La reforma laboral ha mejorado el empleo en Granada, destaca UGT
En Granada, en diciembre de 2022, el paro registrado en los Servicios Públicos de Empleo ha sido de 77.658 personas, 3.137 menos que el mes pasado (-3,88%), y hay 3.264 personas inscritas en paro menos que hace un año (80.922), cuando descendió el desempleo en 3.167 personas. En el análisis por sectores, ha bajado el paro en servicios (-2.240), agricultura (-457), colectivo de personas sin empleo anterior (-384) e industria (-112), mientras que ha subido sólo en la construcción (56). En cuanto a la contratación, durante este mes se han realizado en Granada un total de 31.243 contratos, 18.518 menos que en el mismo mes del año 2021 (49.761). Del total de contratos de diciembre, 17.884 han sido temporales, un 57,21%. En cuanto al total de contratos acumulados de 2022 (406.999, 53.641 menos que en 2021, cuando había 460.640) se han formalizado 137.677 contratos indefinidos en la provincia de Granada, un 33,82% del total.
Juan Francisco Martín, secretario general de UGT Granada, señala que los datos del paro del mes de diciembre vuelven a constatar, un mes más, que la reforma laboral funciona, pues crece el empleo y su calidad, a pesar del elevado grado de incertidumbre que arrojan las consecuencias socioeconómicas del conflicto bélico en Ucrania. Aun así, opina que no hay que conformarse: se precisan políticas activas más eficaces para acabar con el paro de larga duración y salarios justos que garanticen el poder adquisitivo de las personas trabajadoras, máxime teniendo en cuenta el incremento de los precios y de los márgenes empresariales.
Así, señala Martín, en 2022 se ha creado empleo en Granada, a la vez que ha mejorado su estabilidad, lo que constituye una muy buena noticia. Sin embargo, aún persiste una tasa de paro elevada y problemas de funcionamiento del mercado laboral que perjudican la integración de determinados grupos de población, por lo que es necesario implementar unas nuevas políticas activas de empleo que den solución a estas disfunciones.
Además, el representante sindical recuerda que la calidad del empleo depende también de que su retribución sea adecuada. Y ahora no lo está siendo, puesto que los salarios están registrando una fuerte pérdida de poder adquisitivo a causa de la elevada inflación., que está lastrando el consumo de los hogares, algo que ya ha afectado al crecimiento económico y que perjudica a la recuperación. Para el ugetista, el aumento del nivel general de los precios viene provocado por el incremento de los márgenes de beneficios que están realizando empresas. En este sentido, exige un cambio en la política salarial de las patronales y una mayor responsabilidad a la hora de gestionar los márgenes empresariales.
Por este motivo, el representante de UGT demanda una subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) que debería ser superior al valor que promediará la inflación en 2022: debe hacerse una subida hasta los 1.100 euros en 14 pagas, lo que supone un incremento del SMI para 2023 del 10%. Un incremento que serviría además para reactivar la economía mediante un aumento del consumo, concluye.