligación de importar aquellos productos que aquí dejamos de cultivar”, critica el secretario general de UPA Granada, Nicolás Chica.
Con la apuesta por las energías limpias y renovables como punto de partida, UPA Granada considera fundamental la preservación del suelo fértil, generador de alimentos sanos, de calidad y sostenibles, en municipios del medio rural donde se garantiza la continuidad de la actividad agraria y de la fijación de la población al territorio. “Estamos viendo cómo la despoblación es un problema en muchos territorios de otras comunidades autónomas. En Granada, por ahora, no tenemos zonas abandonadas, pero con proyectos de este tipo habría muchos problemas para que la gente se quedara aquí, puesto que la actividad agraria desaparecería. Y no tenemos más alternativa económica. Habría una gran pérdida de jornales, directos e indirectos, tanto de los agricultores, como de los trabajadores que a lo largo del año o en periodos de campaña se esfuerzan en darle vida a estas tierras a nuestro medio rural”, afirma Nicolás Chica.
Gravámenes
De ahí que UPA Granada considere “fundamental” una regulación “estricta” de la implantación de plantas de energías renovables que impida la pérdida de terreno fértil y exige el establecimiento de gravámenes que penalicen que eso pueda ocurrir. “No estamos en contra, ni mucho menos, de las energías renovables. Estamos a favor de los huertos solares, pero rechazamos las macroplantas como las que están proyectadas en nuestra provincia. Además, apoyamos los huertos solares en localizaciones que no sean aptas para la actividad agraria o ganadera, nunca en terrenos fértiles en los que se producen alimentos. Por eso reclamamos la defensa de los terrenos productivos de nuestra provincia, ya que hablamos de tierras de uso agrario, fértiles y perfectamente viables, que se han cuidado y explotado por nuestros agricultores desde hace siglos. Por eso exigimos que se detenga este afán de determinadas empresas privadas por instalar macroplantas a costa del futuro de nuestros municipios y sus agricultores”, añade Nicolás Chica.
El secretario general de UPA Granada tiene muy claro que "en el futuro el desarrollo de las energías renovables va a ser muy importante, toda vez que es una apuesta de la Unión Europea que pretende unos objetivos de generación del 30% para 2030 y del 100% para 2050. Apoyamos la instalación de infraestructuras de energías alternativas, siempre y cuando se genere riqueza, bienestar y futuro para todos, sobre todo para los agricultores y ganaderos que están en el territorio. Pero también conocemos, de primera mano, el afán desmesurado de algunas empresas para hacerse con todo tipo de terrenos, incluidos los productivos y cultivables, para establecer sus ambiciosos proyectos de macroplantas que suponen una auténtica ofensiva contra la agricultura y la ganadería. Por eso instamos a las administraciones a adoptar las medidas de apoyo a las explotaciones familiares que sean necesarias para impedir estos planes que sólo van en contra del medio rural”, insiste Nicolás Chica.
Para terminar, sentencia: “No se deben beneficiar grupos empresariales y fondos de inversión que, con maniobras especulativas, sólo quieren lucrarse a costa de lo que sea y de quien sea, acaparando superficies de tierras de labor que son imprescindibles en Granada para la producción de los alimentos que demanda la sociedad. Debemos ser especialmente contundentes en no permitir que la instalación de fuentes de energía eléctrica se haga de cualquier manera y en cualquier zona. No es razonable y ahí UPA Granada siempre estará en contra”, concluye Nicolás Chica.