Formada inicialmente por una treintena de mujeres comunicadoras de Granada y provincia, la asociación nace con la convicción de que es preciso trabajar por un periodismo riguroso y veraz junto a nuestros compañeros, para lograr una información y comunicación que respete y fomente la igualdad y el respeto a los derechos de las mujeres sin importar su condición, raza o creencias, con el objetivo de fomentar el ejercicio de la comunicación desde una perspectiva de género, eliminando el lenguaje y el tratamiento de imágenes sexistas y haciendo visibles a las mujeres como parte integrante de la sociedad, los temas que les afectan y preocupan, y su aportación a la sociedad en todos los ámbitos.

Por todo ello se entiende necesario crear espacios de encuentro, reflexión y análisis como base de una acción dirigida a combatir en todos los ámbitos las desigualdades, invisibilidades y violencias que se ejercen contra las mujeres y de forma especial, por el carácter de nuestra asociación. 

La Asociación Comunicadoras Granada toma como suyas las reivindicaciones con las que las 'Periodistas Paramos' salieron a las calles de ciudades y pueblos el 8 de marzo de 2018. “Con esta nueva fuerza y con las lecciones y aprendizajes de todas las mujeres que en la historia común y familiar han luchado desde hace décadas por un mundo mejor, libre de discriminación y violencias hacia nosotras, estamos convencidas que podremos mejorar nuestra sociedad”.

“Socio cómplice en la igualdad”

Con el convencimiento de que el papel de los medios de comunicación es fundamental para el desarrollo de una sociedad igualitaria, y que esa tarea es responsabilidad de todos, la Asociación Comunicadoras Granada incluye la figura del “socio cómplice en la igualdad”.

Según se recoge en los Estatutos de la asociación, registrados oficialmente, podrán ser socias las mujeres licenciadas o graduadas en Ciencias de la Información, Periodismo, Comunicación Audiovisual, y Publicidad y Relaciones Públicas, así como las tituladas en el ámbito de la Comunicación por otras instancias formativas regladas, cualquiera que sea su situación laboral. También se abre la asociación a mujeres cuyo ejercicio profesional esté estrechamente relacionado y/o vinculado con la Comunicación, el Periodismo y la Publicidad y a estudiantes.

Se crea la figura de “socio cómplice en la igualdad” para aquellos compañeros de profesión que comparten los ideales del fomento de la igualdad en los medios de comunicación, y la de “Socias y socios aliados” para personas de reconocida trayectoria en su compromiso por la igualdad.

En este sentido en el acto del sábado se nombró como “socia aliada” a la histórica redactora del diario IDEAL, Mª Victoria Fernández, por su larga y reconocida lucha por la igualdad.

La asociación exige a los medios de comunicación, empresas periodísticas, instituciones y organizaciones del sector: 

1. Ante la brecha salarial, que es una realidad en el sector: transparencia salarial y una revisión de categorías, complementos y criterios profesionales que permitan acabar con ella. 

2. Techo de cristal y suelo pegajoso. Las direcciones de los medios y empresas periodísticas están copadas por hombres. La asociación reivindica el derecho de las mujeres a ocupar puestos de poder y responsabilidad y a que se nos tenga en cuenta en las promociones profesionales para puestos intermedios.

 3. Precariedad. Las mujeres sufren niveles de temporalidad superiores a los de sus compañeros. Denuncian la inestabilidad laboral de las compañeras freelance y de las falsas autónomas, una situación de precariedad que se ha hecho habitual en los últimos años.

 4. Corresponsabilidad y cuidados. Denuncian que las dinámicas de trabajo priorizan el presentismo y la libre disposición y son ajenas a las necesidades de cuidado que tienen todas las personas. En este sentido creen que la corresponsabilidad y la flexibilidad no deben ser un asunto de buena voluntad sino una prioridad que las empresas deben asumir para que estas tareas se repartan por igual entre mujeres y hombres. Como en otros sectores, una ausencia de conciliación real perjudica más a las mujeres, que acaban modificando o recortando sus horarios para poder cuidar e incluso abandonando su empleo o cambiando de profesión.

 5. Acoso sexual y laboral. Son muchas las periodistas que han sufrido por parte de compañeros y superiores, pero también de fuentes, situaciones de acoso sexual. Por otro lado, el ninguneo, la condescendencia, el paternalismo y los mansplaining están a la orden del día en las redacciones y fuera de ellas, en nuestra actividad diaria. Como profesionales de la comunicación, apunta el colectivo, sufrimos acoso online, además de comentarios violentos y machistas en nuestras piezas.

6. Los espacios de opinión y las tertulias están masculinizados. Hay más que suficientes mujeres periodistas y expertas que pueden equilibrar esos espacios. 

7. Mirada parcial y preocupación por los enfoques. Todas estas brechas que sufrimos las periodistas tienen consecuencias, también en los contenidos y en los enfoques de los medios de comunicación. La visión de la realidad que transmiten es muchas veces parcial y está sesgada porque no tiene en cuenta en la misma medida las experiencias, los relatos y las vivencias de las mujeres que, a menudo, son tratadas como personajes secundarios o con estereotipos. Un ejemplo es el tratamiento de la violencia machista, que en muchas ocasiones sigue culpabilizando a la víctima. 

Red Estatal de Comunicadoras Feministas

La Asociación Comunicadoras Granada forma parte de la Red Estatal de Comunicadoras Feministas que incluye a: Red de Periodistas de Madrid, Asociación de Periodistas Feministas de Castilla y León, Plataforma Colombine (Periodistas Feministas Región de Murcia),  Asociación para la Defensa de la Imagen Pública de las Mujeres (ADIPM), “Les Beatrius” xarxa de dones professionals valencianes per un periodisme feminista, Comunicadoras8M, Comfem xarxa de comunicació feminista de les Balears, Xornalistas Galegas, Marea Violeta (Jerez de la Frontera), Vivas Comunicadoras (Canarias) y Plumas Moradas (Bruselas).