UGT denuncia a Clece por "obligar a las limpiadoras de hospitales de Granada a gestionar residuos sanitarios del Covid-19 sin ningún tipo de formación"

E+I+D+i - IndeGranada - Miércoles, 8 de Abril de 2020
El sindicato ve una "grave negligencia" que pone en riesgo la salud del personal de limpieza.
Bolsas de residuos sanitarios considerados peligrosos.
ugt
Bolsas de residuos sanitarios considerados peligrosos.

UGT Granada ha interpuesto este martes, 7 de abril, una denuncia ante la inspección Provincial de Trabajo contra la empresa Clece, responsable de la limpieza en los dos hospitales de Granada, Virgen de las Nieves y Clínico San Cecilio, debido a que "ha exigido de las limpiadoras de planta que se encarguen de la gestión de los residuos generados en la atención sanitaria a pacientes sospechosos o confirmados por Covid-19, tanto en plantas de hospitalización, con pacientes de Covid-19, como en el servicio de urgencias, laboratorios, y puntos de toma de muestras de test de coronavirus. Y todo ello sin proporcionarles ningún tipo de formación al respecto que asegure el correcto manipulado de estos residuos de forma que no se ponga en riesgo la salud laboral de las propias  limpiadoras", explica el sindicato en un comunicado. Una situación que también ha sido denunciada por el sindicato CGT

UGT afirma que Clece se ha limitado a entregar a las trabajadoras una hoja donde "se desdice de todo el protocolo que se usaba con habitualidad para incorporar técnicas y modos altamente peligrosos para la salud individual y colectiva del centro".

Instrucciones facilitadas al personal de limpieza. ugt

Hasta ahora, detalla e sindicato, los residuos sanitarios denominados peligrosos se introducían en unas bolsas de color rojo, que estaban dentro de las unidades de hospitalización, y adecuadamente colocadas dentro de unos contenedores especiales, de color verde, donde los auxiliares de enfermaría colocaban las prendas sucias e infectadas hasta su llenado. Una vez lleno, cerraba este mismo personal la bolsa y cerraba el contenedor, que quedaba anclado, sin posibilidad de manipulación interior, ni exterior. Estos contenedores se llevaban al sótano, por el personal de limpieza, donde una empresa especializada para ello, Cespa (especializada en gestión de residuos, a la que pertenece Inagra), pasaba a recogerlos, haciéndoles el tratamiento correspondiente, y devolviendo los contenedores debidamente desinfectados y aptos para su nuevo uso.

Sin embargo, explica UGT, tras las instrucciones recibidas por los encargados, como ya se ha dicho, "sin mención alguna o formación, de manipulación de residuos peligrosos, las trabajadoras de la limpieza son las encargadas de acondicionar las bolsas abiertas con el material infectado, dentro y fuera de las habitaciones, sellar esas bolsas, 'desinfectar' con líquido desinfectante, allí mismo, los contenedores, que se quedan en su lugar, y trasladar esas bolsas rojas con material infectado dentro de otra bolsa trasparente, donde introducirá además los EPIS que ha usado para desinfectarla, y traslada esa bolsa tal cual hasta la zona limpia de cada planta o al ascensor, donde lo deposita en una caja de cartón".

Posibilidad de contagio

UGT estima que hay un claro manipulado de material infeccioso por personal no cualificado, no sólo sanitariamente, sino de gestión de residuos. "Se eliminan en la ecuación de protección los contenedores que antes eran inmanipulables para reciclar su uso, y correspondiendo nuevamente a la trabajadora de la limpieza su desinfección, in situ, con el peligro que esa operación acarrea, por partículas en suspensión, que son depositadas en otras superficies o en el suelo. El sólo hecho que se diga que los Epi´s (mascarilla y guantes, y bata), se introduzca en la bolsa, una vez limpiado el contenedor, hace prever que se reconoce la posibilidad de contagio de cuantas superficies se vean afectadas en el radio del contenedor al ser manipulado para sus labores de limpieza", añade el sindicato.

"Para más inri, la trabajadora de limpieza tiene que trasladar la bolsa roja dentro de otra bolsa transparente, sin otra protección externa (con la fragilidad que tiene una bolsa) por los pasillos hasta la zona limpia, donde se mete en una caja de cartón, que también no es tan segura como un contenedor hermético, y además es poroso, desconociendo la acción vírica que puede ser trasmitida en ese proceso. Si esto no fuera suficiente,  los contenedores de cartón se acumulan a diario en una zona donde pasan cientos de trabajadores a diario, camino de los vestuarios, y al lado del citado almacén, también cercano el lugar de descarga de alimentos y cocinas", explica UGT.

Para UGT "no se justifica que se dejen de utilizar los contenedores desde el origen de los residuos hasta su posterior retirada por una empresa especializada en gestión de residuos peligrosos (Cespa), como se hacía antes, para utilizar este método, que no solo pone en claro peligro su traslado de unos sitios a otros, sino que además exige que funciones que hacía la empresa especializada, cual es la desinfección del contenedor, se haga por las propias trabajadoras de limpieza en circunstancias higiénicas muy criticables, poniéndose en peligro ellas mismas, por falta de conocimiento y medios, y poniendo en peligro a cuantos estén alrededor, o en el tráfico de su transporte". Y todo ello no se justifica, recuerdan, al existir en un almacén del Materno Infantil más de 350 contenedores vacíos, esperando su utilización.

"Grave negligencia"

Como reitera UGT en su denuncia, la Ley de Prevención de Riesgos laborales exige a las empresas que tomen las medidas oportunas para proteger a sus trabajadores de cualquier peligro en la realización de su trabajo. Este nuevo protocolo, a juicio del sindicato, "no es solo una vulneración de la prevención propia que debe tener la empresa hacia sus trabajadores, que como se ha dicho, ni se les ha informado, ni formado, sino que además se trata de una grave negligencia, al atentar a la salud de los mismos, desoyendo todos los protocolos sanitarios de gestión de residuos, establecidos no sólo a nivel sanitario, sino los propios de la Organización Mundial de la Salud sobre el Covid-19.  Además, el Ministerio de Sanidad en ningún momento autoriza este tipo de manipulaciones (Orden SND/271/2020, de 19 de marzo, por la que se establecen instrucciones sobre gestión de residuos en la situación de crisis sanitaria ocasionada por la Covid-19)".

Por todo ello, "ante el grave e inminente riesgo que está sufriendo el personal de limpieza hospitalaria", UGT pide a la Inspección de Trabajo que tome medidas urgentes para paralizar esta práctica y conminar a la empresa Clece y al Servicio Andaluz de Salud a retomar las buenas prácticas de eliminación de residuos existentes anteriormente o mejoradas, ya que realmente los contenedores precintados deberían ser retirados desde su origen por personal especializado en su tratamiento", finaliza la nota.