El responsable de UGT en el sector Ferroviario de Granada, Salvador Molina, ha considerado que la supresión del tren nocturno a Barcelona es una iniciativa con la que Renfe pretende "el aislamiento ferroviario" de Granada y su "desaparición" como motor de empleo de "calidad" para la provincia. 

Este tren, con capacidad para 220 viajeros su mayoría en camas y con ocupaciones del 100%, era en este momento "la única oportunidad" de salir de Granada por ferrocarril sin tener que utilizar el transbordo por carretera con Antequera-Santa Ana, siendo por ello, un medio "muy utilizado" por granadinos mayores y por gran cantidad de turistas, según ha explicado.

A juicio de Molina, no cabe duda de que es "un nuevo intento político de hundir nuestra provincia" y dar "una estocada casi definitiva" a gran cantidad de puestos de trabajo ya mermados por las obras de la estación de Granada y el corte de la línea Granada-Archidona, que van camino de "eternizarse" y por supuesto un intento de echar a los clientes del ferrocarril en Granada, ya mermados en un 60% por los transbordos por carretera, según sus datos.

Desde el Sector Ferroviario de UGT Granada hacen un llamamiento a la clase política granadina en defensa del ferrocarril, animándoles a que visiten las instalaciones ferroviarias de las provincias occidentales andaluzas, para que "de una vez por todas recapaciten, dejen de mirarse su ombligo, olviden tiempos ya muy lejanos los cuales les tienen la mente muy ocupada, dejen atrás la sumisión a Sevilla y Madrid y decidan ganarse ese sueldo que cobran haciendo lo que realmente se les pide, defender los intereses de Granada y si no se sienten capaces… dedíquense a otra actividad", afirma Molina en un comunicado.