La ETS de Ingeniería de Caminos, Canales y Puertos homenajea con una exposición a Leonardo Torres Quevedo
La Escuela Técnica Superior de Ingeniería de Caminos, Canales y Puertos y la Biblioteca Politécnica de la UGR inauguran mañana martes 16 de abril una exposición con la que se quiere rendir homenaje a Leonardo Torres Quevedo, uno de los ingenieros más destacados de la historia. La muestra "Leonardo Torres Quevedo: el ingeniero total" ha sido comisariada por el profesor Francisco A. González Redondo de la Universidad Complutense de Madrid y reúne una gran cantidad material original de la vida y obra de este genio de la ingeniería. La muestra estará abierta desde el 16 de abril hasta el próximo 7 de junio.
El acto de inauguración de la exposición estará precedido, ese mismo día a las 12.30 horas, por una conferencia que lleva por título el nombre de la muestra y que será ofrecida por el profesor González Redondo en el Salón de Grados de la ETS.
Leonardo Torres Quevedo fue, más allá de ingeniero civil, "el inventor español por antonomasia"
Según resalta la Escuela, Leonardo Torres Quevedo fue, más allá de ingeniero civil, "el inventor español por antonomasia". Nacido en 1852 en una localidad de Santander, estudió Ingeniería de Caminos y ejerció su profesión en el ámbito ferroviario. Su primer invento fue el transbordador (o teleférico o funicular), aunque se construyó dos décadas más tarde. Luego, se interesó por la automática y las máquinas de calcular y la aeronáutica. En el campo de la máquinas de calcular inventó calculadoras capaces de resolver ecuaciones. En el de la automática, sienta las bases teóricas y prácticas con Ensayos sobre automática. En aeronáutica inventó el dirigible semirrígido hinchable, en el que trabajó desde 1902 y terminó construyendo en París. Utilizado en la Gran Guerra por los ejércitos francés e inglés, alcanzaba una velocidad de 80 km/h. La fama de Torres Quevedo se debe sobre todo a sus inventos en el campo de los transbordadores, funiculares y teleféricos. De hecho, inventó el Spanish Niagara Aerocar en 1916, que aún sigue funcionando. En definitiva, tuvo una carrera profesional de numerosos y variados inventos y patentes.