El Metro de Granada ha instalado dispensadores de gel hidroalcohólico en el interior de cada uno de los trenes de su flota, compuesta de 15 unidades, atendiendo a la última orden publicada en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA).

Los dispensadores de gel se han colocado en los marcos de los fuelles de manera que podrán ser desinstalados al final de la pandemia. Estos aparatos tienen válvulas que soportan bajas densidades, acordes con su uso, explica la Junta. Esta medida ha sido aceptada por el comité de seguridad del metro por tratarse de una situación extraordinaria, ya que en el interior del metro todos los elementos deben ser incombustibles, por lo que se ha limitado la colocación de estos dispensadores al mínimo tamaño para garantizar la seguridad de los usuarios.

Gracias a los dispensadores de gel se minimiza el riesgo de transmisión del virus por contacto con superficies o dispositivos. De hecho, además de los equipos habituales de limpieza, el metro de Granada mantiene durante la pandemia un equipo de desinfección con productos de base alcohólica que actúa en los trenes en la cabecera de Albolote.

En paralelo, también se ha reforzado la información a usuarios con nueva cartelería, de forma que se han delimitado los itinerarios en escaleras pedestres y mecánicas, y se han establecido puntos de parada para garantizar la distancia de seguridad de dos metros entre las personas.

La Junta recuerda que el método más eficaz para evitar en lo posible la transmisión aérea del virus es el uso obligatorio de la mascarilla, así como una ventilación adecuada. En el caso del Metro de Granada, se ha modificado la entrada de aire fresco del exterior, de manera que la renovación del aire se hace cada dos minutos y medio. El sistema de aire acondicionado funciona solamente en el ciclo de renovación, de manera que la incorporación de aire es siempre desde el exterior, indica la Junta.

También es de gran eficacia, además de la mejora en los sistemas de ventilación, la medida tomada al inicio de la pandemia de abrir todas las puertas de los trenes en las paradas, en un periodo que va de un minuto a minuto y medio y que, según ha evaluado la certificación Aenor para la seguridad frente al Covid, es de enorme eficacia, dice la Junta.

Reducción del horario en fin de semana

Por otra parte, el Metro de Granada, en cumplimiento de la orden de 8 de noviembre de la Consejería de Salud y Familias, por la que se modulan los niveles de alerta 3 y 4, modifica su horario en fin de semana y vísperas de festivos desde esta semana. El servicio de transporte finalizará pasada una hora del toque de queda nocturno. Por tanto, los últimos trenes saldrán todos los días desde cada cabecera a las 23.00 horas. Los horarios sólo se modifican los viernes, sábados y vísperas de festivo, eliminando el servicio nocturno que se prestaba de 23.00 a 2.00 horas de la madrugada.