Sierra Nevada, Ahora y siempre.
Con las dos últimas asesinadas, se iguala ya la cifra del año pasado y aún no ha concluido 2022

La Volaera recuerda a las víctimas de violencia machista de 2022 con 78 tumbas en la Plaza del Carmen

Ciudadanía - Cristina Prieto - Jueves, 24 de Noviembre de 2022
Te informamos de un acto muy especial, protogonizado, en la víspera del 25N, por una de las asociaciones feministas más activas de Andalucía.
Instalación de La Volaera, en Plaza del Carmen.
C.P.
Instalación de La Volaera, en Plaza del Carmen.

Setenta y ocho lápidas con sus correspondientes esquelas han tapizado la Plaza del Carmen en un acto de homenaje a otras tantas mujeres asesinadas este año por serlo y entre las que se encontraba una con el nombre de Vanesa, la adolescente de catorce años que encontró la muerte a manos de un violador el pasado viernes en una localidad del Sur de Francia y será enterrada el próximo martes en Granada donde residió junto a su familia. De las 78 mujeres asesinadas -38 de ellas en el ámbito de la pareja- cuatro eran granadinas. El recuerdo a estas víctimas, organizado por la asociación La Volaera de Granada en el marco del Día Internacional para la eliminación de la violencia de género que se conmemora mañana 25 de noviembre, quiere lanzar un mensaje a toda la sociedad para terminar con el goteo de feminicidios que se sucede año tras año sin que las cifras apunten un descenso. Con las dos últimas asesinadas, se iguala ya la cifra del año pasado y aún no ha concluido 2022.

Mar Chambó Cano, integrante de La Volaera y madre de María del Mar Contreras Chambó, asesinada en el campo de tiro de Las Gabias en 2018. Dejado la lápida que la recuerda.

Junto a las setenta y ocho tumbas, integrantes de La Volaera han recordado, una a una, a todas las víctimas y han leído un manifiesto, dirigido a los maltratadores, con cada una de las violencias que las mujeres soportan como destinatarias del terrorismo machista

María Martín Romero, presidenta de La Volaera, ha señalado que “es terrible que la violencia machista no sea una prioridad para todos los gobiernos –estatal, autonómico y local- a quienes sólo importan las mujeres el 25 de noviembre o cuando asesinan a una víctima para hacerse una foto”. Martín ha denunciado que a las mujeres las “matan todos los días por el hecho de ser mujeres y la prioridad de cualquier gobierno tiene que ser salvarlas”.

Mar Chambó Cano, integrante de La Volaera y madre de María del Mar Contreras Chambó, asesinada en el campo de tiro de Las Gabias en 2018, ha denunciado que “no se están poniendo los medios necesarios” para terminar con los feminicidios porque desde la “ejecución” de su hija no ha visto hacer nada excepto observar a algunos “ponerse en la foto para quedar bien”. Chambó ha manifestado estar “muy harta y muy cansada, como otras mujeres, de seguir luchando para que no nos maten por ser mujeres”. Ante los medios de comunicación recordó que a su hija la asesinaron “por decir no, sin ninguna posibilidad de supervivencia y a sangre fría”. La madre de esta joven de veintiún años, asesinada de un disparo en la cabeza, se pregunta “de qué sirve denunciar si después hay que volver a la casa familiar y continuar con el maltratador detrás”. Para esta víctima es fundamental que “las amigas o las personas que conozcan la situación de maltrato no callen porque se convierten en cómplices”.

Junto a las setenta y ocho tumbas, integrantes de La Volaera han recordado, una a una, a todas las víctimas y han leído un manifiesto, dirigido a los maltratadores, con cada una de las violencias que las mujeres soportan como destinatarias del terrorismo machista. A su lado se encontraba también en este acto las hermanas de Mónica, la panadera de Fuentes de Cesna asesinada por su marido el pasado 25 de enero.

Manifiesto

“La violencia física que sufrimos cuando nos golpeáis, nos empujáis, nos agarráis…

Cuando psicológicamente nos vejáis, nos reducís a nada, nos insultáis, avasalláis, nos controláis...

Cuando nuestra sexualidad se convierte en un elemento más de dominación a vosotros, de sometimiento, nos humilláis, nos acosáis, nos violáis…

Cuando no aceptáis la realidad que hay detrás de vuestros trabajos, cuando impedís que podamos llegar a ser igual de importantes que vosotros en nuestros espacios laborales, cuando no reconocéis y remuneráis adecuadamente nuestro trabajo…

Cuando me impedís hacerme cargo de nuestro patrimonio compartido, cuando no reconocéis y me infavaloráis a la hora de gestionas nuestros recursos, mis recursos, frutos de mi trabajo y mi tiempo…

Cuando me sometéis a la humillación de depender de unos servicios públicos que no entienden nuestra realidad, ni el sufrimiento que hay detrás de la violencia que ejercéis sobre nosotras. Cuando las propias instituciones que tienen que protegernos las convertís en elementos y espacios con el que seguir humillándonos, agrediéndonos…

Cuando no podemos sentirnos seguras ni cuando estamos solas. Cuando internet y las redes sociales se convierten en vuestros mecanismos de control, de acoso…

Cuando usáis a nuestros hijos e hijas para hacernos daño. Cuando ponéis en cuestión mi capacidad de quererlos y ocuparme de ellos…

Cuando os ensañáis con nuestros seres queridos. Cuando atacáis a quienes, por nuestras diferentes realidades, más vulnerables somos…

Contra la violencia física, psicológica, sexual, económica, patrimonial, institucional, digital, vicaria… contra todos los tipos de violencia. Contra el terrorismo machista.

¡Porque la violencia machista eres tú, maltratador!