UGT Granada reclama "seguir avanzando en la calidad del empleo"
En Granada, en febrero de 2024, el paro registrado en los Servicios Públicos de Empleo ha sido de 77.891 personas, 85 más que el mes pasado (0,11%), y hay 2.943 personas inscritas en paro menos que hace un año (80.924), cuando aumentó el desempleo en 749 personas. En el análisis por sectores, ha bajado el paro en servicios (-154), construcción (-65), e industria (-14), mientras que ha subido en agricultura (100), y colectivo de personas sin empleo anterior (218). En cuanto a la contratación, durante este mes, se han realizado en Granada un total de 24.300 contratos, 1.625 menos que en el mismo mes del año 2023 (25.925). Del total de contratos de enero, 13.914 han sido temporales, un 57,25%. En cuanto a la contratación acumulada en lo que llevamos de año, se han firmado 52.223 contratos laborales, de ellos 22.560 (un 43,69%) carácter indefinido.
Ante estos datos, Luis Miguel Gutiérrez, secretario general de UGT, resalta que la estadística de contratos continúa mostrando signos de estabilización en el mercado laboral granadino, comportándose acorde a la premisa de “menos contratos, pero de mayor calidad”. De forma que muchas personas trabajadoras que antes encadenaban varios contratos temporales en un mismo mes, ahora tienen un contrato indefinido. Por ello, el representante de UGT opina que el que haya menos contratos no debe ser considerado sólo como un aspecto negativo, sino un indicador de que la reforma laboral está funcionando y permitiendo que las relaciones entre trabajador y empresa se desarrollen en un marco de mayor estabilidad laboral de la que se benefician ambas partes.
Para el representante sindical, es indispensable seguir mejorando la calidad del empleo desde todos los ámbitos, de manera que, si prácticamente ya se ha conseguido que el contrato indefinido adquiera la relevancia formal deseada en la contratación, ahora hay que mejorar las condiciones en las que se desenvuelven esos contratos indefinidos, elevando su estabilidad real.
Para ello, Gutiérrez opina que es fundamental continuar avanzando en la protección de las personas trabajadoras y acabar de completar las cuestiones que quedaron pendientes hace dos años, como la reforma del despido, que continúa sin adecuarse a la Carta Social Europea Revisada. Además, señala que para que el empleo indefinido cuente con verdaderas garantías es necesario que la indemnización por despido adquiera un carácter disuasorio y resarcitorio, recuperando también los salarios de tramitación. Ello, destaca el ugetista, desplazaría al despido como la última de las opciones posibles para el empleador, fomentando otras alternativas, como la formación y la reubicación, que son mucho más beneficiosas para ambas partes, ya que contribuyen a elevar la productividad, reducen costes y dotan a la persona trabajadora de un extra de seguridad laboral, muy necesario hoy en día para poder tener en consideración proyectos de vida a más largo plazo. Igualmente, es necesario que las negociaciones en torno a la reducción de la jornada laboral no se dilaten, alcanzando las 35 horas semanales antes de acabe la legislatura y con el objetivo puesto en la jornada laboral de 32 horas sin reducción de salario.
Paralelamente, el ugetista considera imprescindible que se adopten las medidas para reducir el subempleo (esencialmente, tiempo parcial involuntario y posible abuso de los fijos discontinuos), que constituye la principal causa de los reducidos ingresos que obtienen miles de personas trabajadoras y, por tanto, de la pobreza laboral que soportan los hogares.