La Federación de Servicios, Movilidad y Consumo (FeSMC) de UGT Granada denuncia que los problemas que está teniendo la Administración autonómica a la hora de sacar adelante las distintas licitaciones, es que las hace "a la baja, solo mira su ahorro económico", y por ello a las empresas "le resulta difícil, por no decir imposible, poder realizar el servicio con un mínimo de garantías".

A juicio de la UGT, "esta racanería de la Junta de Andalucía va a repercutir muy negativamente en miles de personas trabajadoras, mujeres en su gran mayoría, con ínfimos ingresos, que dependen de este precario trabajo para poder sacar adelante a sus familias. Estas personas trabajadoras se quedan en la estacada por la mala praxis del Gobierno de Juan Manuel Moreno Bonilla".

El sindicato explica que, según la información que maneja, se prevé una tercera licitación para los comedores desiertos y si una vez más quedasen sin adjudicación, entonces el Gobierno Andaluz llevaría a cabo el "Modelo de Gestión Propia", lo que supondría "una mayor precariedad laboral puesto que la ratio por monitor/a aumentaría, percepción de salario menor al actual y pérdida de derechos adquiridos por aplicación de convenio distinto al actual". Además, alerta, "se quedarían en la calle a miles de trabajadores y trabajadoras que actualmente prestan servicio directa e indirectamente en los comedores escolares puesto que no subrogarían al personal actual, sino con el que ya cuenta la Junta de Andalucía y las empresas suministradoras dejarían de abastecer a las adjudicatarias".

Todo esto, resalta UGT, "lo realizan en plena pandemia, lo que demuestra que las personas, y más si son trabajadoras, no le importan nada, y menos aún si son de clase humilde y trabajadora". "Con este panorama se presenta unas navidades muy negras y un futuro desalentador para las personas trabajadoras del sector y para sus familias", lamenta el sindicato que anuncia que tomará las medidas a su alcance, incluidas jurídicas, "para que no se lleve a cabo".