Los contratos indefinidos baten récords en Granada tras los dos primeros meses de la nueva reforma laboral
La hostelería, uno de los sectores con mayor temporalidad en las contrataciones. pixabay
La nueva reforma laboral, que entró en vigor el 1 de enero de este año, ha elevado el número de contratos indefinidos en Granada a cifras nunca antes vistas. Esa es la buena noticia. La mala, que los contratos fijos aún son muy pocos respecto al total de contrataciones, y su peso en la provincia es muy inferior al que representan a nivel nacional.
Según los datos que ofrece el Sepe (Servicio Público de Empleo Estatal), en los dos primeros meses de aplicación de la reforma, enero y febrero, se firmaron en la provincia de Granada 82.391 nuevos contratos de trabajo. De ellos, 4.856 fueron indefinidos (2.211 en enero y 2.645 en febrero), lo que significa el 5,9% del total.
En ningún otro año de la serie estadística se habían suscrito tantos contratos fijos durante ese periodo de enero-febrero. El año pasado, por ejemplo, fueron solo 1.734 contratos indefinidos entre los dos meses. Y el anterior, 2020, antes de que irrumpiera la pandemia, la cifra también fue muy inferior, 2.583. Hasta ahora, el año con más contratos indefinidos en los dos primeros meses del año fue 2018, con 3.618 pactos laborales.
Asimismo, en porcentaje sobre el total de contratos también es la cifra más alta. Ese 5,9% de contratos iniciales fijos supera al 4,2% que se alcanzó en 2018, el porcentaje más alto hasta que se ha acometido la nueva reforma laboral.
| Total contratos iniciales | Contratos indefinidos | Porcentaje | |
| 2022 | 82.391 | 4.856 | 5,9% |
| 2021 | 72.970 | 1.734 | 2,4% |
| 2020 | 94.022 | 2.583 | 2,7% |
Fuente: Sepe
A esos 4.856 contratos iniciales fijos firmados en enero-febrero de este año hay que sumar otros 2.652 contratos temporales convertidos en indefinidos en esos dos meses. También el número de contratos convertidos a indefinidos es más alto que el de años anteriores (en 2021 fueron 1.658 y en 2020, 1.967), y solo hubo un año en toda la serie histórica con más contratos convertidos en indefinidos, 2007, antes de la anterior crisis económica, con 3.335.
De esta forma, sumados los fijos iniciales y los temporales convertidos en indefinidos, en los dos primeros meses del año son 7.508 los contratos fijos totales, la mayor cifra de la serie estadística del SEPE, que se inicia en 2006.
Un porcentaje aún muy bajo
Sin embargo, son todavía muy pocos contratos indefinidos respecto al total de pactos laborales firmados. Los 4.856 fijos iniciales de enero-febrero suponen el 5,9% del total de contratos, frente al 13% a nivel nacional. Y son algo inferiores también a los de la media andaluza, del 6,8%.
Añadidos los convertidos en indefinidos, esos 7.508 contratos fijos totales de Granada representan algo menos del 9% del total de contratos firmados en los dos meses, la mitad que en el conjunto de España, donde llegaron al 18% del total de contratos. Y están también por debajo del 10% de contratos fijos totales de Andalucía.
La nueva reforma laboral se marcó como objetivo dar más estabilidad a las contrataciones y reducir la temporalidad, entre otras metas. Una excesiva temporalidad que se materializa, además de en el bajo número de contratos indefinidos, en la escasa duración de los contratos temporales, tanto de obra o servicio como los eventuales por circunstancias de la producción.
Menos de un mes de duración
Si los contratos fjos se han incrementado notablemente en estos dos primeros meses, aunque su peso siga siendo muy reducido respecto al total, en la duración de los contratos temporales ha habido por poco avance, por el momento.
Por ejemplo, en los contratos con duración inferior a un mes, entre enero y febrero se firmaron en Granada 35.290 contratos, sumando los de obra y servicio, eventuales por circunstancias de la producción y los de interinidad, que aglutinan la inmensa mayoría de los contratos temporales. Esos 35.290 contratos de menos de un mes de duración suponen el 45,9% del total en esas modalidades. Es un porcentaje prácticamente igual al del año pasado en esos dos meses, 45,5%, y solo un poco inferior al de 2020, un año más "normal' pues todavía no había pandemia. En 2020 el 49,7% de los contratos temporales tuvieron menos de un mes de duración.
En los contratos aún más efímeros, los que duran menos de 7 días, en el periodo enero-febrero de este año se firmaron 1.437 contratos, el 4,6% del total de temporales, algo más incluso que en 2021, cuando fueron del 3,2%, aunque bastantes menos que en 2020, año en que los contratos de menos de una semana representaron prácticamente el 10% de los contratos temporales.
Y en la parcialidad de las contrataciones, es decir, el porcentaje de contratos a jornada parcial respecto a los de jornada completa, tampoco ha habido demasiada mejora. En los dos primeros meses de este año un 22,1% de los contratos temporales fueron a jornada parcial, más que el pasado (17,6%), aunque algo menos que en 2020, cuando la contratación parcial llegó al 25%.
