Agricultores y artesanos del Altiplano se unen para vender sus productos por Internet sin intermediarios
Una decena de jóvenes granjeros y artesanos del Altiplano de Granada ha creado Farmers Farm, una granja online para la venta sin intermediarios, a un precio justo, de productos que llevan el nombre de quien los cultiva. Se trata de la semilla de un proyecto abanderado por la joven 'influencer' Anita la Cortijera que pretende darle un cambio de rumbo a la vida en zonas rurales.
Según explican en una nota de prensa, la raíz de Farmers Farm es destacar dónde, cómo y, lo más importante, quién cultiva los alimentos que comes. En esta granja online la denominación de origen la determina el productor, por eso son productos con nombre propio.
Conceptos como real food, sostenibilidad o km 0 están en boca de todos, pero, más allá de las modas, es una realidad que en la última década se ha generado una auténtica revolución de los modelos de consumo por Internet. Los consumidores buscan tener una fuerte cercanía con lo que comen, por ejemplo saber de dónde vienen esos alimentos, si han sido cultivados de forma ecológica o si para su producción se han utilizado energías limpias. Farmers Farm nace para satisfacer todos estos intereses y uno extra: poner en el foco de atención a las personas, granjeros y artesanos, responsables de nuestra alimentación, y por ende, de nuestra salud.
Aunque su formato sea el de página web, este proyecto digital nació en el campo. Y tiene como madrina a una importante agro influencer. “No estamos inventando la rueda, simplemente queremos darles a los pequeños agricultores la oportunidad de vender el fruto de su trabajo a un precio justo”, manifiesta Ana María Martos, más conocida por sus 66.000 seguidores como Anita La Cortijera.
La fuerte competencia de precios, en muchos casos por debajo del coste de producción, o la intrusiva oferta de productos extranjeros son algunos de los problemas que están asfixiando la agricultura local y a pequeña escala. Incluso otros marketplace de productos agrícolas que proponen como solución eliminar los intermediarios no llegan a abordar todo el problema. “No nos gusta hablar de mercado de productores ni supermercado online porque se pierde la esencia de lo que somos, gente de campo que vive dedicada a su trabajo, que con un esfuerzo inmenso sacan adelante sus cosechas. Y eso tiene mucho valor, un valor que el comprador tiene que conocer. Además, queremos darle a cada uno el lugar que merece y por eso solo hay un producto por categoría, porque es único y tiene nombre propio”.
Un ultramarinos digital
Farmers Farm se define como una granja abierta al mundo, un ultramarinos digital. “Como ir a la tiendecita de tu barrio y que el tendero te cuente que tiene en oferta los limones de Enrique o te recomiende llevarte unos chocolates porque a Maria José le han salido buenísimos”, asegura Anita.
Y es que el origen de los alimentos en Farmers Farm son las historias de los granjeros y artesanos que los producen. Empezando por la propia Anita, que vende orgullosa el AOVE (aceite de oliva virgen extra) ecológico de su familia. O las conservas elaboradas por la Asociación Esperanza, una organización sin ánimo de lucro que da empleo a personas con diversidad funcional. Diego, Juan, José, Mari Carmen, Julio… Farmers Farm es un portfolio de jóvenes agricultores y mujeres emprendedoras.
Venta directa
El vínculo entre productor y consumidor es totalmente directo. Además de acceder a la historia de cada granjero y artesano, la plataforma facilita la compra sin intermediarios a través de un ecommerce muy sencillo. Desde la página Cosecha se elige el producto que quieras, el formato disponible y la próxima fecha de reparto. Ya está. Alimentos directos de la granja a golpe de clic.
“Por desgracia está muy extendido el estereotipo de que la gente de campo, que vivimos en zonas rurales, somos paletos ignorantes que no nos enteramos de lo que pasa. Es como si viviéramos en otra época. Y todo lo contrario. Nadie mejor que nosotros para identificar los problemas del mundo rural y darles una solución. Para eso ponemos en marcha Farmers Farm. Ya era hora de darles un espacio propio a esta gente”, afirma Anita la Cortijera.
La influencer defiende la necesidad de que los agricultores cuenten con “aparejos 2.0” para poner en valor su trabajo. “El campo es un sitio que tiene problemas sí, pero también es una fuente enorme de recursos. Solo necesitamos nuevas herramientas para aprovecharlos”.
Farmers Farm nace para empoderar al primer eslabón del sistema de producción alimentaria, al agricultor. Y enlazado a este objetivo está el de darle coherencia al concepto de sostenibilidad, que en un extremo tiene alarmantes cifras de desperdicio de alimentos y en otro el vertiginoso agotamiento de los recursos naturales. Farmers Farm nace para que sea un lujo accesible disfrutar de productos con nombre propio, directos de nuestro campo.