Pacientes impacientes, sin citas y con colas
Pasan las semanas, avanza el verano y la situación en los centros de salud sigue empeorando: 10 días de demora en centros de salud de Granada, 8 días en Almería, 10 en Huelva, 11 en Jaén, 13 en Cádiz, 14 en Sevilla o sin cita disponible en muchos municipios.
El Plan de Verano de la Consejería de Salud ha sido un fracaso, probablemente por ausencia del mismo y por la improvisación de última hora
El Plan de Verano de la Consejería de Salud ha sido un fracaso, probablemente por ausencia del mismo y por la improvisación de última hora. Desde hace meses se deberían haber tomado medidas para disponer de profesionales, ofreciendo contratos de larga duración, mejorando las condiciones laborales e incentivando el trabajo en las zonas de difícil cobertura, y por supuesto, no despidiendo a los 8.000 profesionales andaluces que se marcharon a otras CCAA.
Las insoportables demoras para recibir atención en los centros de salud de Andalucía obligan a los pacientes a acudir a las urgencias de los hospitales como única opción para resolver sus problemas de salud, generando largas colas en las puertas de los centros hospitalarios, nunca vistas hasta ahora en nuestros centros sanitarios.
Ante ello, Catalina García rectificó diciendo que la atención en 48 horas no se refiere a una consulta médica o de enfermería, sino a una “consulta de acogida”, de filtro
A pesar de este contexto, la nueva consejera de Salud anunció hace unos días que “ya se atiende en 48 horas en los centros de salud andaluces” causando estupor en las redes sociales, que reaccionaron con la iniciativa “comparte tu #CitaReal” y mostrando que las citas reales oscilaban entre los 8 y los 14 días de demora. Ante ello, Catalina García rectificó diciendo que la atención en 48 horas no se refiere a una consulta médica o de enfermería, sino a una “consulta de acogida”, de filtro.
Según explica la consejera, “si una persona, cuando saca una cita, cree que la demora es excesiva, acude a su centro de salud y una enfermera la evalúa y se ve donde hay que dirigirla si ella no puede solucionar el caso”.
Y ante esto, me surgen muchas dudas. Esta iniciativa, ¿mejora el acceso, resta días a la demora en las citas? ¿Esto agiliza la atención o la hace más complicada? Pues parece que no mejora las demoras para recibir atención sanitaria, ya que esta consulta lleva funcionando muchos meses y las demoras no bajan.
Pero lo más preocupante de las declaraciones de la Consejera es que demuestra un profundo desconocimiento de la Atención Primaria y sus características esenciales, una de ellas la personalización
Pero lo más preocupante de las declaraciones de la Consejera es que demuestra un profundo desconocimiento de la Atención Primaria y sus características esenciales, una de ellas la personalización. El hecho de cada persona tenga un médico/a y una enfermera/a de referencia, que conoce su historia y que le atiende en base a este conocimiento, es un elemento que proporciona calidad a la atención que recibimos. Esta fórmula tiene un valor incuestionable y es una seña de identidad del trabajo en los centros de salud. Y es así porque la evidencia científica ha demostrado que tener el mismo médico/a durante años disminuye la mortalidad hasta en un 30%, evita hospitalizaciones y la necesidad de acudir a servicios de urgencias. No sé si estos datos los conocen los actuales responsables sanitarios, pero deberían estudiarlos con detenimiento porque son espectaculares (ningún fármaco consigue ni de cerca estos resultados) y porque demuestran la importancia y el interés de invertir y priorizar en Atención Primaria de Salud si queremos mantener una Sanidad Pública de calidad y sostenible.
Una iniciativa como la consulta de acogida podrá haber sido útil en situaciones excepcionales como las vividas durante la pandemia, pero encajan con dificultad en el modelo de Atención Primaria
La personalización es un elemento crucial en la atención sanitaria que recibimos en los centros de salud y es incompatible con el modelo de la Consulta de Acogida, en la que un profesional atiende a la población que acude al centro de salud sin ser su profesional de referencia y sin conocer su historia vital en profundidad. Por lo tanto, una iniciativa como la consulta de acogida podrá haber sido útil en situaciones excepcionales como las vividas durante la pandemia, pero encajan con dificultad en el modelo de Atención Primaria.
Está claro que es necesario rediseñar el modelo de Atención Primaria, en función de las nuevas necesidades de la población y de la escasez de recursos humanos que sufriremos durante esta década. Pero creo que las posibles nuevas fórmulas organizativas o modalidades de atención deben reforzar las claves de éxito de este nivel asistencial, sobre las que existe sobrada evidencia en todo el mundo y no implantar iniciativas contrarias al mismo, que restan valor y eficacia al pilar fundamental de nuestro Sistema Sanitario.
