El Archivo Histórico Provincial de Granada acogió la presentación del libro Mujeres, Género y Trabajo en la Edad Moderna, editado por Sílex Ediciones dentro de su colección Sílex Universidad. El volumen, coordinado por las profesoras de la Universidad de Granada, Margarita M. Birriel Salcedo e Inmaculada Arias de Saavedra Alías, es fruto del proyecto de investigación TRAMA: Los trabajos de las mujeres en la Andalucía Moderna, financiado por la Consejería de Universidad, Investigación e Innovación de la Junta de Andalucía y fondos FEDER.

Según ha informado en una nota de prensa el Proyecto TRAMA de la UGR, la directora del Archivo, Eva Martín López, abrió el acto destacando la necesidad de repensar la función de los archivos para visibilizar la actividad de las mujeres, frecuentemente silenciada por prácticas de descripción tradicionales. Recordó que la documentación conserva innumerables huellas de su presencia cotidiana en la vida económica y social, siempre que se la mire con las herramientas adecuadas, como ella misma desarrolla en uno de los capítulos del libro.

El volumen, coordinado por las profesoras de la Universidad de Granada, Margarita M. Birriel Salcedo e Inmaculada Arias de Saavedra Alías, es fruto del proyecto de investigación TRAMA: Los trabajos de las mujeres en la Andalucía Moderna

La presentación estuvo a cargo de María Ángeles Gálvez Ruiz, profesora de Historia de América de la Universidad de Granada, quien subrayó que la obra desmonta estereotipos arraigados y sitúa el trabajo de las mujeres en el lugar que le corresponde dentro de los procesos de producción y reproducción social. Señaló que el volumen reúne a algunas de las voces más destacadas de la historiografía contemporánea, entre ellas Carmen Sarasúa, Maria Ågren, Ofelia Rey Castelao, María José Vilalta, Paula Álvarez, Raquel Tovar y Maribel Díez Jiménez, cuyas contribuciones permiten comprender la relevancia de los avances realizados en las últimas décadas y abren nuevas vías para estudiar el trabajo desde la categoría de género.

Gálvez destacó además el carácter pluridisciplinar de la obra, visible en el diálogo entre distintas metodologías y enfoques. Mencionó, en este sentido, las aportaciones de María Aurora Molina Fajardo, que analiza el valor de las fuentes visuales para reconstruir dinámicas laborales habitualmente omitidas en los registros escritos, y de Rebeca García Haro, que a través del estudio de los libros de trajes ilumina prácticas cotidianas y actividades apenas documentadas. Según señaló, estas perspectivas amplían los marcos interpretativos y muestran la necesidad de explorar fuentes diversas para comprender la complejidad del trabajo en la Edad Moderna.

Subrayó también el esfuerzo colectivo para ordenar y sistematizar un volumen considerable de datos dispersos sobre las actividades desempeñadas por mujeres en distintos contextos. Destacó, en esta línea, los estudios de Cristina Ramos, Raúl M. Fernández, Ángel Ignacio Aguilar Cuesta, Luis Garrido-González, Francisco Hidalgo, Pilar Pezzi Cristóbal, Raúl Ruiz Álvarez y Margarita M. Birriel Salcedo, que revelan una participación constante en todos los sectores productivos: agricultura, manufacturas, comercio local y transatlántico, talleres artesanales y ámbitos de gestión económica, tanto doméstica como institucional.

Finalmente, Gálvez llamó la atención sobre la importancia que los capítulos conceden a factores como etnia, clase social, edad o estado civil, elementos indispensables para analizar la diversidad de trayectorias laborales y la estructura de desigualdades que condicionó la vida de las mujeres en la Edad Moderna..

A continuación, la catedrática Inmaculada Arias de Saavedra Alías presentó los resultados del proyecto TRAMA, que por primera vez ha permitido reconstruir un mapa amplio y comparado del trabajo de las mujeres en Andalucía entre 1450 y 1808. Además, calificó los resultados como “extraordinarios”, tanto por la magnitud de los datos como por su capacidad para replantear las explicaciones tradicionales de la economía preindustrial y situar a las mujeres en el lugar que les corresponde dentro de la historia social y económica.

El cierre del acto correspondió a Margarita M. Birriel Salcedo, quien destacó el valor colectivo e interdisciplinar de la obra y agradeció la contribución de todas las autoras y autores participantes. Recordó que el libro no pretende añadir un capítulo complementario a la historia tradicional, sino mostrar que la historia del trabajo está incompleta sin las mujeres, porque su actividad, reconocida o no, sostuvo hogares, talleres, campos, negocios y redes de intercambio que hicieron posible la vida social de la Edad Moderna. La profesora animó a continuar ampliando estas líneas de investigación, conscientes de que aún quedan muchos espacios por explorar y muchas voces por recuperar.

Mujeres, Género y Trabajo en la Edad Moderna reúne a especialistas de referencia nacional e internacional y se articula en tres grandes secciones

Mujeres, Género y Trabajo en la Edad Moderna reúne a especialistas de referencia nacional e internacional y se articula en tres grandes secciones. La primera parte aborda los principales avances historiográficos y metodológicos de las últimas décadas, con aportaciones de investigadoras como Carmen Sarasúa, que traza un balance del medio siglo de estudios sobre el trabajo de las mujeres; Maria Ågren, que propone un enfoque innovador centrado en las prácticas del “hacer” más que en las categorías laborales; y Ofelia Rey Castelao, que analiza el papel de las mujeres en los movimientos migratorios y sus implicaciones laborales.

El segundo bloque se adentra en las fuentes y los archivos a través de estudios que revelan el potencial de una lectura crítica con perspectiva de género. Desde las reflexiones de Eva Martín López sobre la descripción archivística hasta los análisis de fuentes visuales de María Aurora Molina Fajardo, los libros de trajes renacentistas estudiados por Rebeca García Haro o la relectura notarial propuesta por Maribel Díez Jiménez, esta sección demuestra cómo las mujeres reaparecen cuando se formulan nuevas preguntas y se cuestionan los sesgos heredados.

La tercera parte ofrece una panorámica inédita del trabajo de las mujeres en Andalucía a través de estudios provinciales que reconstruyen una diversidad sorprendente de actividades económicas. Las aportaciones de Cristina Ramos, Raúl Fernández, Ángel Ignacio Aguilar Cuesta, Luis Garrido-González, Francisco Hidalgo, Pilar Pezzi Cristóbal, Raúl Ruiz Álvarez y Margarita M. Birriel Salcedo dibujan por primera vez un mapa detallado y comparado de la participación femenina en los siglos XV al XVIII, demostrando que su contribución fue tan amplia como decisiva.

El volumen, en conjunto, redefine la comprensión del trabajo en la Edad Moderna y confirma que las mujeres han estado siempre, en todos los espacios de actividad, visibles o invisibles, reconocidas o no, y que solo integrando su presencia es posible construir una historia completa.