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La Junta elimina una antigua chopera de cultivo en la Sierra de Huétor "con un notable deterioro", que sustituirá por árboles de ribera

Ciudadanía - IndeGranada - Lunes, 16 de Diciembre de 2024
Visita a la zona donde se realizan los trabajos selvícolas.
junta de andalucía
Visita a la zona donde se realizan los trabajos selvícolas.

La Consejería de Sostenibilidad y Medio Ambiente de la Junta de Andalucía está llevando a cabo una "importante actuación de restauración" en el entorno del arroyo de Prado Negro, a su paso por la finca de La Ermita, en el Parque Natural Sierra de Huétor. Esta intervención forma parte de un ambicioso proyecto, que, con el nombre de Tratamientos Selvícolas Preventivos contra Incendios Forestales en Montes Públicos del Puerto de La Mora, dispone de un presupuesto de licitación de 1,3 millones de euros.

Según indica en un comunicado, la intervención incluida en el proyecto se centra en la eliminación de una antigua chopera "de origen artificial" situada en el paraje de La Ermita, uno de los lugares más visitados del Parque Natural. "Esta chopera, con una densidad de 652 pies por hectárea, presentaba un notable deterioro debido a la presencia de árboles caídos, debilitados y muertos. Con la intervención, se evita el riesgo que suponía para los senderistas las condiciones en las que se encontraba el terreno y se avanza en la prevención de incendios forestales en el entorno", explica la nota.

El delegado, Manuel Francisco García, ha destacado la importancia de los trabajos "para prevenir incendios", señalando que “las masas forestales del Puerto de la Mora cuentan con una elevada densidad de árboles con copas entrelazadas, la concentración excesiva de matorral y la acumulación de ramas en encinares y quejigales en estado de monte bajo”.

Caída de árboles con viento o nieve

En concreto, la chopera intervenida ocupa una superficie de 16,82 hectáreas en la ribera del arroyo de Prado Negro, que se convierte más adelente en las primeras aguas del río Fardes. Se trata de plantaciones de árboles de producción agrícola con más de 30 años de antigüedad, con fustes menores a 20 centímetros, que han sufrido daños significativos por ataques de plagas de perforadores. Estas plagas generan galerías en los troncos y ramas, debilitando la estructura de los ejemplares y provocando su caída durante episodios de viento o nieve.

“La eliminación de estos pies decrépitos y de escaso porvenir no solo reduce el riesgo para los visitantes, sino que también mejora la seguridad y eficacia de los trabajos de extinción en caso de incendio”, ha indicado el delegado, que ha precisado que “el proyecto contempla el mantenimiento de una franja lineal al borde del río, con árboles sanos como protección al curso fluvial, junto con la plantación de 700 ejemplares de especies propias de ribera que diferencien el tránsito de un tipo de vegetación a otro, formado un paisaje mosaico que minimice o detenga la evolución de un incendio forestal”.

A la derecha, el delegado de la Junta, Manuel Francisco García, y al fondo, maquinaria usada en los trabajos selvícolas. j.a.

El proyecto no se limita a la intervención en la chopera. Abarca un total de 253,82 hectáreas divididas en 23 rodales, donde se prevé el acondicionamiento de 677 metros de dos caminos forestales principales y la mejora de 5.623 metros lineales de caminos secundarios que dan acceso a las áreas de actuación. Estas mejoras "son esenciales para facilitar el acceso del personal y la maquinaria destinada a los trabajos forestales y de extinción", dice la Delegación de Sostenibilidad.

Así, Manuel Francisco García ha detallado que “entre las tareas ejecutadas, sobresale la eliminación de vegetación sobrante para crear discontinuidades y cambios en la distribución de la masa forestal”, puntualizando que “estas medidas dificultan o incluso impiden la propagación de incendios al reducir la disponibilidad de combustibles”.

En este contexto, el titular de Sostenibilidad y Medio Ambiente en la provincia ha afirmado que ”la seguridad de los equipos de extinción depende en gran medida de estas acciones preventivas, que sirven como apoyo fundamental para las estrategias de lucha contra el fuego”. 

El delegado también ha enfatizado la importancia de estas intervenciones en el contexto del cambio climático, que pronostica un incremento en la frecuencia y severidad de los incendios forestales. “Estos trabajos no solo reducen la vulnerabilidad frente a incendios, sino que también aumentan la capacidad de fijación de carbono, contribuyendo así a mitigar el impacto del cambio climático”, ha sentenciado García. 

Sostenibilidad y seguridad 

"La mejora de las masas forestales en el Parque Natural Sierra de Huétor son ejemplos del compromiso de la Junta de Andalucía con la sostenibilidad medioambiental y la seguridad de los espacios naturales protegidos. Estas actuaciones no solo buscan preservar el patrimonio natural, sino también garantizar que los visitantes puedan disfrutar de estos entornos con tranquilidad", indica la Junta. 

El delegado ha asegurado que “el objetivo es transformar estas áreas en espacios más resilientes, donde las condiciones ecológicas favorezcan la regeneración natural y la biodiversidad”. 

El Parque Natural Sierra de Huétor es un enclave de extraordinaria belleza y diversidad ecológica. Su paisaje combina zonas de bosque mediterráneo, encinares y quejigales que albergan una rica fauna y flora. Este espacio protegido es también un importante recurso turístico y educativo, que atrae a miles de visitantes cada año. 

Con la restauración del cauce del río Fardes y el resto de las intervenciones previstas, la Junta de Andalucía "reafirma su compromiso con la protección y gestión sostenible de los espacios naturales. Las actuaciones en el Parque Natural Sierra de Huétor son una muestra de cómo las acciones preventivas y de restauración pueden contribuir significativamente a la conservación del medio ambiente y al bienestar de los ciudadanos que disfrutan de estos entornos", finaliza la nota.