La desconexión ferroviaria mantiene en el aire el futuro del 35% de la plantilla de ADIF, según UGT
La falta de concreción sobre cómo va a quedar el escenario ferroviario de Granada mantiene en el aire el futuro del 35 por ciento de la actual plantilla del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF), según los datos que baraja UGT.
El sindicato mantiene que desde que se pusiera en marcha el plan alternativo de Renfe, con transbordos en autobús, a causa de las obras del AVE en la línea Granada-Bobadilla la cifra de viajeros se ha reducido entre un 60 y un 70 por ciento y cree que los últimos acontecimientos empeorarán la situación.
Por ello, el responsable del sector ferroviario de UGT Granada, Salvador Molina, ha reivindicado, en declaraciones a Europa Press, la reapertura de la línea Granada-Linares-Baeza para conectar con los destinos de Madrid y Barcelona, de modo que se revitalice el tráfico ferroviario.
Los trabajadores se muestran conscientes de que el tramo del AVE a su paso por Loja "va para largo", una vez que la empresa adjudicataria ha trasladado a ADIF su deseo de rescindir el contrato, y afirman desconocer cómo va a quedar el proyecto exactamente.
Según ha relatado Molina, la plantilla está preocupada por que el personal de ADIF no se encarga del mantenimiento de las vías del AVE, puesto que esto lo llevan empresas privadas, y dado que se desconoce si finalmente "quedará vía convencional" y sus correspondientes estaciones, temen cómo les afectará.
Los trabajadores han visto además cómo en las últimas semanas, a raíz del parón en el tramo de Loja, se han ralentizado los trabajos de remodelación de la estación de Granada para acoger la Alta Velocidad.
"Se han retirado las grúas y las excavadoras que había el mes pasado en la estación sacando tierra, allanando y haciendo los andenes, ahora no hay nadie; un albañil o dos", afirman.